Sábado especial...

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El incidente del lunes fue olvidado rápidamente por todos, aunque Dani no paraba de aprovechar cualquier ocasión para molestar al grupo, ninguno cedió a sus juegos y pasaron de él. Clara y Javi estaban mejor que nunca, ni se podían imaginar que dos personas conspiraban para romper su relación. Y es que, mientras que el tiempo pasaba, Rocío y Miguel creían tener el plan perfecto para separarlos finalmente. Había  pasado la semana llena de risas y buen rollo entre los chicos y Clara.  En la academia, Clara, como era de esperar, era la más seria y responsable del grupo. Cosa que a los chicos les hacía tener que trabajar, ya que, al estar en la misma clase, Rosa se enteraba de todos los exámenes y deberes. El viernes quedaron todos juntos, repitieron su "rutina". Y, a pesar de que Clara y Javi se lo pasaron bien, los dos estaban deseando que llegase el sábado. 

Me estoy preparando desde las 15:30. Hoy Javi y yo vamos al cine y estoy muy nerviosa. He terminado de comer, me he duchado, me he lavado los dientes, me he desenredado, secado y alisado el pelo y me he llevado media hora eligiendo mi ropa. Al final, he optado por una minifalda marrón, unas medias negras, una camiseta de mangas cortas negras, un chaleco negro y unas bailarinas. Después he cogido mi estuche de maquillaje y me he pintado los labios de un color burdeos y he aplicado rímel a mis pestañas. También me he aplicado una sombra de ojos azul oscura, y, finalmente lista. He esperado a que llamasen a la puerta para coger mi móvil y el dinero, y ponerme mi chaquetón y, después, he bajado a toda prisa por las escaleras, sin siquiera esperar al ascensor.

Javi's POV

Hoy por fin es sábado, antes que nada, tengo que ordenar mi cuarto, dejar la cena medio preparada, la mesa puesta, ya que hoy Clara viene a mi casa a dormir y mis padres no están. Está claro que ella va a dormir en mi habitación, a mi lado. Aunque, si todo sale bien, no dormiremos mucho esta noche. Tampoco me importaría si no pasase nada, ella es genial, y como ya le deje claro a la puta de Rocío no necesito follármela para pasarlo bien con ella. Quiero que vea mi lado romántico. Por eso, la comida la voy a hacer yo, de otras cosas no puedo presumir, pero sí de mi habilidad para cocinar. No lo voy a dejar todo preparado porque quiero que ella me ayude, y nos lo pasemos bien cocinando juntos.  Termino de recoger mi cuarto y de hacer la cama, por cierto genial para dormir los dos porque no es una cama individual, es de matrimonio, bajo a la cocina y termino de hacer la masa para el pastel de chocolate que tomaremos de postre, se de la obsesión de Clara por este, osea que será genial. La cena en cambio, la cocinaremos entre los dos. Coloco en la mesa del comedor el mantel más bonito que, según mi madre, tenemos. Después de preparar platos y cubiertos. Subo de nuevo y me dirijo al cuarto de baño, me doy una ducha, me lavo los dientes, me echo desodorante y me peinó mi flequillo de forma que quede levantado. Voy a mi cuarto y abro el armario, suelo llevar siempre chándal pero esta es una ocasión especial, así que cojo mi camisa azul,mis vaqueros oscuros y mis zapatillas negras. Vuelvo al baño, me echo un poco de colonia y listo. Cojo el dinero y el móvil, me pongo mi chaquetón y salgo de mi casa para ir a buscar a Clara. Seguro que esta preciosa.

Después de un rato andando llego a su casa. Llamo al portero y en menos de cinco minutos ella sale. Esta guapísima. Me encanta. 

-Hola, estas muy guapa.- le digo con una sonrisa. Ella se ríe feliz y se sonroja. Es tan inocente.

-Muchas gracias, tú también estas muy guapo. - me contesta ella. 

-¿Lista para pasar el mejor día de tu vida? 

-Sí, estoy lista. - después de esto le doy un beso y le cojo de la mano. Damos un paseo tranquilo hasta el cine. Por el camino estuvimos hablando de que película íbamos a ver. Al final, nos decidimos por una de miedo, se llamaba Krampus. Compramos las entradas y unas palomitas grandes para compartir. Junto con los refrescos. La película estaba bien, pero tampoco daba tanto miedo. En cambio Clara estaba muy asustada, cosa que me beneficiaba. Yo la rodeé con mi brazo casi al comienzo de la película y ella apoyó su cabeza en mi hombro. Además ella cogió mi mano y en los momentos de más miedo, ella la apretaba con fuerza y bajaba la cabeza. Es adorable. Yo le susurraba al oído que no daba miedo y ella me daba una pequeña torta en la mano por ponerla de miedosa. Cuando acabó la película, Clara me dijo que se había asustado mucho, pero que la escena final le había dado mucha pena. Cosa que yo no entendí, pero bueno. Decidimos coger un autobús porque era de noche y no teníamos ganas de andar. 

La chica que amaba al chico al que no quería amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora