~ Be Alright

Capítulo 26

21:35 hrs.

____ se había ido hace bastante y seguía sin responder mis llamadas, me mandaba directamente al buzón de voz, pero no sabía si simplemente estaba cortando mis llamadas, si había bloqueado temporalmente mis llamadas, si habían problemas de señal –sí, claro-, o si su teléfono se encontraba apagado. Tampoco respondía ni uno de los varios mensajes que le he mandado y estoy seguro de que no soy el único que le ha mandado un par… mamá, Scooter y Alfredo me dijeron que igualmente tratarían de ubicarla.

No sabía en donde estaba, no sabía si andaba sola o acompañada… Aunque realmente espero que esté con Taylor, ya que ella tampoco contestó mis llamadas, aunque no quería hacerme ilusiones hasta que mi pequeña me lo confirmara.

00:42 hrs.

Seguía sin noticias de ____, las llamadas seguían siendo enviadas directamente al buzón de voz, nadie sabía nada, mis mensajes y los de mi madre, juntos con los de Scooter y Alfredo seguían sin ser respondidos, ni siquiera con un “Estoy bien”. Aquello me exasperaba.

01:27 hrs.

No podía marcharme a dormir, mi mente trabajaba y trabajaba, sin dejar de pensar en las mil y una posibilidades de lo que podría haberle pasado a ____ para que siga sin aparecer a estas horas. No podía hacer nada más que pasearme por el living de la casa de un lado para otro.

Solo me quedaba tranquilo para sentarme un rato en el sofá y fijar mi mirada en un punto fijo de la pared, esperando que el tiempo pasara más rápido y lograr escuchar el sonido de la puerta abriéndose, para darle paso a unas risitas nerviosas o tropezones y maldiciones de parte de mi pequeña princesa, probablemente algo ebria debido a la gran cantidad de alcohol bebido junto a alguna amiga mientras hablaban mierda de mí para desahogarse de toda esa rabia que tenía por lo visto en esas imágenes… Yo solo quería explicarle… Taylor me había advertido esto y yo me limité a hacer oídos sordos… Soy un completo idiota, si le hubiera hecho caso, esto no estaría pasando justo ahora.

01:54 hrs.

Había dejado de dar vueltas finalmente al igual que había dejado de mirar un punto fijo en la pared para limitarme a prender la televisión a un volumen moderado para producir algo de ruido y tener algo en lo que distraerme y que mantuviera mi atención ocupada, al menos en un 40%, ya que el 60% restante seguía alerta, esperando a alguna señal que me demostrara que ____ había llegado.

02:12 hrs.

Suficiente, ya no podía seguir esperando acá tan tranquilo. Necesitaba salir a buscarla. Ni siquiera sabía a donde iría, solo sabía que ya no podía seguir en casa mientras ____ andaba quien sabe dónde.

Tratando de calmarme un poco le envié un último mensaje de texto, mientras iba a mi habitación a buscar algo para abrigarme y tomaba las llaves de mi automóvil.

Al no obtener –nuevamente- una respuesta de parte de ____, me monté rápidamente en mi auto y salí de casa para comenzar a recorrer las calles. El primer lugar al que se me ocurrió ir a echarle un vistazo, era aquel mirador al que habíamos ido más de una vez últimamente… En realidad no era un mirador, pero nosotros simplemente le llamábamos así, ya que, quedaba por un cerro, en donde un día pinché un neumático mientras subíamos. A un costado del camino había unos árboles en donde te podías apoyar para ver el hermoso paisaje que se mostraba ante ti.

— ¿Qué sucede? –pregunto ____ después de que me orillara en medio del camino sin razón aparente.

— Nada importante, solo que creo que pinchamos una rueda –respondí algo complicado, pero aun así entre risas-, lamento informarle mi bella dama, que deberemos bajar del vehículo para poder revisar bien y, reponer la rueda si es necesario.

— Pues vaya, supongo que no hay de otra –suspiró ella resignada, tratando de reprimir la risa que quería invadirla en aquel mismo instante.

Nos bajamos y comencé a inspeccionar los neumáticos, y tal como pensaba habíamos pinchado el del lado izquierdo, en la parte trasera.

— Tienes repuesto de rueda ¿no? –preguntó ella mientras apoyada en el capo me miraba levantando una ceja.

— Obvio, ¡duh! – le respondí

— Y siquiera sabes como poner una –preguntó esperando una respuesta rápida.

— Claro que sí nena, o al menos eso creo… supongo… -su rostro se comenzó a transformar lentamente-. Tú tranquila hermosa, es decir ¿qué tan difícil puede ser?

Claro, finalmente era mucho más difícil de lo yo imaginaba, y por más que lo intenté, no logré cambiar la rueda. Terminé lleno de grasa, despeinado, algo sudado y tuvimos que llamar una grúa, pero fue justamente en aquel momento cuando descubrimos aquel hermoso paisaje ya mencionado antes entre los árboles mientras esperábamos.

Aunque la verdad es que “encontramos” me suena a muchas personas, cuando la verdad es que ____ fue quien se asomó entre los árboles, encontrando un lugar de descanso y relajación. En cuanto lo descubrió, ____ comenzó a llamarme y fui a su encuentro quedándome sin palabras ante lo que veía, sin creer que aquello era real. Simplemente se trataba de un lugar especial.

Deje de darle más vueltas al asunto, definitivamente era probable que ____ se encontrara en ese lugar, y si no, ya vería a donde ir… pero por alguna parte debía comenzar ¿no?

De pronto, cuando iba prácticamente a mitad de camino mi celular sonó, acababa de recibir un mensaje.

Lo abrí de inmediato pensando que podría tratarse de ____, pero me vi bastante decepcionado al notar que solo era un texto de mi madre.

— ¡Mierda! –solté al ver lo que en el mensaje ponía.

Pero fue entonces cuando todo atisbo de sorpresa por lo que me contaba aquel mensaje se veía sustituido por el nerviosismo y la adrenalina al ver los focos de un automóvil que venía directamente hacia mí. Intenté volver a tener el control de mi vehículo rápidamente para poder esquivar aquello que se aproximaba cada vez más.

Sentía como si el tiempo estuviera corriendo sumamente lento, como si aquellos cinco segundos que tenía para reaccionar se hubieran vuelto minutos, muy cercanos a las horas y antes de volver de golpe a la realidad, giré el manubrio a más no poder, para girar por completo mi auto y alejarlo definitivamente del camino del otro. Pero llego aquel momento de  cercanía entre ambos automóviles en que lo único que logras ver son las luces proporcionadas por aquel auto con el cual estás por chocar, aquella luz es todo lo que veía, aquella luz…

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Hey hermosas lamento la demora, y aunque quería escribir algo mucho más largo y detallado, o simplemente escribir de inmediato la siguiente parte de la novela, pero les juro que apenas y puedo con mis ojos. No saben las veces que tuve que repetir ciertos parrafos, porque no lograba que lo pensaba, siguiera una corriente coherente hasta mis dedos para escribir en el teclado.

Lo hubieran visto, estaba escribiendo cosas totalmente incoherentes y sin sentido.

Whatever... ya subí, ahota me voy a dormir, espero lo disfruten

¿Qué piensan que pasará ahora?

PD: Oh! y no saben lo que me emociona ver que la novela tiene más de 6300 leídos ._. Y eso, ya luego en el siguiente capítulo les dejo algo más, porque otra vez estoy escribiendo incoherencias