Al despertar seguía tirada en el suelo, como antes de que me desmayara, tenía la vista nublada, mis ojos se sentía cansados, no sabía si me había quedado dormida durante días o horas. Esa habitación no tenía relojes o algo que me indicara el día y la hora. Mientras me levantaba, levante mis manos al techo y cerré los ojos, respire profundo y luego baje los brazos, de un momento a otro pude escuchar de nuevo las pisadas de personas en el techo.
Se abría de nuevo ese cuadro en el techo, pude escuchar silbidos y ruidos que se pronunciaban cuando las personas hablaban, pero yo no les entendía. Ese cuadrado tenía unas aberturas diminutas, donde me dejaba ver unos cuantos colores. Te pronto percibí una voz de una mujer- tu puedes...- esas palabras se repetían mientras se alejaban. Esta vez no grite, solo me quede parada, mirando esa abertura en el techo.
Unos minutos después de que ya no se escuchara la voz de aquella mujer, se cerró la abertura. Y volví a hacer lo mismo que los días anteriores. Camine durante todo el cuarto, me senté e hinque en el piso, esperando a que algo pasara. A que algo o alguien entrara por una puerta y me sacara de este lugar. Me sentía una prisionera, que en cualquier momento se volvería loca, cuarto blanco que se mueve cuando quiere y una chica adentro que le grita a cosas inanimadas que parecen ser hechas por su cerebro. – Pareciera que es tubería loca- me empecé a reír.
Al poco rato recordé a mi madre y deje de reír, y sentí como unas lágrimas bajaban por mis mejillas, recuerdo que mi madre quería verme sonreír, pero no de esta manera, ella quería verme feliz y contenta, que estuviera bien, ella no le gustaría verme así.
Así que recordé como de la preparatoria llegaba feliz y con nuevas noticias, que siempre le decía a mi madre y ella siempre respondía con una sonrisa mientras me abrazaba. Cuando llegaban mis hermanos, ellos se nos aventaban para darnos un gran abrazo, era una familia feliz y contenta. Se podía decir que una familia normal...
Antes de que mi madre anduviera en la cocina, yo me subía rápidamente a mi habitación para hacer mis tareas y platicar con amigos en las redes sociales. En medio de un problema de matemáticas me había llegado un mensaje de Edgar, para no se grosera le conteste, estuvimos un buen rato platicando, al parecer el sí sacaba buenos temas de conversación. Aunque siempre me quedaba con la duda de ¿quién era? O ¿Dónde se sentaba? , solo habíamos hablado por redes sociales, nunca había hablado con él, cara a cara, aunque también sentía como una vergüenza.
Baje a la concina para cenar con mi familia y después de lavar los platos, me fui directo a mi cuarto, y todavía debía de terminar mi tarea, antes de cerrar las páginas de internet, le mande un mensaje a Edgar para ver si podíamos hablar en el salón de cara a cara, porque no sabía en quien era, y que no era por maldad o por falta de respeto, pero es que si quiere ser mi amigo, al menos debemos de hablarnos en persona una vez.
Porque yo no le ponía atención a la lista de asistencia de todos los días, solo me interesaba que no se pasara mi nombre, y nunca le preste atención a otro nombre y menos al de Edgar, además había maestros que lo decían por apellidos, y yo no me sabía el suyo. Y no tuve otra opción de preguntarle ¿quién era? o al menos ¿cómo era?, o ¿Cuándo nos podíamos ver para platicar en persona?
Al mandar el mensaje, cerré las pestañas de las redes sociales y seguí con mi tarea, como a las 12 de la noche me quede dormida. Por la mañana me apresure para desayunar, bañarme y alistarme para la preparatoria, me sentía como niña chiquita. Cuando estaba en camino a la escuela, mire mi celular y mire los mensajes de Edgar, me había escrito que le deba miedo hablar con migo en persona, porque no sabia cómo me iba comportar yo. Le escribí - no te preocupes, no ocurrirá nada fuera de normal, somos amigos ¿no? Y me siento a gusto platicando con tigo, además tenemos muchas cosas en común, como los videojuegos y las series que veíamos. Que podía ser peor.
Ese día, por fin se dejó ver, cuando supe quién era, me sorprendí, no lo había notado en medio semestre, me sentí mal y bien a la vez, porque al fin tengo un nuevo amigo, después de platicar, nos conocimos más y hablamos de cosas más serias, del pasado y del presente, me impacto lo que supe. Y yo al saber que me estaba confiando secretos que no le había dicho a nadie más, yo correspondí con decirle lo que tenía, y que iba a morir muy pronto, le pedí que no le dijera a nadie.
Su rostro cambio drásticamente, se siento mal, lo abrase y le dije que no se preocupara, que estaré bien, y que el día en el que ya no vuelva a verlo, que recuerde que fue un gran amigo para mí.
Pasaron los días y las semanas ya era enero del 2017, y todavía estábamos en vacaciones, era completamente aburrido. No tenía nada que hacer, tenía mis dibujos, colores, lápices y mi guitarra, pero es los días anteriores, ya había practicado con ellos durante varias horas. Jugué con mis hermanos vario tiempo mientras mi madre trabajaba.
Yo tenía que cuidar de mis hermanos menores y tenía que darles de comer, cada día les hacía algo distinto, eran unos quisquillosos, siempre me pedían comida sin verduras, aunque de vez en cuando se las escondía entre la comida. Era divertido verlos comer verduras sí que ellos supieran, y siempre me decían que sabía muy bueno.
En la noche mientras mis hermanos descansaban platicaba con mi amigas y con Edgar, me acuerdo que una vez jugamos online, y por desgracia perdí, era un juego de guerra y sangre con monstros que infectaban personas o los mataban. Empezamos a platicar por los audífonos con micrófonos, fue divertido ver como perdíamos y como peleábamos contra los enemigos.
Fue una noche divertida, en la madrugada, nos desconectamos y yo me dormí. Cuando regresamos a clases, teníamos que escoger un extracurricular, estaban los deportes o los culturales, yo no sabía que elegir, perfectamente sabía que debía de elegir un culturar, no podía hacer mucho ejercicio por estado de salud, entre mis amigas estábamos viendo en que elegir, varias nos fuimos a culturales excepto una amiga, ella eligió un deporte.
Yo elegí dibujo, que es a lo que más me enfocaba, tenía que ir todos lo sábados, en las mañanas para llegar temprano, pero me acuerdo que así conocí a una persona especial en mi vida.
![](https://img.wattpad.com/cover/60276505-288-k498514.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Una Vida No Tan Extraordinaria(REESCRIBIENDO)
Teen FictionDespués de haberse rendido ante lo sucedido en esa habitacion, Chantel , se deja llevar por sus recuerdos, esperando hallar alguno que le de la respuesta al ¿Por que esta ahi? Una novela corta o larga, cada recuerdo definira su desicion. La vida es...