Tom Kaulitz (instagram)

Confusion total

Dejó caer suavemente su espalda en la puerta de madera blanca de su departamento, tenía las mejillas mojadas por las lágrimas que se negaban a dejar de brotar de sus ojos.
Sentía un nudo en la garganta que no la dejaba respirar y la presión en su pecho dolía demasiado. No se fijó en la presencia de Kate, quien la miraba desde la barra de la cocina mientras se hacía un té.
-¿Qué te pasó?- preguntó la rubia asustada al ver a su amiga tan mal
-Kate...-sollozo más fuerte dejando caer su cabeza hacia atrás dándose un ligero golpe contra la puerta- Kate, estoy tan mal, me siento confundida, no sé qué hacer
Su amiga salió de la cocina casi corriendo y fue hasta donde ella la tomo del brazo y la llevo a la sala para que se sentarán y ella pudiera contarle que pasaba
-No te estoy entendiendo nada Eadlyn
-Adam, él me propuso matrimonio y me hizo abrir los ojos... -más lágrimas empezaron a salir de sus ojos con más fuerza- me hizo darme cuenta que Tom solo quería acostarse conmigo...-se quedó mirando a la nada con una expresión vacía, sería y fría- y lo consiguió, ¡Kate me acosté con el sin pensar que era lo único que quería!- exclamó casi gritando sintiéndose la peor de las estupidas... Estupida y zorra
-A ver no, Lynn... ¿Él mismo té ha dicho eso?- preguntó Kate con cuidado tratando de hacer entrar en razón a su amiga
-No... Pero no hace falta, es obvio ¿no?- después de decir eso soltó una leve risa burlándose de ella misma
-Creo que deberías hablar con él, tal vez Adam te dijo eso solo para confundirte y alejarte de Tom
-Puede ser... Pero no me siento capaz de hablar con el, si me dice que es verdad no lo voy a poder soportar- dijo más calmada pero aún con lágrimas que caían de sus ojos mojando sus mejillas.
No quería pensar más ya había tenido demasiado con sus demonios diciéndole que estuvo mal lo que hizo y el ángel que le decía que había echo lo correcto. Veía la tele sin poner atención mientras comía de un enorme bote de helado de fresa. La pantalla de sus celular se iluminó y en ella se podía ver que tenía un nuevo mensaje de Tom, lo abrió en seguida reprendiéndose así misma por ponerse tan nerviosa
"Podemos vernos esta noche"
"Claro, tengo algo que decirte"
"Te veo en starbucks que está cerca de tu depa"
Eso fue todo no hubo más mensajes por parte de él y ella tampoco iba a iniciar una conversación.
Esa noche se encontraron en la cafetería como habían quedado él la esperaba en la mesa con un pequeño conejo de peluche
-Es muy lindo- dijo dejando salir una pequeña sonrisa la primera en el día... Una sonrisa que solo estando con Tom podía esbozar
-Para ti- le dio el peluche y ella lo tomo agradeciéndole y se sentó en la silla frente a él
-Escucha, el lunes tengo que regresar a los ángeles quiero saber qué va a pasar ahora con esto que tenemos- Tom fue directo sin preámbulos
-No lo sé... ¿Tú qué quieres que pase?- preguntó nerviosa mientras jugaba con las enormes orejas del peluche
-Lo que yo quiero es que seas la mujer de mi vida- fue casi un susurro pero Eadlyn pudo escucharlo y alzó su mirada para poder ver su expresión, él tenía pegada la vista al café del que no había bebido nada y estaba serio, muy serio
-Adam...-tomo todo el aire que pudo- Adam me propuso matrimonio- el guitarrista alzó su mirada fijándola en la de la chica
-Y... ¿Aceptaste?- preguntó con miedo a la respuesta
-No... No pude, Estoy confundida él es una parte muy importante en mi vida y lo quiero demasiado pero también siento algo por ti que es más fuerte que yo y...- Tom la interrumpió
-Y no tienes que elegir a uno de los dos ahora... Piensa bien que es lo que quieres y créeme, cualquiera que sea tu elección será la correcta- Eadlyn lo miro sorprendida y asintió
-¿Solo fui para ti una chica más de tus noches de aventura?
-No... Pero si quiero que seas la mujer de mi vida de locura- le sonrió levemente y bajo la mirada- pero si no me eliges a mi... Lo entenderé y me alejare
Eadlyn sintió que su corazón se estrujaba con el simple hecho de no tener a Tom en su vida, le aterraba
-¿Y si te elijo a ti?- preguntó con voz temblorosa
-Será la mejor decisión de tu vida- río un poco alto y Eadlyn se enamoró más al ver cómo sus ojos se achinaban haciéndolo ver tan tierno.