Hey Becca! •N.H

IV

«Sometimes quiet is violent // Algunas veces el silencio es violencia.
I find it hard to hide it // Lo encuentro difícil de esconder.
My pride is no longer inside // Mi orgullo ya no está dentro.
It's no my sleeve // Lo llevó a flor de piel.
My skin will scream // Mi piel gritará.»

Comencé a pensar porque seguía en ese lugar.
¿Era para insinuar que estaba segura de mí misma? ¿O era un simple capricho?
No tenía ni la menor idea del motivo, pero el hecho de que este parada entre la multitud, me hacía sentir débil.

Yo era el tipo de chica que no busca atención, de hecho, prefiero que nadie se fije en mí.
Me considero insegura de misma y torpe en momentos delicados al hablar.

Y aún así, ahí estaba yo.
En mitad de una fiesta de un tal Hans.
Haciendo como si tuviera todo bajo control cuando no era cierto.
Mi amigo Scott me miró aburrido.

-¿En serio?- dijo sentándose a mi lado- ¿Porque nunca te puedes divertir en una fiesta?- gesticuló con las manos exageradamente.

¿Porque no me podía divertir?
Porque no gustan las multitudes de gente.

-Si que me estoy divirtiendo- sonreí negando con la cabeza.
El alzo una ceja y cruzó las piernas, quedando una sobre la otra rodilla.

Busco algo en su pantalón y me lo paso.
Era una pastilla.
El color amarillo la delataba. Tragué lentamente, jamás había consumido drogas. Por no decir, que está era una de mis primeras fiestas.

-Tu divina solución- dijo para luego irse.
Discutía conmigo misma de su hacerlo o no.
Por una parte tenía miedo de que podía hacer esta insignificante pastilla.
Pero por otra tenía curiosidad.
No tiene que pasar nada malo, ¿no?

(...)

Tres horas después...
Estaba tirada en el suelo de la casa.
Reía como una jodida frenética, y la compañera de  al lado mío (cuyo nombre desconozco) seguía mis risas.

Me levante como pude y se sentía como si estuviera caminando entre nubes.
Sonreía a todos los que pasaban a mi lado, como si fueran viejos amigos cuando en realidad eran perfectos desconocidos.

Seguí con mi paseo hasta que tope con la pista de baile.
Empecé a bailar despreocupada hasta que unas manos se posaron en mi cintura.
Note el cálido aliento en mi cuello, gire mi cabeza para ver a, ni más ni menos, que el grandísimo Jackson.
Sonreí cual lunática y le abrace.
Sus pupilas también me indicaban que estaba colocado, y su camisa desabrochada decía que había tenido sexo hace poco.

-Otra vez tu- dije lentamente.
-Otra vez, tú- repitió sonriendo.

Era realmente hermoso.
Su sonrisa duró poco ya que se derrumbó encima mio, haciendo que los dos cayésemos al duro suelo.

Maldecí por lo bajo.

Me las arreglé para apartarlo de encima mío y vi que estaba totalmente dormido.

Tire de él para sacarlo de la pista de baile y dejarlo sobre el pequeño sofá.
Busque ayuda con la mirada, si estaba Jackson en la fiesta, había posibilidades de que estuviera Rick o Niall.

Abrí paso entre la gente, y mire atenta a mi alrededor.

Piensa Becca, si fueras Niall, ¿dónde estarías?

En el supermercado.-
Estupida, ¿cómo va a estar en el supermercado?

Busqué en el salón, en el pasillo, y por fin, di con Niall y con Rick, quienes estaban con un gran grupo de amigos y algunas chicas.