Esclava

Capitulo 22

-¿Tú?- Chillé.

-No te sorprendas- Sonrió.

-¿Qué haces aquí?

-Tranquila, vine a verte- Sonrió.

-No, no, no y no- Dije mientras me paseaba por la habitación- Esto no va así.

-¿No te alegras de verme?

-Se supone que estaría aquí sola- resalté la última palabra.

-Matt juega con ventaja, tú no recuerdas nada, y aquí estoy yo para que recuerdes un poco- Volvió a sonreír despreocupado. 

-Esto no debe estar pasando-

A estas alturas, ya estaba histérica, necesitaba estar sola, sin ninguna distracción y esa distracción tenía por nombre Ian. Me iba a dar algo, se supone que tenía que estar sola aquí, no con él, la 'competencia' de mi futuro marido. 

Miré mis manos, estaba súper nerviosa, él me abrazó intentando calmarme un poco, pero era casi imposible, empecé a respirar agitadamente en sus brazos, iba a desmayarme, lo sentía.

-Tranquila- Me abrazó más fuerte- ¿Tan grave es que esté aquí?- Ascendí en sus brazos- ¿Por qué? Yo creo que es lo justo, tienes que elegir entre él o yo y... Y el tiene casi cuatro años contigo, sé que tú tienes más conmigo, pero al no recordarlo, él juega con ventaja.

Tiene razón, ¿Pero elegir? ¿Acaso...? No puede ser.

-¿Por qué elegir?

-Si me dejas quedarme contigo estas dos semanas, te prometo que lo sabrás y también prometo que serán inolvidables- Hizo una pausa mientras besaba mis manos que estaban en un solo puño- Pero si me pides que me vaya, me voy- Me miró a los ojos y vi la petición de 'Deja que me quede'- Piensalo

Miré hacía abajo, a nuestros zapatos, la verdad es que quiero acordarme de todo, y mi madre no me iba a ayudar mucho. 

-¿Estás bien?- Subió mi vista hacía él sosteniendo mi barbilla. Ascendí con la cabeza y en un momento, se fue acercando cada vez más a mi.- Eres hermosa- Susurró contra mis labios y en unos instantes estaba rendida en sus brazos, besandolo y disfrutando de ese beso. Tomé sus brazos fuertemente para no caerme.

Me estoy enrollando con un hombre el cual dice ser un amor del pasado, siendo consciente que estoy en mi habitación, la cama a un lado, y que cabe la posibilidad de que mis padres lleguen en cualquier momento. 

Tomó mi trasero con su mano y después mi pierna, y me sostuvo contra él, me estaba llevando a la cama, mis nervios aumentaron cuando ambos caímos en ella suavemente, mi pierna se enredó con las de él. Sus besos fueron bajando a mi cuello, oh mi Dios, gemí cuando su mano fue subiendo mi blusa. 

Él estaba vestido con el típico traje de millonario, y era tan incómodo recordar a un chico con una simple camiseta blanca, jeans normales, zapatillas negras con rojo, y luego a este, este mayor y hábil hombre. Me retorcí debajo de él cuando volvía a atacar mis labios. 

-Para..- Gemí mientras sus besos estaban ya a la altura de mi barbilla

-Sh- Siseó y volvió a atacar mis labios. 

-Para- Volví a gemir al sentir su cálida mano en mi diafragma- Mi mamá pronto volverá.

-No Danna- Sus besos estaban en todo mi rostro y su mano sosteniendo mi pierna- No tienes ni idea cuantas veces te he tenido aquí, debajo de mi, con tu cuerpo palpitando y pidiendo por más pero tus labios diciendo que pare. No tienes ni idea cuantas veces estuve dispuesto a hacerte mía aquí, en estas cuatro paredes, en esta cama, bajo el enorme poster de los Beatles.