LA NERD ES ¡MODELO!. - 1 y 2.

f o u r.

Barbara's POV.

- Sube arriba y vístete, me he encargado de que te compren un vestido para esta noche. - Candice bosteza mientras baja del coche.

- Bien, ¿vendrás? - pregunto.

- Claro, por si no te acuerdas, soy la que ha conseguido que te inviten. - sonríe con suficiencia.

- Egocéntrica.

Entro en la casa y antes de subir las escaleras, me giro y le mando un besito con la mano.

Candice reacciona riendo y se dirige a la cocina ignorándome.

Termino de subir las escaleras y entro en mi habitación.

[...]

Salgo de la ducha y me seco con una toalla.

Camino hacia mi cama y en ésta, se encuentra un vestido azul marino de encaje perfectamente doblado. Es muy bonito.

Rápidamente me quito la toalla y me lo pongo, voy a la habitación de los zapatos y escojo unos plateados terminados en punta.

Abro la puerta y miro alrededor.

- ¡¿LUKE?! ¡¿MIKE?! - grito.

Justo, los dos salen de la puerta de al lado fulminándome con la mirada.

- No estamos sordos, pero al parecer ahora sí, gritona. - Mike rueda los ojos y río.

[...]

- Lista. - dice Luke, gira la silla y me observo en el espejo.

- Gracias chicos, ¿sabéis qué? - pregunto sonriendo.

-  ¿Qué? - dicen al unísono los dos con curiosidad.

- Sois los mejores maquillando. - levanto mi dedo pulgar y me levanto de la silla.

一 ¿Acaso dudabas? - Mike echa su tupé hacia atras y hace una pose de diva.

- Ese cumplido iba hacia mí, tú no sabes ni siquiera lo que es un eyeliner, Mike. - Luke rueda los ojos y ordena todo el material usado.

Río y salgo de la habitación dejándolos solos.

Bajo los escalones de uno en uno, encontrándome con Candice vestida con un vestido rosa pastel, y unos tacones color crema junto a una cartera y una chaqueta de cuero negra.

- Vas genial. - le subo el ego a mi amiga mientras bajo el último escalón.

Ella se gira a verme y sonríe.

- Tú no te quedas atrás. Pero he de decir que siempre me veo mejor que tú. - bromea.

Candice abre la puerta y sale, conmigo detrás.

Vamos andando, lo normal, ya que si la casa está al lado, no vamos a gastar gasolina, hay que cuidar el medio ambiente, señoras.

Río internamente por mis absurdos pensamientos y pongo mi atención en la gran casa que está delante de nosotras. Mi amiga toca el timbre, y a los segundos se escuchan pasos acercándose.

- ¡Hola chicas! Veo que habéis venido, es un gusto conocerte Barbara. - una señora nos abre sonriente.

- Claro, la convencí yo. - Candice ríe, y segundos después la mujer se une.

- Igualmente... - sonrío.

- Marissa Lachowski, pero llámame Mari. - sonríe mostrando sus dientes y se aparta un poco de la puerta.- Pasad chicas, id al living, en un minuto os alcanzo.

- Claro. - contesta Candice pasando al interior de la vivienda.

La sigo y llegamos al salón. Observo el lugar, es muy espacioso, con los típicos cuadros familiares, jarrones...

- ¡Ian, baja a saludar! - grita Mari, sobresaltándome un poco.一 Ian es mi hijo, tiene vuestra edad. - explica Marissa.

¿Por qué, Marissa? ¿Por qué?

Candice asiente y cuando iba a decir algo, Ian la interrumpe.

- ¿A quién hay que saludar mamá? - llega Ian y rueda los ojos. Sera maleducado.

- A ellas, bebé. - lo coge de los cachetes y se los aprieta señalándonos.

Sin querer, se me escapa una risita llamando la atención del anterior, que me mira con los ojos abiertos.

- ¿Barbara Palvin? - dice sorprendido.

Asiento y le extiendo mi mano para que la estreche, que hace casi al instante.

- Hola. - lo saludo reteniendo todos los insultos que se me ocurren decirle.

- Soy muy fan tuyo. - me mira de arriba a abajo con una sonrisa de oreja a oreja.

- Yo soy Candice Swanepoel. - sonríe.

- Oh, perdona, se me había olvidado saludarte, es un gusto conocerte. - se gira sonriendo hacia Candice.

- Bueno, ya vale de saludos, ¡vamos a comer! - interrumpe Marissa, asiento y junto a mi amiga, caminamos hasta la mesa del comedor.

Retiro la silla de la mesa y me siento.

- Y bueno, ¿cómo te va aquí? - empieza Marissa una vez ya todos sentados.

- Bien, ya sabes, sesiones, algún que otro evento... - le quito importancia.

Ella asiente sonriendo y le hace un gesto a una mujer que se encuentra retirada de la mesa, ella rápidamente afirma con la barbilla y desaparece por los pasillos.

[...]

Hace un rato que hemos terminado de comer, ha sido bastante incómodo, ya que nadie hablaba, todos estábamos inmersos en el delicioso plato.

Ahora me encuentro sentada en el sofá.

- ... y por eso mi marido no está aquí. - explica Marissa, Candice y yo asentimos aburridas.

- Mamá, no creo que eso les importe. - rueda los ojos por segunda vez en la noche.

- Sube arriba Ian, no tienes por qué estar aquí. - señala hacia las escaleras, y segundos después, Ian ya ha desaparecido.- Querida, ahora que mi hijo no está, me gustaría proponerte modelar para nuestra marca.

- Claro, me encantaría. - esto es una gran oportunidad que no se puede desperdiciar.

- Si, estaría bien para ella, ¿aclaramos mañana las cosas y el papeleo? - pregunta Candice.- No dormí bien anoche.

- Si, a las doce de la mañana me va bien, si estás ocupada, puede venir sólo ella. - habla.- La dirección se la mandaré mañana a Candice, ¿de acuerdo?

- Uh, está bien. - finaliza mi amiga y yo asiento.

- Entonces nos iremos ahora, ha sido todo un placer venir, Mari. - Candice se levanta y sonríe ampliamente.

- Ha sido un placer conversar con usted, señora Lachowski.

- Igualmente, y ya te dije que me llamaras Mari. - sonríe acompañándonos hacia la salida.

Una vez en la puerta, nos despedimos y caminamos hacia nuestra casa. Suspiro.

Hoy ha sido un día ocupado, espero que los siguientes sean más tranquilos.

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