Romeo No Quiere Besar A Julieta

7. Te mato.

Camille 

Quisiera saber qué hace esta tarada aquí, eso justamente eso fue lo que pensé cuando vi a la rubia frente a mí, no creo que venga a darme un pase directo para entrar al equipo, se le nota que está realmente molesta y que no le interesa ocultarlo.

-¡Romina! -dijo chasqueando los dedos.

-Hola Juli, -saludó -¿todo bien? hermana. -Preguntó la linda rubia mirándola desde donde estaba sentada y yo me auto dije, -no puede ser, mi hermana es amiga de la hermana de esta tarada.

-¿Que rayos haces tú con aguacat?

Grave error, si hay alguien a quien le molesta que pronuncien mal y hagan mofa de nuestro apellido más que a mí, es a Lexie.

-Hey, rubia. -Dijo mi hermana frunciendo el ceño. -Es Abrakatt, grábalo en tu pequeño cerebrito. -Agrego golpeándose la cien con el dedo índice.

-Lo siento, -se disculpó Romina. -Te dije que esto pasaría, nuestras hermanas jamás se llevaran bien, lo supe en el momento en que la vi. -Dijo y ambas rieron pero nosotras no.

-Cami, nos vemos en un rato. -Dijo mi hermana tomando sus cosas mientras Romina hacia lo mismo.

-Hola Ron, -saludo Romina -Y adiós Ron. -Agrego riendo.

-Nos vemos Romi. -Respondió él

-Por cierto, papá te trajo esto, -informó mi hermana poniendo las llaves de mi auto frente a mí sobre la mesa. -Me dijo algo de que no te encontraba, así que me las entregó, también dijo que apenas salgamos nos vayamos directo a casa, su avión sale hoy a las 6:00pm. -Yo la miré sonriendo sin mostrar los dientes y ellas se retiraron, yo me recosté en mi silla y continúe leyendo mi libro haciendo de cuenta que Romeo y Julieta no existían.

-Abrakatt... -chillo la rubia y yo baje mi libro la mire y puse mi libro sobre la mesa.

-¡Felicidades! al fin te lo aprendiste. -Dije dando unos aplausos y sonrisa de sarcasmo.

-No quieras hacerme quedar como tonta, -volvió a chillar y Adams camino hasta donde ella.

-Para eso no ocupas ayuda lindura. -Respondí y los gestos de su cara me dejaron claro que se molestó, así que le guiñe un ojo para molestarla aún más.

-Ya es suficiente Julieta, vámonos de aquí. -Dijo Romeo tomándola del brazo.

-No iré a ningún lado sin antes decirle unas cuantas cosas a esta.

-¡Bien! te escucho, apuesto que debe ser sumamente interesante. -Rete para cabrearla aún más.

La rubia de un jalón soltó el agarre de su cursi novio, apoyo sus manos sobre la mesa en modo de intimidación y se inclinó hacia mí que aún estaba cómodamente sentada.

-Esta es mi escuela Abrakatt...

-Uy, eso sí que me intimido... -Dije arqueando una ceja.

-No te metas conmigo si no quieres que les haga la vida imposible a tu hermanita y a ti.

¡Oh no! eso sí que no, ahora si te metiste en terreno peligroso, a mí que me amenace todo lo que quiera pero con Lex que no se meta. Pude sentir como la expresión de mi rostro cambiaba, de golpe me puse de pie y tome la misma postura que ella.

-Mira Blanco, -dije cuando la tenía cara a cara -Conmigo lo que quieras, pero una cosa si te digo, si te metes con mi hermana te mato, ella no te acerques si te atreves a tocarla o volver amenazarla, uno por uno tendrás que recoger esos mechones de cabello tarada, te advierto Blanco, déjala fuera de esto.

Podía sentir todos los ojos de los presentes, estábamos discutiendo en medio de la cafetería y Romeo se rascaba la nuca sin saber qué hacer, otra chica que estaba justo detrás de Romeo nos miraba sorprendida.