Memorables esfuerzos perdidos de un lunes vespertino.

Soy.

Repite constamente ¿quien soy? ¿Quien eres? ¿Quienes somos?

Soy verbo, sustancia y objetivo; soy la sangre de mis héroes derramada en el suelo.

Soy la pasión de mi madre y la paciencia de mi padre, soy la medida de miedo de la madre de mi madre y la desesperación improporcional de la madre de mi madre, soy el fuego y coraje de mi hermano.

Soy la alternativa de mi amiga y la constante de mi verso. Soy el río que amo y la tormenta que reclama, soy la tierra que alimenta mi corazón.

Soy la sonrisa del pasajero y el balcón donde piensa tu vecina. Soy animal en cautiverio y soy animal salvaje.

Soy mis nudos en la cabeza, el dinero gastado; soy concepto social y moderno.

Soy pluma y bolígrafo, soy una taza de cereal y no de café, soy colores: verde y rojo, amarillo y azul, soy rosa y morado; también soy blanco y negro, escala de grises, soy arcoiris.
Soy oro y plata.

Soy niña mendiga y soy niña terrorista.
Soy luz de muchos, oscuridad de tantos y paseo de todos, soy mi tierra madre y soy mi dios, soy música y baile.

Soy ese entendimiento ajeno a tu pensamiento molecular, soy la complicidad, soy reggae y soy punk.
Soy rasta y grunge.

Soy avenida en la vereda imaginaria, soy inspiración lunar, soy satélite y soy raíz.

Soy hoyo negro y soy constelación.
Soy los patines que atravesaron tu sala y los patines que viajaron el mundo.

Sin embargo no soy hombre ni mujer, no soy género ni costumbre. Soy y no soy humano, soy mano y tinta, soy caligrafía escondida, secreto y chisme; soy soberbia y narcisismo. Soy cálculo y supraconciencia.

Soy campo y ciudad, soy big bang y destino, fruto de miedos y anhelos.
Soy la mesera del restaurante más caro pero sin un centavo.

Soy arma y flor, soy flor armada, soy paz y guerra, soy contexto social y contexto irracional. Soy activista y humanista, soy cadena y aleatorio, soy discriminación, raza y origen, soy dreadlock y soy libertad.

Soy playa y pueblo, soy toalla empapada. Soy cultura y crítica, soy vírgen María y sueño prehispánico. Soy contemporaneismo y cultivo agrícola.

Soy carga de sueños y cargos de consciencia.
Soy video y fotografía, soy hoja, arte y desarme. Soy copia de mi alrededor, soy núcleo, león y melena.

Soy justicia, ilegalidad y prohibición, soy corrupción, soy mezcolansa de mis pasados y hierba de los montes.

Soy necesidad y culpa, soy Amarilla y sobrenombre.
Soy lo mundado y lo divino.
Soy corrección y errores.
Soy moda y ridiculez.

Soy el sonido de tus pies, soy pies que caminan y recorren.

Soy la bajada anticipada para caminar más, soy sueños en grande y acciones pequeñas.
Soy manuscrito y letra de molde.
Soy la madrugada temprana y el tiempo perdido entre humo y neuronas rotas.

Soy desesperación, miedos, recuerdos, anéctodas, soy compañía, odios y oídos, soy familia y amigos.

Soy novia, soy amiga y vecina, soy prima, soy alumna y maestra, soy artista reconocida.
Soy la que se reconoció como artista.
Soy fan y soy locura.

Soy taza de cereal en vez de café.
Soy composición y narración.
Soy infancia y cordura.

Soy conceptos, soy galaxias, soy cosmos, historia e innovación.
Soy educación y axiología.
Soy mi patria reencarnada, soy mi sueño y mi suelo, soy esperanza y soy pobre pero rico.

Soy drogas y drogadicto religioso, soy alma y soy sueños y metas.

Soy cielo y estrellas, soy puesta de sol y amanecer.
Soy verbo, sustantivo, sustancia y sujeto, soy mi nombre y etiqueta, soy anonimato y relatividad.