Diario de un apasionado

XII

Capítulo narrado por Camila
Empezaba a sentir alivio y confianza sobre Diego, el que haya detenido el beso de Tania me ponía segura de nuestra relación, aunque Tania debería de alejarse de Diego.
Sentada ahí volteé a ver un gato que pasaba por mi ventana; un tiempo después noté que Tania de nuevo se acercó a Diego. Mientras lo hacía sonreía y coqueteaba, yo estaba que la golpeaba, no soportaba ver a mi novio al lado de esa chica.
Me dije que Diego la rechazaría, pero Tania se pasó de línea y lo besó forzosamente, en ese instante arranqué en furia y lloré de coraje, quería gritar y alejar a Tania de ahí.
El beso se volvió algo largo, Diego no la apartaba, ¿por qué haría eso? Alejaron sus labios, pero Diego tomó su barbilla y volvió a besarla.
No podía creerlo, creí que me sería fiel. Lo peor es que yo presenciaba eso.
Me dio repulsión y decidí cerrar la ventana por fin.
-Entre él y yo ya no hay nada.-me dije con lágrimas incontrolables saliendo de mi interior, no podía creer que una relación que considerara perfecta se haya hecho pedazos.
No sé a quién echarle la culpa: a mí, por pensar que la relación a distancia funcionaría; a Diego, por besar a Tania siéndome infiel; o a Tania, por meterse en nuestra relación.