Pase lo que pase, siempre estaré contigo

Capítulo 44

No es un adiós, es un hasta pronto

Emma

Verlo parado frente a mí, se me hacía más difícil decir adiós.  No es lindo despedirte del amor de tu vida de esta manera.  

Él se acercó y yo me arrimé para que se sentara a mi lado.

- ¿Te vas a rendir?

- No puedo más.  Me duele todo el cuerpo.  Me siento mal, el dolor que siento, del 1 al 10 es un 1000.  Te juro que me gustaría seguir luchando, seguir viviendo, pero no puedo más.  Lo siento tanto Niall.

- Tranquila, es solo que el saber que te voy a perder, me destroza el corazón en un y mil pedazos - Empezó a llorar - Emma, eres lo más maravilloso que me ha pasado en la vida.  Aún recuerdo y jamás olvidaré el día que te conocí.  Estabas sola, tan inocente cuando esa pelota cayó en ti.  Cuando vi tu rostro, tuve que pestañear varias veces porque juraba haber visto al más bello ángel - Me acaricia la mejilla en la cual las lágrimas de dolor caían - Y si eres el ángel más bello.  Cuando me dijiste que aceptabas salir conmigo me puse nervioso porque jamás creí que una chica como tú saldría con alguien como yo, pero tú me enseñaste a amar, a creer en el amor verdadero.  Cuando me dijiste que tienes cáncer, me dije a mi mismo que lucharía para estar juntos.  Cuando nuestros padres se interpusieron no me rendí porque te amo.  Eres el amor de mi vida, nadie va a reemplazarte.  Cada vez que vea tu escuela o escuche tu canción favorita, pensaré en ti.  Jamás te olvidaré. Uno solo puede encontrar el verdadero amor una vez, ya dependerá de los dos luchar por ese amor y eso fue lo que hicimos nosotros, luchamos y ganamos.  No importa el tiempo si estás con esa persona que amas.  Eres la luz de mi vida, tú eres el sol y yo la luna porque juntos formamos el día perfecto, porque nos complementamos.

Le sonreí mientras lloraba.

- Niall.  Eres el amor de mi vida, agradesco a mis amigas de que me llevaran a ese parque porque te conocí, pero te agradesco a ti por haberme salvado, por haber hecho de mis días los mejores, por sacarme una sonrisa en los peores momentos, por escucharme y apoyarme.  Mejor persona en el mundo no hay, persona como tú no hay, eres único.   Sé que si no nos hubiéramos conocido, nuestras vidas serían muy diferentes, tal vez tú con otra chica y yo ya muerta, pero tú me impulsaste a no rendirme, a seguir adelante.  Odio dejar este mundo, odio dejarte aquí, odio tener cáncer, odio mi destino pero tengo que aceptarlo.  Toma - Le di su carta de unas 3 o 4 hojas - Es la más larga que escribí, ahí expresaré mejor lo que siento físicamente y emocionalmente.  Léela cuando yo desaparezca.

- No digas eso.  Jamás vas a desaparecer.  Vas a estar aquí - Señaló su cabeza - En mis recuerdos, memorias.  Y aquí - Señaló su corazón - En mi corazón, en el inmenso amor que sentí, siento y sentiré por ti.  No es un adiós, es un hasta pronto.

- Te amo Niall Horan.

Se acercó y me besó tiernamente mientras acariciaba mi mejilla y nuestras lágrimas se juntaban.

Nos separamos y nos abrazamos fuertemente.

- Niall, ¿será que puedes llevarme a la parte trasera del hospital?

- No creo que sea lo adecuado.

- Por favor.

- Está bien.

Me ayudó a pararme y me puse una bata ya que a pesar de que había sol, tenía frío.
Trajo una silla de ruedas y me senté en ella y llevé el suero.
Entramos al ascensor y Niall me rodeó los hombros con su brazo y yo apoyé mi cabeza en su costado.

Salimos a la parte trasera, la cual sorprendentemente tenía un pequeño jardín con bancas.  Niall se sentó en una y yo me quedé a su lado.

- ¿Hablarás en mi funeral?