Noche de reflexiones

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¿La novia del Avatar?... ¿Nadie se lo esperaba? ¿En serio?... Yo lo veía muy obvio.

Nadie reacciono hasta que Lin hablo, cualquiera diría que fue algo seco y cortante, pero no.

-¡Por fin! - Exclamo Lin.

Todos voltearon a verla y a que les dijera el porqué de aquella celebración.

- ¿Qué? Estoy segura que no soy la única que vio esa relación venir. - Alzo la ceja y se rió un poco.

Korra y Asami le sonrieron aunque un poco apenadas. La habitación se fue vaciando poco a poco pues el Avatar ya había sido encontrado y solo quedaron la gente más apegada al Avatar y a la Señorita Sato.

- Por Raava Korra, estábamos muy preocupados ¿Dónde estabas? - Mako hablo aliviado y un poco molesto y Lin solo se sentó en su silla para escuchar lo que Korra debía decirles.

- Lo siento Mako, yo no estaba muy lejos, lo juro - Suspiro tomando aire para explicar su desaparición - Lo que pasa es que anoche Asami y yo estábamos conversando de cuando les diríamos que ... - Korra aun vacilaba en cómo decirles - Bueno es que, hemos estado saliendo durante meses, pero no sabía cómo decirles, les juro que quería hacerlo pero no sabía cómo y estaba confundida en muchas cosas, pero ya no, ya tengo todo claro respecto a esto, se que la quiero muchísimo - Tomo la mano de Asami y la apretó ligeramente y ella hizo lo mismo en señal de apoyo - No tengo más que decir, solo que respeten mi decisión y si es posible que me apoyen. - Finalizo muy nerviosa pero a pesar de eso, su voz reflejaba seguridad en cada una de las palabras.

- Lo entiendo - dijo Tenzin

- Se que es raro al principio, a nosotras también nos tomo tiempo asimilarlo pero ya verán que con el tiempo... Espera ¿Qué? - Korra no capto lo que Tenzin había dicho.

- Si, Korra, lo entendemos - dijo el joven Mako - Ya sospechábamos algo pero no queríamos presionarlas a decirlo, y por lo que veo, se presionaron solas. - Mako les sonrió - Aunque me ofende un poco que no me lo contaran -

- Lo siento - Dijeron al unisonó las dos chicas enamoradas.

- Korra no quería que se decepcionaran de ella y yo no quería que me alejaran de ustedes - Fue el turno de hablar para Asami y desahogarse también - Les he tomado mucho cariño y ahora son mi familia - Asami empezó a sollozar y Korra la atrapo entre sus brazos. Lin se acerco a ambas para hablar con ellas.

- ¡Hey!... Eso no va a pasar, me siento muy orgullosa de ustedes - Les sonrió a las dos, una sonrisa sincera para cada una de ellas, ambas se sorprendieron mucho pero eso no evito que la Señorita Sato saliera de su formalidad y la abrazara.

- Gracias - Susurro Asami cuando Lin le devolvió el abrazo.

- No hay de que niña - No importa qué edad tuviera Asami o Korra, para Lin siempre serian niñas.

Esa noche transcurrió tranquila, Korra acompaño a Asami hasta donde iba a dormir y luego regreso al Templo Aire, Tenzin se dirigió con su familia no sin antes amenazar fuertemente al Avatar si se volvía a escapar, todos sabían que era inútil amenazar al Avatar pero nadie contradijo al Maestro Aire.

Lin volvía a casa sumida en sus pensamientos, tratando de evitar el tema de Kya y su noche de pasión, sabía que era inútil seguir evitando a Yue así que tendría que enfrentarla y tal vez ¿Kya se podría quedar con ella?, pero ¿Y sí Kya realmente quería a Yue más de lo que la quería a ella? ¿Qué haría? Aparte de quedar como estúpida... No, Lin no permitiría que eso pasara, tendría que luchar por Kya ¿No?

