22

709 105 5
                                    

Odio esto, odio los vestidos, odio la idea de arreglarme, odio peinarme, odio tener que arreglarme sin que yo quiera. Odio tener que lidiar con la idea de usar tacones. Odio...

  -¡Noel! -Y odio a Brian... -¡Un tal Brian te ha venido a buscar! -Hablando del rey de roma. Suspiro y me miro frente al espejo de mi cuarto. Frunzo un poco el ceño; mi pelo negro estaba amarado en un ligera trenza que descansaba en mi hombro izquierdo, un lindo vestido que antes perteneció a mi madre, el cuello era cerrado, manga larga, la espalda un poso descubierta, me llegaba a las rodias. Mire mis pies con unos tacones negros.

Odiaba hacer esto, pero... Brian es mi amigo y tengo que dar una no tan mala impresión. Sonreí al espejo y agarre una pequeña cartera, camine hasta bajar las gradas y encontrarme con mi padre y Brian riendo de algo. Los ojos de Brian se notaban nerviosos y su risa no era la de siempre. Me vio y se levanto.

Le sonreí, llevaba unos vaqueros negros, casi formales, una camisa azul oscura por dentro de su blaiser, el me miro de abajo hacia arriba. Su pelo castaño claro su revuelto por su mano y sus ojos, esos ojos grises tan lindo me miraban impresionados. Tengo que admitir que hoy Brian se veía menos idiota que de costumbre.

Mire a mi papá sonreír al verme y abrazarme, sus brazos me rodearon y le devolví el abrazo parándome solo con la punta de mi tacón. Lo oír susurrar algo -Te ves igual a tu madre- Le sonreí y asentí, conteniendo las lagrimas. Mire a Brian y el sonrío.

-¿Nos vamos? -Pregunto y dude pero decide asentir... ¿Porque? Quizás quería tomar riesgos, por una vez en mi vida...

Y ese riesgo seria Brian Madam.

Chill PillsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora