6

387 18 3
                                    

Italia, Napoles.

Leonardo termino de cerrar la ultima maleta y sonrio. Estaba decidido a regresar a Argentina y volver a vestir la gloriosa camiseta de River. Era su oportunidad de recuperarse futbolísticamente e ir por cosas nuevas. Empezar de cero y reconstruir un poco de lo buena que era su vida (sin contar a Valentina), de eso se trataba.

Seria dificil desprenderse de alguien que lo habia marcado tanto en la vida y que, amaba mas que a todo. Pero si no empezaba a dejar las cosas en pasado, iba a entrar en un pozo de depresion mas grande que en el que estaba y no podria salir de ahi. 

Era hora de recuperarse y volver a ser todo lo que era.


Buenos Aires, Argentina.

La noticia le habia caido en el higado a Valentina. No podia creerlo.

-Valen, te sentís bien? -Le preguntó Matias asustado. Su novia estaba palida y parecia que habia visto un fantasma.

-Eh si... Solo... Solo necesito tomar algo de aire. Ahora vuelvo -Se levantó del sillon y se dirigio al patio. Se recosto en el pasto y suspiro.

"¿Por qué ahora? ¿Y si me reconoce? ¿Que hago?"

Miles y miles de preguntas y dudas rondaban por su cabeza. Habian pasado tres años desde que no se veian y de que todo habia terminado.

Tenia miedo de que todo cambiara y que, toda su felicidad finalizara ahi. No queria perder a Matias... 

-Hermosa... Estas bien? -Preguntó Matias sentándose a su lado.

-Si. Solo necesitaba tomar aire... Me duele un poco la cabeza- Respondio ella y le brindo una sonrisa.

-Veni -Le susurro el y abrio sus brazos para que ella lo abrazara. Valentina sonrio y rodeo sus brazos en su cuello, y el en su cintura. Matias le sonrio y depositó un dulce beso en sus labios, haciendola sentir viva otra vez. El tucumano si que sabia como tratarla.

-Sos muy hermosa, lo sabias? -Le dijo Krane y aparto un mechon de pelo que estorbaba en su rostro.

-Te odio cuando decís eso- rió Valentina.

-¿Por que? -Sonrió Matias acariciando su espalda.

-No me gusta que digas mentiras 

-¿En que miento?- Preguntó él.

-No soy linda...- 

-y yo odio que te mientas a ti misma... Sos hermosa y punto -Y con eso la besó apasionadamente en los labios.

"Basta mi niña ya no llores, olvida los temores y abrázame.... Seré tu ángel guardián. Tu mejor compañía.Toma fuerte mi mano, te enseñare a volar"

"Donde Hubo Fuego Aun Quedan Las Cenizas"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora