Creía que podía ( 1Parte)

Lágrimas sobre un pozo (Cap. 12)

¿Porque? Porque tenía Jaka que aceptar un matrimonio con una persona a la que no quería, la pregunta era, ¿Cómo se podía querer a una persona a la que no conoces?. Bastante ilógico, ¿verdad? era triste pensar en la posibilidad de contraer matrimonio con una persona  que apenas conoces y mucho menos ligarte a esa persona de por vida, como? Impensable, pensaba Jaka en su cabeza. Mientras tío Sirhan seguía con la palabrería, seguía alabando y alzando la belleza y los conocimientos de esa mujer. 

Esa mujer era realmente escultural, Niara era su nombre, un nombre que significaba todo lo que ella era "Aquella que tiene grandes propósitos". Físicamente asombraba a cualquiera, verla era un regalo de dios. Realmente bonita, con una bonita sonrisa, su dentadura no era perfecta, pero brillaba tanto que eso era lo de menos, los ojos pequeños y de forma ovalada. La boca grande y las encías negras, un color negro tatuado. Su nariz era similar a la de un loro, larga pero no muy ancha. Corpulenta y con muy buenas curvas. Físicamente no había nada que menospreciar. Pero su personalidad era bastante... narcisista, no era mala persona,  sin embargo tenía una escusa... su madre murió muy joven y ella tomó las riendas de su hogar, además para su padre era la hija más preciada, aunque intentaba persuadirlo sin éxito.  Tenía 5 hermanos por detrás, todos varones, excepto ella, para su padre era muy importante que su hija lograra conquistar a un buen marido, digno de respetarla, aceptarla y quererla como ella merecía. 

Jaka seguía en sus pensamientos, navegando y navegando, pensando en María. Mientras ya hacía varios segundos que su tío, había terminado de hablar, ya no quedaban más palabras para alabar a esa chica. Sirhan y Yago miraban fijamente a Jaka,a la espera de una respuesta, pero Jaka no había prestado atención a nada de lo que ellos habían comentado. De hecho se había perdido en la segunda frase de la descripción del tío Sirhan. Por fin se percató, y frunció el ceño, con una clara expresión en la cara, una que sin apenas mediar palabra ya respondía a su respuesta. ¿Porque? ¿Porque tendría que aceptar este matrimonio en el que el amor no existe?- Dijo Jaka. Los dos se miraron y el tío sirhan bajaba la mirada disgustado. Mientras Yago miraba a su hermano pequeño con cierta autoridad en su rostro, aquella autoridad que le faltaba en ese mismo momento, forzando a aceptar la propuesta.

El tío Sirhan suspiró y tras un ligero silencio, transmitía lo que él había decidido. ¿Porque no hacemos una cosa chicos? ¿Porque no esperamos a que te instales mejor y te sientas a gusto? ¿ deja que el tiempo pase y conoce bien a la chica con la que debes y tendrías que aceptar matrimonio?. Dentro de 10 días volveré a hacerte la pregunta.-Dijo el tío Sirhan. Jaka lo miraba sorprendido y enfadado, no entendia porque tenia que dejar que pasar 10 días...  Diez días para que? para enamorarse de alguien? IMPOSIBLE. Es imposible, le repetía una y otra vez Jaka a su hermano Yago, mientras se alejaban de la habitación del tío Sirhan. Yago no podía contener la ira, y agarró a su hermano fuertemente del brazo derecho y con un tono muy vulgar, le dijo :- ¿Porque? ¿Porque no respetas a nuestro tío? es la única figura paterna que tenemos. Todos estábamos muy ilusionados con esta boda, no quieres estropearlo todo ahora.

 A media tarde, Jaka  paseaba por el pueblo, recordando todos y cada uno de los rincones donde jugaba de pequeño, donde no tenía más preocupación, que divertirse. Que bonito le parecía ese lugar mágico. De repente se escuchaban unas risas detrás de él, un grupo de mujeres se acercaba y sus sonrisas se oían desde el principio hasta el final de la calle. Todas y cada una de ellas, llegaba del manantial donde iban todos los días a limpiar la ropa, con cubos en la cabeza regresaban a casa y se desviaban a medida que llegaban a su hogar. Por último quedaba Niara, con el cubo en la cabeza, andaba sin apenas parpadear y con un equilibrio digno de admirar. Jaka lo miraba asombrado, y quería conocer más sobre esa mujer y lo que habia detrás de esa bella figura, Niara que se habia percatado de la mirada profunda de Jaka, se sonrojaba y desviaba la mirada hacia el suelo.

