Capítulo dos: Micaela

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Micaela Viciconte, 26 años, publicista. Una chica sencilla y tranquila, muy familiera, justa y frontal, capaz de enfrentar a todo el mundo si lo creía necesario.

Su familia era de Mar del Plata, cuando ella cumplió la mayoría de edad viajo a Buenos Aires y se instaló allí para estudiar y trabajar en la gran ciudad. Aunque al principio le costó adaptarse con el tiempo fue acostumbrándose, más cuando su hermana más chica se mudó para Capital también, aunque a otro departamento, ya que Micaela se había acostumbrado a manejar su tiempo y vivir sola. Las hermanas viajaban seguido a ver a sus padres y pasar un tiempo en la playa.

Micaela era una mujer independiente, no le gustaba rendir cuentas a nadie. Ella estaba en una especie de relación con Mauro, un hombre que había conocido en el club de natación, se habían ido juntos de vacaciones y eso le sirvió para darse cuenta que no iba a funcionar nada entre ellos. Habían roto cuando volvieron a su rutina. Una rutina que ya cansaba a Micaela, estaba muy estresada de su trabajo y sentía que necesitaba más días de descanso, lamentablemente no era un gusto que podía tomarse.

Estaba revisando unas maquetas que le habían presentado para que escogiese la más adecuada, pero se encontraba tan abrumada que no podía concentrarse.

Su celular sonó, notificándole que le había entrado un mensaje de WhatsApp.

Camila

Era el nombre que aparecía en la pantalla. Era la mejor amiga de Micaela cuando llegó a Capital. No conocía a nadie, y cuando ingresó en la facultad conoció a Camila una vez en la biblioteca, ya que no cursaban juntas, aún así entablaron una amistad.

Esta noche tengo una fiesta. Necesito que me acompañes.

Mica suspiró cansada, no estaba para fiestas. Primero, porque no le gustaban. Segundo, estaba agotada mentalmente y solo deseaba dormir.

Sabes que no estoy bien, mucho estrés. No podes decirle a alguien más?

Le escribió ella viendo si su amiga conseguía que otra persona la acompañase, tampoco quería dejarla tirada.

No, nadie puede. Por favor, es el cumple de Nacho y quiero verlo. Solo vamos un rato, lo prometo.

Y así, Camila convenció a Micaela, sabiendo que su amiga no la dejaría nunca sola. 

Obsesión #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora