Afrodisíaca tentación.

capítulo 1.

A claro, cambie la edad de algunos de los personajes para que se ajustaran a la historia.

10 de marzo 2016.

Albafica se encontraba en su oficina mirando por un gran ventanal la vista de la ciudad, hoy su ya no tan pequeño hijo cumplía 20 años de edad, se sentía feliz, después de tanto su hijo se estaba convirtiendo en todo un hombre.
El hombre se dedicó esa mañana a recordar los tiempos en los que su hijo aun era un bebé, las noches que pasó en vela, las veces que tuvo que trabajar de lo que fuese para poder comprarle la leche, pañales, biberones, ropa, etc. Sonrió al recordar la primera vez que su hijo lo llamó papá.

A unas cuadras, se encontraba la agencia de modelaje de zodiac Interprises Holding Inc. años después del nombramiento de Albafica como presidente, se le ocurrió la idea de la agencia, contratarían modelos para que modelaran líneas de ropa famosas, ayudando así a las otras empresas a vender sus productos y éstas le darían el 30% de las ganacias a Zodiac, los socios aceptaron ya que realmente le vieron futuro, y así, fue todo un éxito, habían contratado a los modelos más famosos, Milo Scorpius, los gemelos Gemini y a los hermanos Aioria y Aioros Sagita-Lion.
Una tarde Albafica había ido de visita con su hijo de 15 años fue entonces cuando Raymundo D'soto un fotógrafo mundialmente famoso quedo maravillado ante los rostros de padre e hijo que tenía frente a él, y entonces se le ocurrió la idea de que el menor podría ser uno de los modelos, proponiéndole que se uniera al proyecto, Albafica miró a su hijo quien algo apenado aceptó unirse a ese mundo del modelaje, años después el joven aparecía en la portada de casi todas las revistas.

Ahora nuestro joven modelo se encontraba en plena cesión de fotos, hoy le tocaba modelar ropa interior, el niño había quedado completamente atrás, ahora quien estaba posando era nada más y nada menos que un joven, alto, de piel blanca, ojos celestes al igual que su largo y sedoso cabello, labios rosados y carnosos, pestañas tupidas y un cuerpo de en sueño. Después de unas 30 fotos Raymundo le dio una señal para indicarle al joven que la sesión había concluido, Afrodita solo sonrió y se fue a cambiar, al salir se encontró una de las empleadas.

-Señor De la Rose, su padre esta al teléfono.- el muchacho asintió y tomo el teléfono que la mujer le estaba tendiendo.

-¿Hola?

-Afrodita, necesito que vengas lo más pronto posible a mi oficina.

-¿Hice algo papá?- el de cabellos celestes tragó saliva, el tono de su padre era frío y solo le hablaba así cuando se metía en problemas.

-Hablamos cuando llegues.

-Papá...- no pudo terminar lo que iba a decir porque su padre había colgado, dio un suspiro, trato de calmarse y de recordar si había hecho algo imprudente en estos días.
Cuando llegó a donde estaba Raymundo lo encontró con su esposa Marín, una joven de cabellos entre rojizos y castaños, dos hermosos zafiros eran sus ojos, un cuerpo curvilíneo y esbelto y una sonrisa que enamoraría a cualquiera.

-Ray debo irme, mi papá me requiere ahora.

-No hay problema ya acabamos y por cierto, feliz cumpleaños.- el hombre de unos 32 años abrazó a Afrodita, Raymundo era un hombre alto, moreno, de ojos color chocolate, cabellos azabaches y rizados y de muy buen cuerpo.
Afrodita agradeció el abrazo y se dispuso a salir de la agencia pero en la salida se encontró con un joven peli azul, de grandes zafiros y piel bronceada, era su mejor amigo, Milo Scorpius, quien tenia en las manos una enorme caja con un lazo.

-Hey Dita, ¡feliz cumpleaños!

-Gracias Milo.- tomó el presente y abrazo a su amigo.- pero si me disculpas mi padre me necesita.