Extra 6

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Esto es en un universo alterno así que no va de acuerdo a la historia>:v

—¿Te gusta lo que ves? —habló presumiendo sus músculos.

—Mmm, no.

—Vamos Fleaur —lloriqueó arrodillándose—. Me gasté toda mi mesada en ir al gym.

—¿Acaso yo te dije que gastaras tu mesada yendo al gym? —puse una mano en mi pecho y me hice la ofendida.

—Bueno... no, en realidad yo...

Dejé de escucharlo.

—¡No me ignores Fleaur Cohl! —la nena chilló.

—Yo no te pedí que gastaras tu dinero en el gym, además no te sirvió.

—Al menos ¿podrías decirme que ya se me ve mi lavadero? —formó un puchero.

(Lavadero se le llama a las abdominales: un lavadero es aquello donde puedes lavar ropa a mano, o sea tallar y todas esas cosas. Cosas de mexicanos xdxd)

Reí.

Esta bien, tal vez podría mentirle un poco...

—No se te ve ni putamadre.

—¿Por qué eres tan cruel? —chilló— ¡Jade!

(Por si no recuerdan o por si no llegaron a leer el libro de barbara, Fleaur tiene tres hermanas más, Natasha y Jade, y obvio barbara. La mayor es Nat, le sigue Jade, Fleaur y la menor Barbs)

Mi hermana se encontraba en la parte delantera rociando a las flores.

—¿Que tal pequeñín? —saludó Jade emocionada.

Jade vio cómo Jaxon y yo nacimos. Así que nos trata como sus pequeños hijos.

—No soy pequeñín —bufó— Ya tengo 18 nena, ya soy legal —le guiñó un ojo y le lanzó un beso desesperado a mi hermana.

Jade le lanzó una mirada aburrida y se volvió a sus flores.

—¿Por que son tan crueles? —preguntó pegándole al piso— ¿Acaso es de familia?

Carraspeó.

—¿Verdad que ya se me ve mi lavadero? —hizo el puchero más tierno.

Jade se tapó la boca para no reír. Y se volvió a girar.

Y en ese momento salió Bárbara de la casa.

(Info rápida para las que no la conocen: Barbara es físicamente igual a Fleaur solo que sin la heterocromia, tiene 16 años y no es santa como creen>:v)

—Hola preciosa —sin saber cómo Jaxon se levantó y se encaminó hacia mi hermana.

—Ugh, que asco.

Jade quería reírse y yo también pero sería algo cruel de nuestra parte.

—Fleaur, mamá quiere que le lleves esta bolsa a la madre de este adefecio.

—Jamás vuelvo a gastar mi mesada en el gym —masculló Jaxon sentándose en las escaleras de la entrada de mi casa.

—¿Me acompañas? —le extendí mi mano a Jaxon.

Sus ojos se le iluminaron y de inmediato estiró su mano para agarrar la mía pero antes de que la tocara la retiré lo más rápido que pude.

—Perdedor —dije.

Y fui con mi vecina que, oh sorpresa, es la mamá de Jaxon. Y ahí iba yo con mi suegrita.

Toqué la puerta de una manera muy amable esperando a que me abrieran. Mientras que Jaxon se acercó y se aventó a la puerta.

—Gran entrada —susurré.

Me miró enojado.

—Mami —lloriqueó corriendo hacia la cocina.

Que hijo de su mamá. Literal.

—¿Verdad que ya se me ve el lavadero? —le preguntó a su mami apenas entré.

Su mamá miró su "lavadero" y se tapó la boca para no reír.

—¿Por que? —lloriqueó el triple.

—Alex —gritó Jaxon cuando su hermano entró.

(He aquí mi bebé, Alex es el hermano de Jaxon, completamente opuestos)

—Diles que ya se ve mi lavadero.

—No.

Y con la misma Alex se fue.

—Maldita sea...





n/a: que ondaaaaaa

Ya extrañaba escribir con estos dos.

Si hay algo que no entiendan me comentan y ya yo les digo va?

Probablemente suba más extras, de verdad extrañaba escribir con estos dos.

Notas de un retrasado [1] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora