Don't Let Me Go | Phan

Quince

Phil se despertó de su sueño por el pitido del microondas en la cocina. Shanna sacó su emparedado y notó a Phil ya levantándose cuando escuchó como se estiraba y recordó el vídeo que Dan había subido por la noche.

No estaba segura de que el chico ya se hubiera dado cuenta de el vídeo que Dan había subido las noche anterior y la verdad es que sabía que tal vez haría malo decírselo pero que no llegara a verlo sería algo todavía peor. Se dirigió a la sala donde estaba Phil, y se quedó allí hasta que él le permitiera hablar.

Con una voz tranquila le dijo:

— Phil, Dan subió un vídeo a su canal la noche anterior y sé que tal vez pienses que no deba interesarte pero si aún te queda compasión hacia tu amigo, échale un vistazo.

El chico se hizo la idea y a la vez que se moría de ganas de verlo la inquietud del miedo se le vino, sabía que Dan superaba fácil y no se estancaba pero este raramente no era el caso y probablemente se sentiría demasiado mal al verlo.

Phil solo asintió dejando que Shanna siguiera con su desayuno, inhalo tomando su móvil y restregando su mano en su cara para ver el tal video. Sus manos estaban sudorosas, y su pie golpeaba el suelo múltiples veces.

Se dirigió a el vídeo reciente: "Why?"

Una palabra en el título que dejaba poco a la vista y mucho a la mente.

Dejó que el vídeo cargara y en un segundo allí estaba, una luz no muy buena, nada de edición y Dan con una cara cansada, mirando sus pies y rara vez a la cámara.

Y empezaban los golpes de palabras.

— Soy un idiota, y creo que eso ya lo sabes, pero no hay forma de que yo mismo me de cuenta de cómo llegué a todo eso. Tengo un humor demasiado cambiante, lo sabes. — pauso con una pequeña sonrisa. — Pero es que una parte de mí te deseaba y la otra tenía miedo, no podía evitarlo. Me hiciste sentir inseguro de mí mismo, y creo que eres el único que realmente me ha llegado a sentirme así, de tal manera que supiera que en cualquier momento pudiera perderte y peor cuando ya lo había hecho. — siguió, deteniéndose un momento para dar un silencio.

— No sabes lo difícil que es pensarte, o como mi cabeza. — hizo un movimiento de sus manos a su cabeza. — Es capaz de torturarme. No quiero que sientas lástima, ni nada, pero solo necesito que te des cuenta que eres parte de mí y que... Simplemente te necesito joder.

Phil pauso el vídeo, se mordía el labio y trataba de mantenerse con el corazón helado pero se le hizo casi imposible. Dan, que lo tenía ahí metafóricamente rendido a sus pies y el que solo dejaba que sufriera. Solo quería ir donde estaba y abrazarlo, esos abrazos que pueden sacarte el alma y repararte el corazón. Los dos se hacían tanto daño mutuamente y jugaban a los tontos cuando se trataba de amar.

Siguió el vídeo.

— Y lo admito. — se encogió de hombros el castaño. — Me seguiré preguntando por qué todo tuvo que dar este giro tan innecesario pero al final quiero que te quede claro ya que me preguntó el por qué de muchas cosas pero acepto totalmente mi culpa. Esto es todo lo que me queda. — terminó apagando la cámara.

Phil se quedo como estaba, y toda eso que sentía el silencio lo hacía desear gritar internamente y querer correr hacia dónde Dan para acogerlo y decirle como todo estaba bien.

Se quedó frío, como en pausa hasta que Shanna llegó para salir hasta su trabajo y lo miro.

— ¿Estás bien Phil?— le preguntó la chica mirando como sus ojos abiertos se quedaban solamente en un punto.

El chico solo asintió con la misma cara.

— Vamos Phil, sé que no lo estas y eso está bien.— dijo acercándose al sofá

— Quiero regresar. — soltó aguantando una lagrima.

— Lo sé, yo quiero ver cómo alumbras el mundo de Dan de nuevo. — le susurró mientras lo consolaba con una mano en la espalda.

La chica miro su reloj debajo del suéter, llegaría tarde pero su amigo era más importante.

— Venga, yo te ayudo a empacar para que hoy mismo lo sorprendas. — dijo levantándose trayendo la maleta del chico.

Phil sonrió agradecido y se levanto para ponerse en marcha.

Su par de jeans, zapatos y variedad de camisetas estaban dobladas justo dándole espacio a todo lo demás, cerrando la cremallera que lo hacía dar un paso seguro a lo que se venía.

Shanna se dirigió hacia su trabajo y dejó al chico tomando su café mientras se preparaba para volver donde pertenecía.

Penúltimo Capítulo.