El Príncipe y el esclavo

Dame una oportunidad

Narra Louis:

Camine a mi habitación, llevaba un día de perros. Sinceramente prefería cuando Harry me ignoraba, al menos asin no me liaba tanto. ¿A que viene a decirme ahora lo de los niños? ¿Significará que se arrepiente? Una parte de mi le está gritando a Dios que sea eso y otra que simplemente quiere que me vuelva a ignorar, que me deje ir de una vez y no me haga más ilusiones. Entre a mi habitación y allí en la cama estaba Liam. Genial, el que faltaba. Seguro que quiere hablar de lo de mi casi- violación si se puede llamar asín. No tengo cuerpo para esto.

-Louis- dijo levantándose de la cama, en la que estaba sentado.

-Hola Liam- me quite el abrigo y lo colgué en el perchero. Camine hasta la cama y me tumbe boca abajo en esta. Este se sentó en el borde de la cama, a un lado mío.

-¿Estas enfadado?- pregunto con un tono de arrepentimiento en su voz. Negué con la cabeza.

No, No estaba enfadado. Sólo se le fue de las manos, me asuste un poco pero tampoco me enfureció. Liam ha echo muchas cosas buenas por mi y no me voy a enfadar por él con esto. Al fin y al cabo no me hizo nada, supo parar.

-No sabes cuánto me alegra- acaricio mi espalda y me estremeci.- Hasta mañana Lou, se te ve cansado será mejor que descanses- me besó en la cabeza y se fue.

No me quedé durmiendo, tampoco dormí mucho esa noche. Sólo pensé en lo que sentía en ese momento, en lo que me estaba ocurriendo.
No penséis que soy un exagerado con estas cosas y que pienso mucho, es sólo que no estoy acostumbrado a esta situación. Mirad; estoy enamorado de un chico que creo que esta más confundido que yo, que ya es bastante. Este esta prometido con una chica insolente y maleducada pero que él dice que la ama. ¿Ustedes veis amor entre ellos? Porque yo no, bueno aunque también puedo estar negando lo innegable, porque no lo quiero aceptar. Uff que lío, y por otra parte esta Liam que es un amor conmigo, quitando lo que ha pasado hoy, que me cuida y que siempre esta a mi lado. Pero no lo amo ¿y si lo intentara? Creo que en esto del amor es mejor no forzar nada.

Narra Harry:

Estaba cenando con Candela en el salón. Tenía los pelos estropeados y todos enreados con una cara de poco amigos. Además de que soltaba un olor no muy bueno. En algunos momentos soltaba leves risas y esta enfurecia más.

-¿Te estas riendo?-dijo con una gran molestia en su voz. Negué rápido.

-¿Que le ha pasado a tu pelo? ¿Y ese olor?- ya no pude más y me eche a reír. Esta se levantó y dio un fuerte golpe en la mesa.

-¡Para de reír!- paré con algunas lágrimas en los ojos. Si esto le hubiera pasado a Louis seguro que ahora estaría riendo conmigo. Bueno primero se haría el molesto y me lanzaría algunas bromas contra mí, porque orgulloso siempre, pero al final acabaríamos riendo juntos y sería otra anécdota más que contar a nuestros nietos.

"¡Deja de comparar, Harry!" me ordene a mí mismo.

-Sólo era una broma Candela

-Hahaha que gracioso eres Harry ¿no ves como me rió?- rodé los ojos

-Eso es porque no tienes sentido del humor- esta me fulmino con la mirada

-En vez de estar aquí riendote de mi deberías de haber condenado a esos salvajes

-Sólo son niños, no exageres- bufó

-¡Han atentado con mi vida! Lanzandome a ese charco de barro y después se rieron de mi- se puso a llorar con lágrimas más falsa que un billete de tres euros.

-¡Si sólo tropezastes! Son críos es normal, cuando nosotros tengamos niños...- me cortó

-No te emociones. Yo no voy a tener niños y si tengo lo cuidaran otros. Son muy pesados, todo el día llorando y gritando. ¡Ugr no lo aguanto!