2

483 20 2
                                    

Italia, Nápoles.

La vida de Leonardo Ponzio ya no era la misma desde aquella noche en que su amada se marchó. Habían pasado tres años pero aún no lograba que todo volviera a ser como antes. 

Su carrera futbolistica iba en picada. Su rendimiento era muy bajo y ya casi ni sumaba minutos dentro del campo de juego. En resumen, estaba en la cuerda floja.

  Sus amigos ya no podian hacer nada. Lo habian alentado a que recuperara a Valentina y arreglara todo, pero, él los ignoro. Ella no queria que la  buscara y tenía que respetar su decisión por más que le doliera.

 Valentina no dejaba de rondar por su cabeza y sentía que se estaba volviendo loco. Siempre tenia visiones de ella y sueños. Los recuerdos no dejaban de atormentarlo. Estaba cansado de levantarse y no tenerla a su lado. No poder escucharla cantar por las noches cuando él no podía dormir. Pero por sobre todo, extrañaba sus dulces besos. La necesitaba demasiado.

-Ponzio! Si seguis con ese rendimiento no me va a quedar otra que sacarte del equipo -Le dijo el tecnico con algo de pena. Leonardo no respondio, solo asintió y agachó la cabeza - Aca no venimos a perder el tiempo. O levantas tu nivel o te olvidas de que te convoque a los siguientes partidos. Vos elegis - Finalizó y se fue. Ponzio soltó algunas lágrimas.

-Valentina, si no volves pronto voy a enloquecer -Se dijo a si mismo y rompió en llanto.

" Quisiera encontrarte algún dia en mi camino. ¿No ves que sigo atado a un recuerdo que no olvido? y tengo tantas cosas que decirte al oído. Mentiras o verdades que no importa, da lo mismo. Sigo sin saber nada de vos en este incendio"

"Donde Hubo Fuego Aun Quedan Las Cenizas"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora