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Llegue a casa me duche,sali del baño,elegi lo que me iba a poner,un jersie de lana blanco con un short floreado azul y unos botines negros.
Escuche el claxon de un auto y baje las escaleras corriendo tome las llaves un bolso de mano blanco con un lazo en el centro.
Sali de la casa y vi a Jonathan recostado a su auto con una camisa de vestir gris,un pantalón negro y unas vans grises,jugaba nervioso con una rosa blanca,me derreti en ese momento.
-hola-dije nerviosa
-hola-dijo con una sonrisa y se quedo conjelado en esa posición solo observándome,reí por de bajo y mire la rosa-hum lo siento-estiro la rosa-esto es para ti-puso su mano en la nuca nervioso.
-es hermosa
-como tu-me ruborize
-gracias
-de nada,entra-abrio la puerta del copiloto,reí nerviosa al entrar,segundos despues el estaba al lado mio,pasaron unos minutos antes de que uno hablara.
-¿andonde nos dirigimos?-pregunte al ver que estabamos saliendo de la ciudad.
-a un lugar que te gustara mucho-sonrió plácidamente mostrando sus perfectos oyuelos.
miraba por la ventana,el paisaje era increíble.
Creo que te va a llevar a la playa.
Chille dentro de mi cabeza.
Aaaa que emoción!
Que romántico
Suspire mentalmente.
-creo que ya se a donde me llevas-sonreía no podia ocultar la emoción.
-espero que no,aruinarias la sorpresa
Luego de unos minutos confirme mis expectativas.
Bajamos del auto,estiró su mano nervioso y yo la acepte,me quite mis zapatos al igual que el,caminabamos por la playa,descalzos,bajo la luz de la luna.
Que jodidamente romántico!
Su mano sudaba de lo nervios y a veces tambaliaba.
-¿estas nervioso?-reí disimuladamente pero no era en son de burla era por que no podia ocultar la emoción.
-Un poco-suspiro sacando la tension de su cuerpo y paramos.
-me pregunto por que sera-tomo mi otra mano y nos miramos unos segundos a los ojos,luego izo un gesto con la mirada para que volviera a ver a mi derecha,efectivamente lo ize y me encontré con algo hermoso.
Era un toldo decorado con luces y una mesa en el centro decorada con manteles blancos al igual que las sillas.
Esta vez no pude ocultar el grito augado.
-¿te gusta?-senti que mis piernas flaqueaban.
- me encanta-dije casi sin aliento.
Tomo mi mano y nos diriguimos al hermoso toldo.
Nos sentamos y la mesa estaba decorada con flores blancas de centro de mesa.
-¿lo hicieste tu?-pregunte llevandome un pedazo de carne a la boca,estaba delisionsa.
-digamos que la clases de cocina y el libro de "100 ideas románticas para una cena" me sirvieron-reímos
-¿seguro?...
-no-rio-isabella me dio la idea de una cena y mi tia preparo la cena,pero-izo una pausa dramática-yo pique la cebolla-reimos
-esta esquisita