Tantas cosas pasaban por su mente que no se percato que había alguien frente a su edificio, una persona encapuchada, aun sin prestar atención la persona se encamino frente a Lin, cuando ella por fin se dio cuenta de aquella persona su rostro fue volteado inmediatamente por una bofetada haciendo que su labio inferior reventara y sangrara, la ira invadió su ser estuvo a punto de devolverle el golpe y darle un pase directo al hospital hasta que se dio cuenta de quién era la persona.

- ¿Yue?... ¿Eres tú? - La maestra metal estaba desconcertada, nadie en su sano juicio la había agredido de tal forma por ser la jefa de policía de la ciudad hasta que vio el estado de Yue, ebria.

- ¿A quién esperabas? ¿A mi novia? Ahhh, no espera... ¿Mi ex-novia? - Lin no dijo nada respecto a eso.

- ¿Estas bien? - No supo que mas preguntar.

- ¿Qué sí, estoy bien?... Eso no se le pregunta a alguien a quien le han sido infiel ¿O sí? - Yue en serio estaba hundida en el alcohol, su aliento lo decía.

- Creo que deberías irte a casa... ¿Quieres que te lleve? - pregunto Lin un poco desconcertada por sus propias palabras, se sentía culpable con respecto a Yue.

- Lo que me nos querría seria ir contigo a cualquier lado - Se tambaleo tocando a Lin y enseguida componiéndose. - Solo quería preguntarte algo pero el sentimiento me gano. - Se encogió de hombros como si fuera algo sin remedio.

- ¿Y bien? - Apresuro Lin.

- ¿Y bien, qué? - Respondió a la defensiva.

- ¿Que era lo que querías preguntarme? - La paciencia de Lin hoy estaba tomando otro nivel, jamás imagino esperar tanto por respuestas.

- ¿Porqué? - Dijo sin vacilar.

- ¿Porqué qué? -

- Sí... Por Vaatu, ¿Porqué ella? y ¿Porqué ahora? - Se volvió a tambalear y ahora sí se sostuvo de Lin.

- No lo sé... - Pensó la respuesta o intento pensarla, de verdad, pero nada estaba claro.

- ¡Eres imbécil! - Le recrimino enojada Yue. - ¿Cómo demonios no lo sabes? -

- Pues sí no sé, de un día para otro la recordaba más, no me enojaban sus bromas y ella me conoce... - Hizo una pausa analizando sus palabras otra vez -... Cómo nadie lo hace. - No sabía por qué lo decía, pero continúo. - Esa noche que se hicieron novias yo escuche la verdadera declaración en el pabellón... Esa noche no supe porque te odie con todo mí ser, pero ahora lo entiendo... Y lamento mucho haberte herido como lo hice, nadie se merece eso y quiero que me perdones. - Las palabras salían fácil, ahora ya se estaba sincerando.

- ¡¿Nos espiaste?! - Grito Yue indignada.

- No lo hacía, solo pase por ahí... Fue casualidad. - Se defendió - Y baja la voz. - Toda la calle estaba a obscuras y probablemente todos estuvieran dormidos.

- ¡¡Yo hago lo que quiera!! - Grito y se rió para luego volver a modular su voz - ¿Y qué entendiste? -

- ¿Dé qué? -

- ¡Estaré borracha pero a mí me terminas de contar todo! - Exigió con un tambaleo de autoridad.

- Que tal vez sería buena idea... No. - Lin escogió otra vez sus palabras - Quiero que Kya sea mi novia. -

- Bueno, tal vez debas preguntárselo la próxima vez que la veas. - Le sonrío y a Lin le pareció de lo más raro que le dijera eso. - Ahora llévame a mi casa -

- ¿Me dejas el camino libre?... ¿Así sin más? - Preguntaba mientras se encaminaban.

- Soy más madura de lo que crees - Inflo su pecho con autoritarismo - Ahora cargarme que no me puedo sostener de pie.

A Lin le pareció de lo más gracioso y contradictorio lo que decía y hacía pero opto por no cargarla pero si la llevo hasta su departamento, Yue le dio su dirección y sus llaves tres segundos antes de quedarse dormida completamente. Y en todo el viaje de ida y vuelta se la paso pensando en lo que había conversado con Yue esa noche.


Lin y KyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora