-Cuando era joven ingrese al equipo de baloncesto para impresionar a un chico – dijo Clara sonriente – Se caso con mi mejor amiga.
Estábamos en la décima sesión con Clara. Habían pasado dos semanas desde el incidente con Ian, había logrado que Ian confiara en mí, pero no lo suficiente como para decirme quien lo había lastimado, según sus palabras el jamás diría quien lo había hecho porque quería dejar todo en el pasado y así había pasado con la mayoría de los alumnos, muchos habían olvidado el asunto y seguían yendo a las sesiones con Clara porque eran como un descanso a todo el estrés que enfrentábamos en la Universidad. En ese momento teníamos que contar nuestra peor experiencia amorosa porque era una 'actividad' de confianza aunque yo creía que Clara solo se quería burlar de nosotros.
-En mi baile de graduación mi pareja me abandono – dije y pude que muchos comenzaron a reír – Esa ha sido lo más cercano que he tenido a una experiencia amorosa.
-No he tenido muchas experiencias amorosas – comenzó Matthew – Las chicas no quieren estar cerca de alguien tan inmaduro como yo, eso dice mi hermana – todos miramos a Cyci – He estado enamorado de una de las amigas de mi hermana desde hace mucho tiempo, eso es probablemente lo peor y mejor que me pudo haber pasado – termino y antes de que alguien dijera algo salió corriendo con una Cyci detrás de él.
Llegue a mi habitación donde estaban todas las chicas lo que me confundió ya que no solíamos reunirnos, Cyci estaba sentada en mi cama y se miraba terriblemente preocupada.
-¿Por qué no me avisaron que había reunión? – pregunte.
-Nunca creí que él se tomara mis comentarios tan en serio – comenzó Cyci – Quiero decir, ¿Cómo un chico como él puede tener tan mala autoestima?
-¿No es algo raro que tu estés enamorada de uno de los amigos de tu hermano y el de una de tus amigas? – pregunto Dani.
-¡No estoy enamorada! – se sobresalto – No lo pude alcanzar cuando salió del salón y aunque lo hubiera hecho estoy segura de que se hubiera negado en escucharme.
-Creo que aquí estamos olvidando lo más importante –dijo Candy - ¿De quién está enamorado?
-¿Puedes hablar con él? – pregunto Cyci dirigiéndose a mí.
-¿Yo?, ¿Por qué yo? – me apresure a preguntar.
Me dirigía con Matthew, Cyci había logrado convencerme, según ella y las chicas, yo hacía sentir mejor a las personas cuando estaban mal y también me escuchaban y cuando quise decirles que estaban equivocadas pusieron por ejemplo a Ian.
Estuve buscando a Matthew por todo el campus, inclusive pregunte por el pero no obtuve respuesta. Ingrese al edificio donde Shawn vivía, mi intensión era preguntarle si sabia cual era la habitación del gemelo de Cyci. Cuando entre al edificio sabía que había posibilidades de ver cosas que no debía ver, después de todo ahí vivían hombres. Empecé a temblar cuando todos me miraban extrañados, no era común que una chica ingresara a los edificios de hombres. Después de haber visto a miles de chicos sin camisas llegue a la habitación de Shawn.
-¿Lucia?, ¿Qué haces aquí? – pregunto el castaño dejándome ingresar a su habitación.
-¿Sabes cuál es la habitación de Matthew? – pregunte.
-Comparte habitación con Nash– dijo – Es la puerta que está en frente.
Agradecí a Shawn y me disculpe por haber llegado sin avisar. Choque con un torso desnudo lo que ocasiono una caída de mi parte.
-Disculpa, soy un po... - pare de hablar cuando me di cuenta de quién era el dueño de esa sonrisa de autosuficiencia que simplemente no podía odiar.
-Torpe – dijo y me ofreció su mano para ayudarme a levantar, mano que ignore - ¿Qué haces aquí?
-Son mis asuntos –dije tratando de no distraerme con el hecho de que no estaba usando una camisa.
-Estas temblando – noto - ¿Te pongo nerviosa?
-No.
Ingrese a la habitación que Shawn me había señalado, no quería seguir hablando con Gilinsky. Cerré la puerta detrás de mí y cerré los ojos tratando de calmar mis nervios. Al abrirlos me encontré con un Matthew confundido pero había algo más allá de eso, Matthew no estaba sonriendo, en todos los años que tenia de conocerlo nunca había visto una imagen tan seria de su parte.
-¡Hola! – grite, esa no era exactamente mi intensión.
-Hola – Y fue ahí donde me di cuenta que algo no estaba bien con el chico que frecuentemente pretendía ser un dinosaurio.
Me dirigí a la cama que estaba a un lado de la de Matthew la cual supuse pertenecía a Nash Grier.
-Soy Lucia Bell – dije, no sabía cómo iniciar una conversación con él.
-Matthew Espinosa – dijo con una sonrisa, la primera sonrisa que miraba de él en todo el día – Se quién eres, eres una de las mejores amigas de mi hermana, te conozco hace tiempo, ¿Por qué te presentas?
-No recuerdo haberme presentado antes – sonreí.
-Cyci te dijo que hablaras conmigo, ¿Me equivoco? – pregunto – No necesito hablar con nadie.
-Está bien – dije y me quede sentada en mi lugar recibiendo mirada de Matthew – No dijiste que no necesitabas compañía.
-¿No te irás hasta que hable contigo? – negué – ¿Crees que soy inmaduro?
-Si – dije y el bufo - ¿Qué hay de malo en eso?
-Ella nunca se fijaría en mí, nadie quiere estar con un chico inmaduro.
-¿Entonces qué vas a hacer? – pregunte.
-Voy a cambiar por ella.
-Entonces ella se fijaría en una persona que no eres.
-Por favor no digas que tengo que ser yo mismo, he sido yo mismo desde hace mucho tiempo y ella no sabe de mi existencia – comento.
-¿Has hablado con ella? – negó - ¿Cómo se puede fijar en ti cuando nunca has hablado con ella?
-¡Soy el hermano de su mejor amiga!
Entonces me di cuenta de que los gemelos Espinosa no eran tan distintos después de todo.
Cyci estaba enamorada de uno de los mejores amigos de Matthew y Matthew estaba enamorado de una de las mejores amigas de Cyci.
Las personas que aparentan ser las más alegres son las que más sufren. Si alguien me hubiera dicho que Matthew Espinosa sufría de amor jamás lo hubiera creído.