Notas de un retrasado [1]

Extra 3

—Carlene, ven —susurré. Carlene vino riendo y se agachó a mi lado —. Cállate —susurré entre dientes.

—No sé que hacemos aquí —se cruzó de brazos.

Con delicadeza hice que bajara sus brazos. Los volvió a cruzar. Puse los ojos en blanco.

—Estamos aquí, para ver quién es el que deja las notas —sonreí.

—A mí no me importa eso —se cruzó de brazos con aire despreocupado.

—Hace unos días te maquillabas por él —me vio con cara de que no le importaba, así que proseguí—. Venias con los mejores outfits solo por él —pausé porque quería ver su expresión. Se encogió de hombros— Ya Carlene, ya.

La empujé amistosamente, claro, tan amistosamente que casi sale volando, pero eh, amistosamente.

Me asomé para tener una mejor vista de mi casillero.

El tiempo pasaba y pasaba y el desconocido no dejaba ninguna nota. Carlene yacía a mi lado pintándose las uñas de un rosa chillón. Estaba tan aburrida que pensé en jugarle una broma.

Ella tenía la mano izquierda extendida y con la derecha sostenía la brocha. Se pasó la brocha por el meñique así terminando de pintar las uñas de la mano izquierda. Rápidamente agarré su mano izquierda y la hice un puño y con mi dedo gordo apreté el suyo. Cuando quité mi mano su palma estaba toda manchada de rosa.

Estallé en carcajadas. Carlene tenía la boca abierta y estaba viendo sus uñas recién pintadas que, ahora estaban arruinadas.

—Me largo de aquí —masculló. Se paró y comenzó a caminar cuando la directora la detuvo.

Oh no.

La agarró de los hombros y vino caminando hacia donde me encontraba. Yo estaba nerviosa.

—Que gusto encontrármelas —sacudió a Carlene de los hombros—. Las estaba buscando.

—Mamá, frente a Fleaur no debes comportarte así —dijo Carlene.

La mamá de Carlene, o sea la directora, fijó su vista en el pasillo y observo a sus alrededores. Después, puso una pose despreocupada.

—Bueno —abrazó a su hija—. Hoy entró una rusa y me gustaría que ustedes le dieran una cálida bienvenida —comenzó a reír—. Como sí eso fuera posible. Al grano, ahorita ella se encuentra en la dirección y quiero que socialicen con ella. No domina muy bien nuestro idioma —se encogió de hombros—. ¡Vamos!

—No...

Pero la mamá de Carlene ya me había agarrado y ahora estábamos camino a la dirección.

Al llegar vi una mancha blanca. Muy blanca.

Tropecé con el bote de basura y caí al piso.

—¡KARMA! —gritó Carlene y comenzó a carcajearse.

—Niñas por favor...

Pero se interrumpió porque alguien que, no era yo también se estaba riendo. Era una risa muy bonita y angelical para mis oídos.

Vi una mano blanco frente a mi. Subí la vista y me encontré con la mancha blanca.

—Tómala —dijo con un extraño acento.

Acepté su mano y con su ayuda me paré.

—Gracias —sacudí mis pantalones.

—Oh, ella es Briar —la mamá de Carlene la señaló—. Briar, ellas son Fleaur y Carlene.

—¡Hola! —saludó Carlene.

—Hola —dije yo.

—Ellas te darán un paseo por el colegio —la mamá de mi amiga nos agarró a ella y a mi por los hombros y nos abrazo—. No hagan ninguna locura —susurró. Sonrió y se fue.

—Bueno ven con nosotras —agarró Carlene a Briar y sé la llevó.

Estaba saliendo de la dirección cuando la secretaria me llamó. Me acerqué.

—Recoge la basura que tiraste.

—Pero fue un acciden...

—Fleaur —amenazó con tomar el teléfono. Y si lo tomaba llamaría a mis padres y no me la iba a acabar.

—Ya voy —a regañadientes comencé a recoger la basura.

Cuando terminé fui corriendo al baño. Una vez en el baño me lavé la manos. Iugh, que asco.

Al salir del baño me encontré con Henri.

—¿Qué hace una chica tan linda por aquí? —comenzó a mover sus cejas.

Puse mi mano en su rostro y lo empujé.

—Cállate.

—Perdon, Flúor —me abrazó por detrás.

Seguimos caminando así hasta que me cansé y le dije:

—Al grano, ¿qué quieres?

—¿Yo? Nada —se hizo el tonto—. ¿Quién es la nueva?

Reí.

—Se llama Briar.

—Es linda —dijo sonriendo.

Pusé los ojos en blanco y seguí caminando.

(*********)

Después de casi media hora había encontrado a Carlene y a Briar. Al parecer las dos se habían hecho muy unidas así que las deje y fui por mis cosas. Luego tropecé con Jaxon y ahora estoy aquí, hablando y comiendo con él.

—Entonces le dije, Bárbara no hagas eso —le di una mordida a mi sándwich—. ¡Y lo hizó! Le valió lo que dije. Pero al final se cayó y se raspó la rodilla.

—Me pasó algo similar con mi hermano.

—¿Tienes hermano? —pregunté sorprendida.

—Si, se llama Alex.

Y estuvimos platicando. Jaxon me cae muy bien, es muy lindo y caballeroso.

Le di un vistazo a mi reloj y mi clase ya había comenzado. Me levanté muy rápido y a causa de eso volví a tropezar. Sólo que esta vez no terminé en el piso.

Caí en los labios de Jaxon.

n/a: holaaaaaa.

Me entraron muchas ganas de hacer un tercer extra, aquí explica como se hicieron amigas de Briar la "albinarusalesbiana" y bueno puede que haga un cuarto extra, puede.

Y como sabrán estoy participando en los DreamsAwards así que los mantendré informados cuando esto comience.