-¿Lista?-
-Eso creo.
Entré a la sala y cerré la puerta, Angel abrió mucho sus ojos y se levantó.
-Vaya.
-Sientese señorCollins.
-Eres Danna, ¿no?- Pasó la mano por su boca sin poder creerlo- Dios mío, estás... Cambiada, y... Dios, esto lo tiene que saber Ian- Sacó su teléfono del bolsillo-
-Eh- Le quité el teléfono- Sientese, ahora.
-¿Ian lo sabe?
-¿Eso importa?
-Madre mía, estas hermosa Danna, has crecido mucho, Ian estaría muy feliz de verte otra vez.
-Bien Angel- Ignoré su comentario anterior; revisé unos papeles que tenía sobre sus condenas-
-¿De verdad crees que voy a pasar por cárcel algún día?
-Según esto... Le han condenado por robo de identidad... ¿O no... Angel? O quizás debería decir... John Dalton, Carlos Saldarriaga, Edgar Ramos... O... J.J Jhonson.
-Nunca fui a cárcel por eso- Dijo descarado.
-Pero yo podría meterlo- Sonreí.
-Por Dios Danna, soy millonario, para mi no hay limites.
-Los que yo le pondré sí.
Revisé los papeles.
-Podría unir lo de robo de identidad, fraude y.... Violación a ...- Mi corazón salió disparado hasta mi garganta, él sonrió, sentía que me faltaba respirar, miré al vidrio polarizado en dónde todo el equipo estaba mirando atento la situación- Kirstie... Maldonado- Dije con la voz cortada.
-¿Qué puedo decir? Esa zorra me provocó- Dijo sonriendo descaradamente.
Ha violado a mi madre y tiene el descaro de llamarla zorra... Me quedé prácticamente de piedra.
-Hijo de puta.
Lo cogí de la camiseta y lo empujé contra el vidrio. Él rió.
-A ver si te hará tanta gracia cuando estés en la cárcel.
-Nunca pisaré una cárcel.
-Yo misma me encargaré de ello, yo seré la responsable de que estés años ahí, que te pudras ahí- Él volvió a reír- A ver si te hace tanta gracia con el compañero de celda que te pondré.
-¿A sí?- Rió.
-Un negro de dos metros y medio... Que necesita un poco de amor masculino- Lo amenacé.
En eso entraron casi todos con armas en la mano. Lo solté y salí a buscar a mi padre. Descarado de mierda.
-Papá, ¿Por qué no dijiste nada?
-No quería que lo supieses, ni tu madre tampoco.
-Haberlo pensado antes, porque me di cuenta, ¿Cuando fue?
-Ven aquí.
Fui a otra habitación con él. Cerró la puerta y las persianas.
-Estabas demasiado pequeña Danna, tú jugabas con Ian en la parte de atrás... Ian se torció un tobillo, y me tocó a mi llevarlo a alguna clínica cerca, te quedaste sola con tu madre y yo contacte con Angel esa misma tarde, para decirle todo, al parecer... Angel se confundió y en vez de ir a la clínica, fue a casa, y...
-¿Y?- Esto era casi imposible, estaba alucinando.
-Violó a tu madre en el suelo de nuestra propia casa, y tú... Tú lo viste todo, Danna, una niña de cinco años era nuestra único testigo.
ESTÁS LEYENDO
Esclava
Teen Fiction¿Escoger? Una misión. ¿Amar? Una de las mejores rebajas. ¿Arriesgarse hasta la muerte? Un artículo de lujo.