Amor Medieval

Rogue

—¡Capitana Erza! Uno de nuestros guardias se ha ido solo a buscar a Gajeel. —Uno de los aprendices de Erza, Romeo llegó justo antes de que salieran a buscar a Gajeel, Levy y Lucy.

—¡Qué! ¿Estás seguro? —preguntó Erza.

—Sí Capitana, totalmente seguro.

—¿Cuál es su nombre? —Erza iba de un lado a otro bajo la mirada de los presentes.

—Lo siento, al ser nuevo no... no lo recuerdo, pero los demás soldados dicen que es capaz de fusionarse con las sombras.

—Rogue... —murmuró Erza observando por la puerta principal los árboles del espeso bosque.

—Erza, no perdamos más tiempo salgamos ya —dijo Natsu, Romeo se sorprendió cuando su compañero Natsu llamó a su Capitana por el nombre.

—Si vamos, Romeo vigila las puertas, que nadie salga del castillo, si alguien se atreve a salir diles que serán castigados por mi, Erza Scarlet. —Romeo asintió algo asustado.

Erza y los demás emprendieron su búsqueda, Natsu, Laxus y Gray partieron por un lado del bosque y Jellal y Erza por otro.

                         ***

Lucy iba sumergida en sus pensamientos caminando al lado de Levy. Pensaba en Natsu, se preguntaba si la echaría de menos, también se preguntaba si pensaba en la noche que ella se entregó a él.

Al recordar las manos de Natsu acariciandola, dándole su calor, se estremecía.

—Lu-chan ¿Estas bien? —Levy la miraba con preocupación.

—Si, ¿Por qué lo preguntas? —Quiso saber Lucy.

—Llevas suspirando desde que salimos del campamento.

—No es nada, aunque tu también  llevas suspirando todo el camino y reconozco esa clase de suspiros ¿Quién es el afortunado? —preguntó Lucy con una pícara sonrisa.

Gajeel las miró de soslayo y dibujó una sonrisa ladina al percatarse de que Levy se había puesto nerviosa ante la pregunta de su amiga.

—No hay... nadie. —Gajeel dibujó una sonrisa de triunfo al saber que él había sido el primero en probar sus labios. Levy percibió la sonrisa de Gajeel y frunció que el ceño.

—Ahora que lo preguntas si que hay uno, es alguien del castillo —dijo Levy mirando al suelo. Lucy se sorprendió.

—¿Se puede saber quién es? —preguntó Gajeel algo irritado.

—¡Y a ti que te importa gigante pervertido! —dijo Levy acelerando el paso.

—Una señorita como tu debería hablar con más respeto.

Levy y Lucy e incluso Juvia lo miraron sorprendidas.

—Es extraño que digas eso, tu, el que nos ha secuestrado —dijo Levy, Lucy y Juvia asistieron.

—¡Juvia! ¿¡De que lado estas!?

—Juvia lo siente, pero tienen razón.

—Para qué tener enemigos si te tengo a ti, Juvia. —Se quejó Gajeel.

                        ***

—¡Nos tienen rodeados! ¡Hay siete! —exclamó Laxus.

—¿Lobos? Los lobos solo cazan por la noche ¿Por qué seguirán por aquí? —preguntó Gray.

—Esta noche han visto demasiadas personas por su territorio y están cabreados, bastante diría yo —dijo Natsu.

—¡Preparad vuestras espadas, ahí vienen! —gritó Laxus.

Los lobos saltaron hacia ellos, tres fueron hacia Laxus, dos hacia Gray y dos más hacia Natsu.

—¡Laxus! —gritaron Gray y Natsu al ver que su compañero estaba siendo vencido.

Gray y Natsu al lograr ahuyentar los lobos que los atacaban fueron a ayudar a Laxus el cual no se aguantaba en pie pero seguía luchando.

—Lo... siento no puedo continuar, pero vosotros sí.

—Debes volver, te acompañaremos de vuelta. —dijo Natsu.

—No, puedo regresar solo, vosotros seguid, tenéis que encontrarlas no tardaré mucho en llegar al castillo.

—Bien, ve con cuidado Laxus.

                     ***

Mirajane observaba a través de la ventana, pensaba en Lucy y Levy, las dos solas con aquel peligroso hombre.

—Temo no volver a ver a mi querida Lucy —Makarov la sorprendió acercándose por detrás.

—Ara ara no diga eso señor Makarov seguro que volverá, ha enviado soldados muy valientes en su busca.

Mirajane mostró una agradable sonrisa que aunque fuera un poco hizo que Makarov se sintiera mejor, seguidamente Mirajane volvió a poner su mirada en el bosque.

—¡Señor Makarov! ¡Hay alguien saliendo del bosque! —exclamó Mirajane y salió corriendo hacia la puerta principal.

—¡Detente! —gritó Makarov, pero Mirajane ya se había ido.

Laxus iba arrastrando los pies, tambaleándose y apunto estuvo de caerse pero alguien le puso las manos en su ancho pecho.

—Laxus... —El soldado dejó caer su peso en aquel apoyo, con sus manos buscó  la salvadora de su caída y las puso sobre la cintura de Mirajane atrayéndola hacia él.

—Que agradable... —murmuró Laxus apoyando su frente en la de ella.

Mirajane puso sus manos a cada lado del rostro de Laxus.

—¿Quién te ha hecho esto?

—Lobos —dijo Laxus con un susurro apenas audible.

—No pasa nada, ahora ya estás a salvo.

                        ***

Aquel hombre iba con sigilo, lo que decían de él no eran rumores pues tenía un don; sabía pasar desapercibido en las sombras.

Pronto los atraparía, a él, a aquel hombre que se había atrevido a alejarlo de la mujer que amaba. Cuando lo tuviera delante lo eliminaría sin dudarlo y quizás cuando todo se hubiera calmado se declararía a Levy.

—Levy... pronto te volveré a ver y bajo tu mirada lo mataré... lo juro.

Rogue iba sin hacer apenas ruido por el bosque, siguiendo la pista de Gajeel, estaba cerca de ellos pues había encontrado las marcas de un campamento reciente.

—Prepárate Gajeel, el día de tu fin está cerca. 

Quería agradecer a tod@s l@s que dejasteis vuestro comentario, la verdad no esperaba que participárais tant@s, muchísimas gracias. También quería agradecer a Darelis0011 por la nueva portada de este fanfic, me encanta!