El Cielo En La Tierra (Camren Gip)

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<La energía positiva se alimenta de pensamientos positivos, de risas, de amor, de generosidad, de buenas acciones y de solidaridad>…

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Lauren Pov.

Corría sin rumbo fijo, podía sentir la brisa pasar por mi rostro, había pasado dos meses desde que Camila había llegado a tierra y en ningún momento me he separado de ella, pero hoy quería salir y disfrutar de lo que la naturaleza me daba.

Simón dijo que no fuera demasiado lejos que los cazadores estaban cerca, es curioso que todavía existan todas esa clase de personas en la tierra, ellos creen que nosotros somos malos, pero solo tratamos de cuidar a la humanidad.

Ally y Lucy nunca dormían y supongo que están por ahí asiendo quien sabe que.

Podía oler un aroma muy dulce parecido al aroma de las rosas, y también el aire estaba impregnado de.... no lo se. Creo que es canela o miel. Siento una brisa casi inpredesible, que me hace sentí liviano, sin cuerpo, sin peso.

Me eche en el pequeño campo, mis patas delanteras extendidas para recargar mi cabeza en ellas.

Sentía una gran paz mental estando en este lugar, me gustaría que la vida fuera diferente, que todos fueran buenos pero lamentablemente no es así pero seria genial.

-Mira quien esta aquí, el pequeño y amado lobo de Simón-. Escuche dentro de mi cabeza.

-¿Que quieres Austin?-. Dije en mi mente ya que estábamos en forma lobina.

-¿Yo?... Nada, solo quería ver que hacías aquí sola-. Dijo y bufé por lo bajo.

-¿Que quieres? No estoy para tus bromas-. Dije por que de verdad no quería que molestara mi momento de paz.

-De acuerdo, no te enojes... Solo quería ver... Mira se que he sido una mala persona, pero de verdad lo siento-. Dijo el lobo blanco con gris acostándose a un lado mio.

-¿Y ese cambio tan repentino?-. Dije girando mi cabeza para ver como el pasto se movía con la brisa.

-Es solo que... Me siento solo ¿De acuerdo?, es solo que sentía envidia por ver como tú eres tan libre, tan inocente y pura. Me he estado portando como un idiota y lo lamento de verdad, pero como dice Simón hay que ser amables con tu manada, aunque Shawn era el que me decía que eres una mala persona pero al verte con tus amigas y tu impronta me hace pensar lo contrario y quisiera cambiar y ser amigos-. Dijo y sonrei interiormente.

-Podemos tratar si eso te hace feliz-. Dije y el asintió rápidamente.

-¿Que te parece una carrera?-.  Dijo y se puso en pie en sus cuatro patas.

Empuje al lobo que era un poco mas pequeño que yo, corría sin mirar atrás aunque podía por sus pisadas detrás mio, me sentía libre cuando estaba en esta forma.

Los árboles, el viento, el cielo me hacían sentirme libre, corriamoa mientras jugábamos tratando de invadir el paso del otro, me era agradable llevarme bien con él, aunque no se porque Shawn me odia tanto.

-¿Donde estamos?-. Pregunte parandome viendo por todos lados.

-No... no se nunca había venido aquí-. Dijo viendo y girando en su propio eje.

-Pareces un perro haciendo eso-. Me burle mientras lo veía seguir haciéndolo.

-Basicamente lo soy-. Dijo pero su mirada se dirigió a un lado mio, gruño mostrando sus dientes y voltee para ver que era.

-¡Chicos! ¡Mirad lo que encontramos!-. Grito uno de ellos que venia con un arma en mano.

-Unos hermosos y lindos lobos, me darán mucho por ustedes-. Dijo el rubio sonriendo de oreja a oreja.

-Tenemos que irnos de aquí Lauren-. Dijo Austin dando pequeños pasos hacia atrás.

-¡Brad! ¿Cuanto me darás por ellos?-. Pregunto y el otro hombre se acerco.

-Primero atraparlos-. Dijo apuntándonos con el dedo.

-¡Corred Lauren!-.  Grito Austin y dimos media vuelta corriendo como unos locos.

Tal vez se podría decir que eramos unos nenes por escapar de esas personas, pero ellos tenían un material en sus armas que nos hacían daño y nosotros no sabíamos como atacarlos, tanto Austin como yo somos unos cachorros.

Seguía corriendo detrás de Austin que buscaba una salida pero no sabíamos donde estábamos, por estar jugando todo el tiempo nunca vimos hacia donde nos íbamos.

Ellos venían detrás de nosotros en un Jeep, gemi al sentir el miedo expandirse por cada parte de mi cuerpo.

Chille cuando sentí algo caliente en mi pata trasera, hizo que cayera y gimiera de dolor, Austin al escucharme voltio y lamió mi herida.

-Te han disparado.. ¿Puedes correr?-. Pregunte y asienti con dolor.

Comenzamos a correr y podíamos oír las risas de esos hombres despreciables, en una curva que Austin tomo nos dejo sin salida.

No sabíamos a donde ir, las rocas nos impedían el paso, los hombres descendieron de la Jeep y caminaron divertidos hacia nosotros.

-¡Son unos cachorros! Los otros ya nos hubieran atacado-. Dijo uno riendo como tonto.

Gruñi tomando una posición de ataque y Austin hizo lo mismo, lo mire de reojo y el confirmo, si íbamos a morir aquí no me moriría sola, uno de ellos se irían con nosotros.

Gruñi viendo como se acercaban tan confiados, espere unos momentos para después atacarlos, mordi a uno en su pierna mientras el gritaba de dolor, podía oír como trataban de disparararnos, el hombre me golpeaba con su arma y en un movimiento que no detecte, él golpeo mi cabeza haciendo que quedara atontada.

Lo aprovechó y comenzó a golpearme, sin querer vi que tenían a Austin enredado en una especie de red, trataba de safarse pero no podía.

Corrí ayudarlo pero recibí un disparo dejandome tendida en el pasto, respirando con dificultad, lo siguiente que supe fue oír que se retiraban que algo los atacaba, cuando abrí mis ojos una mujer me cargaba como si no pesara nada.

-Tranquila lobo, me caes bien y no dejare que mueras, tu amigo esta herido pero estarán bien-. Dijo pero mis ojos se sentían pesados.