No entiendo porqué Jayson actúa así, primero me trata mal, después juega conmigo y pasa de mí...y ahora está más encima mío que de costumbre, supongo que el juego para él no ha acabado, quiere seguir haciéndome daño, pero no creo que pueda lograr mucho.
Llego a mi cuarto y sigue igual que cuando lo dejé, sin notas extrañas y sin muebles rotos, excepto por una rosa roja que yace encima de mi cama. La cojo pero me pincho con una espina y mi sangre cae cubriendo parte del tallo. Tiró la rosa a la papelera de mi escritorio y entro en el baño.
El agua ha limpiado parte de mis heridas, el barro y la sangre ya no bañan mi piel pero los cortes siguen estando presentes.
Domingo y el sol brilla más alto que nunca, son las 10 pasadas de la mañana pero no tengo intención ni fuerzas para levantarme de la cama. Se hacen las 2 cuando me vuelvo a despertar, me visto con una nueva muda del uniforme y me peino el cabello. Tengo la cara horrible, se nota que ayer no fue un día muy bueno, así que me pongo algo de corrector, pero tampoco ayuda mucho. Salgo de mi cuarto y me dirijo al comedor, no he comido nada desde ayer por la noche, cuando Mark me ofreció dos sándwiches que le habían sobrado de la cena, estaban riquísimos. Me pregunto cómo estará Mark, ayer no tuve ocasión de despedirme en condiciones...
Cojo una bandeja y me sirvo la comida de hoy: Puré de patata, judías, pollo a la plancha y un flan.
- ¡Ashley!- Grita Tori.- Ven siéntate.
Me siento en la mesa de las chicas, parecen aliviadas de verme.
- Tía, ¿Se puede saber dónde te habías metido? La señorita amargada estuvo todo el día con los nervios a flor de piel... Casi llaman a tu casa, pensaban que te habías fugado.- Explica Kate en un tono bajo.
Creo que a la "señorita amargada" que se refiere Kate es la señorita Charlotte, a quien conocí ayer noche.
- Fui a dar un paseo, pero me perdí por el bosque.- Empiezo.- Al final encontré una cabaña y el chico que estaba allí me acompañó a la academia.- Todas me miran y me escuchan con mucha atención. Cuando Tori resopla entiendo que se lo han creído.
- Ashley, tienes que tener cuidado...- Kate me coge de la mano.- No conoces este lugar y los bosques son gigantes...
- Lo sé, lo...siento supongo, no volveré a irme sola.- Digo con pena, no sabía que les importara tanto...
- Eso espero.- Kate me da una palmadita en el hombro bueno.
- Joder tía, estás hecha mierda, dentro de poco tendremos que escayolarte.- Dice en tono bromista Molly.
Molly es la prima de Tori, pero tampoco hablamos mucho.
- No me había fijado...- Dice Kate mirándome la pierna y el brazo.- No me digas, ¿Te caíste en el bosque?
- Su-supongo...- Digo, pero no sueno convincente.
Como mi comida lo más rápido que puedo, sé que Kate sospecha algo, pero no tengo la suficiente confianza para decirle algo así.
- Bueeeno, para romper este silencio... Menuda fiesta te perdiste ayer, los de cuarto trajeron un DJ y todo, pero la liaron tanto que se acabó pronto, la "señorita amargada" apareció y lo cortó todo a las 2.- Explica Tori con entusiasmo.
Yo llegué más o menos a esa hora...
Ellas hablan durante lo que queda de comida de la fiesta de ayer mientras yo me centro en mí y en mi comida, siento que alguien me mira, pero Ann no está en el comedor y Jayson está en la mesa de las animadoras, se ríen mucho, parece que se lo está pasando muy bien y eso me me crea un nudo en el estómago que no me deja comer.
- No tengo mucha hambre...- Me levanto de la mesa.
- ¿A dónde vas?- Me para Kate.
- A mi cuarto.
- Voy contigo.
- No, no soy una niña pequeña, creo que puedo llegar sola sin perderme.
- ¿Segura? ¿Y sin torcerte una muñeca o la rodilla? Porque eso sería bastante raro...
- ¡Kate!- Le llama la atención Molly.
Kate relaja los músculos pero su mirada sigue fija en mí. Se acerca a mí y pega mucho su cara a la mía.- Se que te pasa algo, no sé que estás tramando, pero no parece ser nada bueno.- Dice en un tono muy bajo y amenazante para que no lo oigan las demás.
La mayoría de la cafetería, por no decir toda nos mira. Hemos llamado la atención.
- He dicho, que voy a mi cuarto, cálmate un poco y deja de imaginarte jilipolleces.- Le contesto y me voy medio cojeando por la puerta del comedor. Aún tengo hambre.
Justo antes de subir las escaleras mi móvil vibra.
«Papá»
Casi se me cae el móvil al suelo al ver el nombre de quién me llama, en cuestión de segundos mi cuerpo vuelve a llenarse de miedos: ¿Le habrán informado de que ayer no estuve en la escuela? ¿Llama enfadado? Intento calmarme pensando que hace unas semanas me dijo que me devolvería la llamada y no lo hizo, tampoco le culpo, es un hombre ocupado. Mi móvil sigue sonando y no tengo voluntad para contestar.
