¿Destino o Casualidad? ®

Capitulo 7: "Estás en grandes problemas."

Capitulo 7: "Estás en graves problemas."

Miré como el liquido se iba derramando a mi blusa y se volvía un tono verde. Cerré los ojos frustrada y levante mi cabeza y observé como Evan abría la boca y se comenzaba a reír, después a Samantha la cual apretaba la mandíbula, acto seguido, ella agarraba unas cuantas lechugas con aderezo de mi plato y se las aventaba al chico de ojos verdes. Yo agarré mi jugo y se lo vertí en su cabeza. Su boca se formó una perfecta "o" mientras sacudía sus manos tratando de quitar el liquido de su cuerpo. Sonreí victoriosa y el agarro con su mano un puño de pasta y se lo aventó a mi amiga chocando en su pecho.

—¡GUERRA DE COMIDA! —. Alguien en la sala gritó y todos comenzaron a aventar comida por todos lados. Me volteé y visualicé unas papas fritas con queso derretido, se las avente a Evan y el paró de reír para fulminarme con la mirada. Corrí hasta la barra donde estaba toda la comida y tomé un cacho de lasaña, se la aventé al chico de ojos verdes el cual le había embarrado en el vestido un poco pizza a Samantha. El pedazo de lasaña choco en su espalda y se fue deslizando por sus músculos hasta caer al suelo. Me miró mal y se acerco lentamente a mi. Cuando estaba a punto de aventarse sobre mi me agaché esquivándolo y el cayó en un cacho de pastel. Reí y tome un plato de sopa, me acerqué a Evan de espaldas y le volteé todo el plato haciendo que su playera negra se volviera mas oscura. Imitó a el chico de ojos verdes sacudiendo sus manos y se volteó rápidamente hacia mi. Sus ojos se volvieron mas negros indicando que se había puesto furioso.

— Estás en graves problemas —. Dijo Evan antes de agarrar un poco de pasta de su amigo y embarrármela en el cabello. Agaché mi cabeza y varios espaguetis cayeron al suelo, apreté mi mandíbula y tome un puño de puré de papa que estaba en una mesa y se lo unté en la cara. Reí y antes de quitar mi mano la cual seguía en su cara esparciéndolo, vi a Samantha golpeando al chico de ojos verdes en su entrepierna (el cual tenía la cara prácticamente llena de pastel, la espalda de lasaña y la camisa roja que estaba un poco mas oscura probablemente mi amiga le había vertido algún liquido) así que vi la oportunidad de salir de ahí, quite mi mano del rostro de Evan y lo golpeé al igual que Samantha; en sus partes,  salí corriendo y tomé a Sam de el antebrazo mientras salíamos corriendo de ahí. Entramos a nuestra habitación riendo e inmediatamente nos duchamos. Nos saltamos las demás clases y decidimos salir a pasear. Me coloqué el vestido que decidí ponerme en la mañana y Sam llevó uno azul fuerte, acompañe mi vestido con una chamarra de mezclilla negra, y ella un saco negro. Salimos de ahí con nuestros respectivos bolsos y música. Ahora estábamos escuchando la música de ella. Colocó "Lilly Allen" con la canción de "Fuck You".

—¿Enserio? —. Pregunté incrédula y ella me miro inocente.— Esa canción es muy alegre —. Dije asqueada y ella se encogió de hombros.

—Me gusta esa canción, se la quiero dedicar a el chico de ojos verdes —. Dijo divertida. Reí y se me ocurrió algo así que paré inmediatamente.

—Me vas a amar cuando te diga lo que tengo planeado —. Admití y ella frunció el ceño.

—Esta bien, y tu el azul ¿okay? —Dijo Samantha y me quejé.

—Pero quiero el negroooo —Alargué actuando como una niña pequeña.

—Erika —. Advirtió firme y rodé los ojos asintiendo de mala gana —. Bien, arréglate que tenemos que ir hacia allá —. Ordeno y asentí, me coloqué el vestido azul marino con escote y con un cinturón beige en el abdomen. Me puse los zapatos del mismo color del cinturón y me maquille con un poco de base café, y beige en el párpado, rímel, delineador y un labial un café claro, me puse un poco de gloss encima para que brillara. Sonreí satisfecha y volteé a ver a Sam. Era un vestido un rosa pálido, con un cinturón café en la misma parte que yo, los zapatos beige y un poco de sombra del mismo color del vestido, con rímel y delineador. Agarré mi bolso que por lo menos era negro al igual que mi saco y en el bolso de mano guardé mi celular, maquillaje, cartera y por su puesto audífonos. Me hice una trenza francesa que era de lado y lo que sobraba lo recogí en un chongo. Sam dejo su cabello planchado y con un pasador recogía parte de su cabello castaño de lado. Salimos y nos dirigimos al edificio de los hombres, casi todos nos veían extrañados, ya que veníamos muy formales. Fuimos preguntando donde estaban las habitaciones de los chicos que buscábamos y al final las encontramos. Nos arreglamos los vestidos asegurándonos que estaba todo en orden y tocamos. Aparecieron dos chicos sexys sin camisa y con pantalón de mezclilla, me quede sin respiración al igual que Sam. Aclaré mi garganta y hablé.