Esclava

Capitulo 11

-Buenos días Danna
-Buenos días- Dejé mis cosas en mi escritorio.
-Que radiante estás hoy Danna- Dijo con una media sonrisa.
-¿Quieres café?
-Una taza por favor, por cierto- Se levantó- Interesante sesión de ayer en la noche.

Mi boca calló abierta, hijo de puta... ¿Me ha estado vigilando? 

-La verdad es que casi me apunto.
-Hijo de puta
-Nunca pensé que fueses capaz de hacer eso- Dijo aguantando la carcajada.
-Ian...- Dije en tono de advertencia, en cualquier momento iba a lanzarme sobre su cuello y cometer un asesinato...
-Es increíble que vaya a besarte y tu boquita no ha estado en el lugar indicado- Acarició mis labios como ayer.
-¿Por qué tan hijo de puta?

Se acercó y me besó fuertemente, no sentía aire en mis pulmones. Se separó y me miró a los ojos.

-Como venganza, le haremos lo mismo a Matt, pero la verdadera tortura será que la única que lo sabrá, serás tú- Sonrió y su mirada era expectante, aterradora y misteriosa.-¿Cómo lo besarás sabiendo que tu boquita ha estado en donde no?
-Ian...-Supliqué
-Arrodillate- Cogió mi cabello y me dejó caer de rodillas sobre sus zapatos. -Ya sabes lo que tienes que hacer.

Lo miré a los ojos, no era capaz de eso... No... 

-Vamos, no tengo todo el día.- Quitó su cinturón rápidamente y bajó sus pantalones junto a sus boxers... Vaya Dios, nunca me había planteado verlo así. Lo tomó con una de sus manos- Abre la boca- 

Medio la abrí y lo introdujo entero en mi boca, gemí al sentir su mano tirando de mi cabello, haciendo que entrara y saliera.. No Dios, que pare ya. Cerré los ojos, esperando que estos minutos tan eternos tuvieran fin ya. 

Comenzó a gemir a medida que tomaba mi cabello más fuerte y tiraba de él aún más, gemí de dolor.Iba a apartar la cara, pero el no me dejó, y su líquido salado, paso por toda mi boca, que asco. Me soltó mientras él intentaba recuperarse.

Me apoyé en el enorme sofá de tapiz negro, cerré los ojos para controlar mi cuerpo de las enormes ganas de vomitar. Vi el reflejo en uno de los muchos títulos que llegaban hasta el suelo. Estaba pálida, el ruido del cierre de Ian me hizo reaccionar, lo miré, estaba mirándome inexpresivamente. 

-Levanta
-No puedo- Dije con el ultimo aliento que me quedaba
-Arriba, no actúes como payasa
-No actuó.
-Vamos- Me cogió del brazo y fue instantánea mi caída, sus brazos me rodearon para evitar que cayera.

Sus ojos se fijaron en los míos, llegamos a quedarnos más de 15 minutos así, mirando uno a otro, intensamente. Hasta que pasó, su mano acarició mi mejilla y cogiéndome del cuello, me acercó a él, besandolo, ¿Qué me pasaba? Yo no debo estar aquí. Pero sin embargo, estoy, como tonta, pagando por algo que ni Matt ni yo somos culpables. 

Creo que se me quitó el mareo, y me soltó.

-Tenemos que vender acciones.- ¿Qué? ¿Me acaba de besar y solo piensa en sus acciones?
-Está bien- Preferí seguir la corriente.

Me diriguí a mi escritorio, y me quedé de pie en frente.

-¿Regaliz?
-Sí, un dulce no amarga a nadie
-Muchas gracias, pero no estoy de humor para un regaliz
-Ven- Se sentó en la silla giratoria, y me pasó un par de archivos.- Necesito que pases por el escaner todo esto- Me los pasó en una carpeta amarilla- Y los envíes a la planta seis.
-¿Para qué la planta seis?
-Son los de informatica, de ahí buscarán a la IOS y los enviarán.
-Pero yo puedo hacerlo.
-No creo.
Me apoyé en su escritorio, y lo miré fijamente.- Estudié medicina forense, y como criminologa en el ámbito de la informatica.
-¿A sí?- Ascendí- Demuestralo enviando eso a la planta seis.

Hice los ojos en blanco y volví a mi puesto, me senté, ¿Qué se cree? ¿Cree que no puedo? Ja, rápidamente los pasé por el escaner sin ninguna dificultad, pero no los envié a los de informatica, los envié a la IOS directamente, pero no dije nada.

-Ya está- 
-Perfecto
-¿Algo más?
-Toma- Me pasó un par de archivos- Revisa esto, no quiero errores de ortografía
-Yo terminé el cole hace... Años, no estoy para buscar errores, tú deberías hacer eso
-Eres tu la que trabaja para mi, así que sh- Dijo sin mirarme
-Ni mi madre me calla, ¿Me vas a callar tú?