- ¿Es que no piensa contestar, señorita Moore?
La "señorita amargada" está quieta encima del segundo escalón de la grande escalera del vestíbulo. Tiene las manos en las caderas y me mira amenazantemente.
- Es publicidad de una compañía telefónica, no iba a contestar.- «Cuelgo».
- En ese caso...- Dice mientras baja las escaleras.- ¿Que le parece si tenemos una charla? De mujer a mujer.- Se queda quieta en frente de mí, casi obligándome a aceptar.
- La verdad es que...- Empiezo.
- Por favor señorita Moore, ayer me quedé con las ganas de charlar con usted y conocernos mejor ¿Acaso usted no?
No me queda otra.
- Sí...- Ya no hay vuelta atrás.Los jardines siguen igual de vivos que siempre, pero esta vez los pétalos de las flores más vivas no destacan tanto ya que, como de costumbre, está nublado y va a llover.
Llegamos a un banco blanco de madera y me hace señas para que me siente con ella.
- Verá señorita Moore, yo me crié en Inglaterra, puede que este paisaje no sea el más "bonito" para usted, pero en realidad contiene una gran belleza. ¿Llueve mucho en California?
- No...no mucho, el clima suele ser seco.
- Entiendo, y... ¿Existen tantos campos como aquí?
- Supongo que hay campos pero no suelen haber muchos, predominan las empresas y todo ese sector...- Me corta.
- Y, las escuelas, ¿Los alumnos reciben una buena disciplina?- Enarca una ceja. ¿De que va?
- ¿Dónde quiere usted llegar a parar con todo esto?
Resopla, como si estuviera cansada.- Ya veo que no...Cómo he dicho antes, nunca he salido de aquí y por lo que veo las cosas se toman muy a la ligera en el lugar de dónde viene señorita Moore.
- ¿Q...
- Esta escuela es una de las más prestigiosas de Europa y usted, Americana o no, ha sido la comidilla del colegio desde que llegó: pintadas en un muro, colarse en las habitaciones de tercer curso, pelearse directamente con alumnas del centro... ¡Incluso desaparecer durante todo un día!
- Espere, el la mayoría a de cosas que ha dicho yo no soy la responsable...
- ¿Ah no? ¿Quién entonces?
- ...Es complicado...
- Sí ya creo que lo es, y su situación también, su comportamiento es inaceptables en una academia de tan alto nivel señorita Moore, ya hemos tenido suficiente.- Se levanta.- Una, una infracción más, por mínima que sea, y será expulsada del centro y volverá a ese "país de las oportunidades" del que proviene. Queda avisada.- Se va.
Hija de puta.
No puedo creer que me diga esto a mi, entonces a Ann ¿Qué le deben decir? Seguramente nada, la creen la niña perfecta que todos querrían tener como hija. Tengo mucha rabia acumulada así que cojo una piedra y la tiro lo más lejos posible. No parece ayudar demasiado.
- Se te ve algo tensa.- Dice una bocecilla detrás de mí.
- ¿Peter? Hacía mucho que no te veía...
- Lo se, he estado...¿Ausente? Bueno, sea lo que sea, creo que tu también lo estuviste un poco ayer.
- ¿Un poco?- Me río.- Eso es quedarse cortos... Ya veo que a todo el mundo le gusta cotillear sobre los demás...
- Déjales, no tienen nada mejor que hacer en este sitio.
- Supongo...¿Porqué estás aquí?
- ¿No puedo venir a hablar contigo?
- Sí, claro.
Peter mira a los lados como vigilando que nadie nos escuche, entonces se acerca a mi y me coge del brazo bueno acercándose a mi oreja.
- Tenemos que hablar, Ash.
- Sí, está bien, pero, ¿Pasa algo conmigo?
- Tienes que saber algo.
- ¿Algo? ¿De mí?
Niega con la cabeza.- Algo sobre Jayson.
- ¿Jayson?¿A mi qué más me da ese?
- No te hagas la tonta, te conozco lo suficiente para saber que te gusta.
Me sonrojo. Mierda.
- Pero ese no es el caso.- Sigue.- Las cosas se han torcido últimamente, sé que te está pasando algo pero no sólo a ti te afecta.
- ¿Qué...qué quieres decir?
- Ashley, esto que te voy a contar tienes que prometerme que no dirás ni una palabra, podrías ganarte problemas más gordos que los de ser castigada por la "señorita amargada".
El pulso se me acelera ante la petición de Peter, no sé muy bien que decir, no quiero meterme en más problemas pero me intriga demasiado, es algo sobre Jayson, algo personal, lo sé, y no puedo evitar querer saber más de lo poco que sé. No tardo mucho en contestar:
- Lo prometo.- Digo confiada.Nota: ¿Qué será ese secreto tan misterioso y peligroso de Jayson? Lo veréis en el próximo capítulo, ¡Espero que os guste! :D
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CUANDO MENOS TE LO ESPERAS
Teen Fiction《Porque nada nunca fue lo que parece》. Ashley Moore, una chica de 16 años, había disfrutado de sus últimas vacaciones de verano junto a su padre antes de ser trasladada a la prestigiosa escuela GreenHills, en Inglaterra. Allí no conoce a nadie, nun...