Así empezaron a conocerse, a lo largo de los 10 días,10 días en los que ya habían quedado varias veces cerca del gran pozo del pueblo a oscuras y de noche. Formalmente se llevaban muy bien, Niara era una mujer muy culta e curiosa, preguntaba todas y cada una de las dudas que tenía a Jaka, inclusive Jaka le habia enseñado a escribir y a leer, alguna que otra palabra en Español. Verdaderamente habían congeniado a la perfección, y ya tenían entre manos una muy bonita relación. Pero no una relación amorosa, los dos se llevaban muy bien y compartían muchas ideas, pero no las suficientes como para contraer matrimonio, de hecho a Niara, Jaka apenas le atraía físicamente.. Ella siempre habia estado enamorada de Yago. Cuentan en el pueblo, que cuando Yago contrajo matrimonio con otra mujer, se encerró en casa más de un mes, en el que no quería ser vista por nadie, se cubría el rostro ,si no tenía más remedio que salir de casa, apenas podías ver sus preciosos ojos. 

Jaka apreciaba mucho a Niara, en 10 días se conocían mejor, y todos en el pueblo ya rumoreaba sobre el enlace.  Ya habían empezado los preparativos.

Aquel 12 de septiembre, todo el pueblo estaba contento, las celebraciones atraían a los buenos espíritus. La madre de Jaka, Sade, estaba muy contenta, sabía que esa mujer sería la excusa perfecta, para ver más a su hijo. Sabía que Niara era muy buena chica, pero también sabía que entre esos dos muchachos no existía esa chispa que necesitaban para enamorarse, algo nunca iba a aparecer. Sade sabía que tanto uno como el otro estaban enamorados de diferentes personas. Pero la celebración, era motivo de alegría en su hogar y en el resto del pueblo. Todos se habían reunido a la puerta del hogar de Jaka, con las mejores prendas que tenían en casa, las mujeres cubiertas de oro, esperaban ansiosas, la apertura de las puertas, para empezar con la celebración.

Se casaron, si, a pesar de no quererse, Jaka no quería faltar el respeto a su tío Sirhan, el admiraba todo lo que habia hecho por ellos en casa. Pero la noche de bodas nada ocurrió, gracias a su buena relación no tenían pudor en decir y confiarse cada uno lo que pensaba y sentia, tan siquiera una sola noche en 3 meses habían procedido al coito. Nadie sospechaba sobre eso, ya que todos los días dormían juntos. Ya estábamos a mitades de enero y Jaka ya tenia que volver a España, recuperar su vida, y seguir con la normalidad, en ningun momento habia planeado llevarse a Niara con el, no sería cómodo para ninguno de los dos, además ella había confesado querer estar cerca de Yago siempre. Por lo tanto la mejor reflexión era vivir separados. 

Pasaron 2 meses ya desde que Jaka se habia ido. Su vida volvía a la normalidad y se carteaba con su mujer, contando todas y cada una de las anécdotas que él se estaba perdiendo en su pequeño pueblo. Si, la buena relación seguía, a pesar de la distancia. Un día Niara se despertó a media noche asustada, habia tenido una muy mala pesadilla y se dirigía al pozo cuando a sus espaldas, percibió la sombra de una persona mayor, asustada se giró y reconoció ese rostro.  Aliviada respiró y de nuevo volvía a su habitación, era el Tío Sirhan, aquel no dudó en perseguirla hasta su habitación, introduciendo-se también en el interior. Ella siempre le habia tratado como a un padre, ya que tenía casi la misma edad que el suyo, pero ese dia el tio Sirhan tenía una mirada un tanto oscura, detrás de su rostro se ocultaba una pizca de maldad, que ella no podía percibir. Se mantenía callado, mientras lentamente se acercaba hacia ella, quitándole así la manta que cubría su escultural cuerpo. Frente a frente con Niara, levantaba la mano con lentitud, mientras se introducía en el interior de su cama.  Tenía una mirada bastante perversa y oscura, a Niara le había entrando el miedo y quería escapar de esa situación, pero era de noche nadie podía socorrerla, todos dormían. El tio sirhan seguía acariciando su cara, bajando la mano hasta su pecho izquierdo; Ya se estaba notando en el rostro de Niara lo disgustada que estaba, ¿que intentaba el tío sirhan? Se quedó paralizada, su mente corría más rápido que el razonamiento de esa situación. Ella seguía callada, mientras el tío sirhan con su mirada perversa,seguia explorando cada una de las partes del cuerpo de esa bella mujer, a su antojo navegaba por todas partes, con mucha dulzura. Dulzura que Niara no sentía, más que nada, ella tenía angustia, temor, repugnancia. Más excitado que nunca, Sirhan iba introduciendo su mano en el interior de la vagina de la joven, cuando ella sin contener más su ira, demostró su enfado, agarrando la mano de aquel hombre mayor que tanto se hacía respetar, con lágrimas en los ojos Niara, no entendía lo que ocurría. Mientras Sirhan agarraba un trozo de tela, haciendo de ello una bola y poniéndolo así en la boca de la Joven. Ya se habia bajado los pantalones y se disponía a introducir su arrugado pene, dentro de la pobre mujer, que no gritaba, pero así, lágrima tras lágrima se iban deslizando sobre su bello rostro..