CAPITULO 44 Te has lucido, macho.

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Beth se despierta. Baja y se hace el desayuno. No hay nadie en la casa.

Cuando termina de desayunar suena el timbre.

La chica abre. Es Connor.

-Buenos días. -dice feliz. Trae una bolsa.

-¿Qué llevas ahí?

-Churros. Karou dice que están muy ricos.

Va a la cocina, saca un plato y pone los churros en el. De la bolsa también saca un bote de chocolate caliente preparado, de esos que sólo hay que calentar.

Sirve dos vasos.

-Es chocolate caliente, pero me gusta más frío. ¿Cómo lo quieres?

-Caliente.

Por suerte Beth sólo ha tomado una infusión. La chica se sienta en un taburete.

-Connor, deberías dejar de venir sin avisar.

El chico se gira.

-¿Qué mosca te ha picado? Te gusta que venga sin avisar.

-Ya, pero... ahora está esa chica y vive cerca.

-Entiendo, te da vergüenza que te vean conmigo aunque sólo somos amigos.

Connor sale de la casa, Beth le coge el brazo y lo mete dentro. Se apoya en la puerta y la cierra.

-No quiero causar problemas.

-Beth, déjame irme. -dice serio.

-No.

-No me obligues a hacer que me dejes salir.

-Haz lo que quieras.

-¿Por qué no me dejas salir?

-Porque quiero solucionar lo que ha pasado.

-Lo que ha pasado es que te doy vergüenza. Ayer no querías que te acompañase a hacer la compra y hoy no quieres que te visite. ¿Qué quieres que piense?

-Connor, lo que me da vergüenza es salir en todos lados por culpa de esa niñata.

-No, Beth. No quieres que te vean conmigo, a los demás les dejas. A mi no.

-Con ellos no hay rumores de que tengo una relación.

-¿Ahora te importa eso?

-Sí.

-Déjame salir.

-No.

Connor está muy enfadado. Le coge del brazo y tira de ella. Beth cae al suelo y Connor se va.

El chico le da una patada a una piedra. Beth le gusta mucho, no puede hacer todo lo que quiere con ella y ahora encima quiere que se aleje.

A su mente viene la imagen de Beth tirada en el suelo. Se ha pasado. Da media vuelta y llama al timbre.

Abre Beth, tiene los ojos rojos de llorar.

-¿Qué quieres? ¿Tirarme por las escaleras?

-Beth, yo...

-No se que mierda te pasa.

-Déjame entrar. Vamos a hablar.

-Claro, te dejo entrar y me pegas con una silla en la cara o vuelves a tirarme.

Connor suspira. Rápidamente coge la cara de la chica con las manos y la besa. Sólo dura los segundos que vez tarda volver de la impresión.

Cuando la chica se aparta ve a la rubia sosteniendo el móvil. Sale corriendo.

Beth tira de Connor hacia dentro de la casa y cierra.

-¿ERES GILIPOLLAS ?

Connor vuelve a besarla, lo necesita. Sabe que no es el mejor momento, pero se muere por ella. Beth lo empuja.

-Para ya. -dice llorando. -Deja de hacerme daño.

-¿Hacerte daño?

-FUERA.

Beth lo empuja fuera de la casa y da un portazo.

Connor llega a la casa. James está en el sofá.

-¿Qué te pasa, Con?- dice al verle llorar.

Connor se sienta a su lado.

-Problemas con Beth.- le cuenta lo ocurrido.- Jems, no paro de cargarla con ella. La amo.

-Connor, si la amas dale su espacio o la perderás. Tienes que respetarla.

El móvil de James suena.

-Es Beth. -dice.

Beth empieza a contarle lo ocurrido. Una hora después cuelga.

-Connor... Está fatal. No quiere volver a verte. Te has lucido, macho.

Connor siente que su mundo se cae.

Horas más tarde suena el timbre. Connor abre la puerta. Es Beth.

-Toma tu estúpida pulsera. -se la lanza y se va corriendo.

Sin amor a la fama (The Vamps)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora