Tanto había tardado en llegar este día, pero al fin llegó el glorioso día que me tocaría ir a la Kisenjo Gakuen High School. Esa noche no había dormido bien ya que estaba muy emocionada. A las 03:00 a.m ya estaba despierta esperando la hora de colocarme ese seifuku azul y blanco que tanto me gustaba.
Estuve casi una hora mirando mi reloj de Doraemon esperando a que la maldita alarma sonara. Hasta que llegó la hora, eran las 07:00 a.m yo salté de la cama, me coloqué mi seifuku rápidamente y bajé a desayunar. Mamá me esperaba con unas tostadas y un jugo de naranja. Desayuné tranquila, no quería tener un malestar de estómago en el primer día de clases. Cuando me estaba cepillando los dientes frente al espejo del baño vi otra vez a la pequeña niña de el otro día, me voltee a verla con más atención pero para cuando yo me giré allí ya no había nadie. Esta vez la niña estaba arrodillada abrazando un conejito de peluche mientras lloraba.
Cuando terminé de preparar el bolso con los materiales revisé mi habitación para fijarme si no me había dejado nada sin guardar. Me había olvidado de mi cuaderno. Me acerqué a la repisa en donde se encontraba, sobre la repisa donde estaba, encontré aquél conejo de peluche que la pequeña llevaba , lo tomé con mis manos y acaricié una de sus orejas. Había conservado ese peluche por ya casi 6 años, mi hermana me la había dado cuando tenía 3 años.
Dejé el conejo en su lugar, tomé mi bolso y me fui camino a Kisenjo Gakuen High School. El camino fue tranquilo, cuando ya estaba por llegar recordé que había dejado mi bento en casa, no podía regresar o llegaría tarde a clases, entonces decidí comprarlo en una tienda de bentos que justo estaba a unos metros de la escuela. Entre tanta variedad de bentos opté por comprar el que más me gustaba, el sushidzume aunque era un poco caro le pagué al vendedor y miré mi reloj, eran las 07:40 a.m, eso quería decir que en 10 minutos se cerraba la puerta de entrada o sea que tenía el tiempo suficiente para cruzar e ir a mi salón.
Ya dentro de la escuela habían muchas aulas, yo entré a la que me correspondía. Estaba un poco nerviosa, al entrar vi algunos chicos y chicas conversando de quien sabe qué, me parecía raro que ya hayan conseguido charla. A mi eso se me hacía muy complicado por el tema mi demostración de afecto. Cuando entré al aula nadie me dirigió la mirada, así que simplemente me senté en un pupitre al azar. A las 07:30 a.m tocó la campana y los maestros entraron a sus aulas correspondientes.
—Hola alumnos, mi nombre es Kotori sensei, espero que disfruten este primer año de secundaria, si tienen algún problema no duden en consultarme.
Todos respondimos al unisono:
—Bienvenida Kotori sensei.
Kotori sensei nos pidió que nos presentáramos uno por uno y así lo hicimos hasta que sonó el timbre de receso, todos salimos del aula y nos dirigimos a la cafetería. Yo saqué mi bento y me senté en la esquina más alejada de las personas. Cuando ya había terminado me dirigí a los baños a asearme un poco, allí fue cuando tuve mi tercera alucinación. Era otra vez aquella niña, pero esta vez estaba cubierta de sangre, ella me dijo:
—Soumei-san.
Y en un abrir y cerrar de ojos la pequeña había desaparecido. Me puse a llorar allí mismo, en ese momento entraron tres chicas, me miraron con desprecio y me empujaron al suelo. Comenzaron a reírse de mí, cuando parecía que ya habían acabado de reírse, sacaron un marcador permanente y escribieron en mi frente: "Marica" , me tomaron una foto y la subieron a su perfil en la página escolar. Ellas comenzaron a patearme en el abdomen. Así estuvieron por 10 minutos seguidos, hasta que tocó el timbre. Yo quedé allí, sola e incapaz de levantarme, me habían golpeado 10 minutos por ninguna razón.
Unos 8 minutos más tarde logré recuperar fuerzas y levantarme de allí, ya había tocado el timbre de salida así que regresé al aula, tomé mi bolso y con mucho esfuerzo llegué a casa.
Holi! :3 ¿Les está gustando la novela?, espero que si.
Diganme en que puedo mejorar e intentaré hacerlo.
¡Gracias por leer!
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Psicosis
Kurgu OlmayanPsicosis narra la historia de Ayano una chica a la que le diagnosticaron psicosis un mes antes de entrar a la secundaria, esta noticia derrumba todas las espectativas de Ayano. La protagonista se verá obligada a luchar contra las alucinaciones, camb...