No se aceptan Devoluciones [EXO-FANFIC]

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Al igual que el chico antes mencionado, se encontraba también a inicios de un nuevo ciclo universitario con la diferencia de que esté ya iba por su 8vo ciclo de la carrera de finanzas. Muy a su pesar tuvo que escoger esa carrera por el bienestar de la empresa familiar, al ser el único heredero de las industrias Kim, debía saber cómo manejar la comercialización y ver por el área financiera y administrativa.

Sabía que el trabajar con dinero ocasionaba tentaciones para el personal encargado, que mejor que jugar el mismo con el dinero, después de todo esa empresa era un 85% suya. Una vez se graduará la empresa pasaría a ser directamente de el o eso fue lo que le indico su padre.

Su familia por muy rica e importante que fuera y que ante los medios de comunicación lucieran como una de las familias más felices, ellos era todo menos eso.

Desde que él nació su vida ya había sido planeada, él solo debía de seguir el plan de vida que su padre escribió, creció sabiendo solo de la existencia de su padre ya que su madre había fallecido mientras estaba dando a luz. Según lo que su tío le contó, su padre cambio drásticamente ante el fallecimiento de su madre, tal parecía que el tener el rostro de su mama no le ayudaba mucho

Pero muy a pesar de eso, se podría decir que tuvo algo parecido a una madre en su vida. El secretario personal de su padre se había encargado de que nada le faltará y eso incluía el amor maternal que este le demostraba, desde que tenía uso de conciencia.

Leeteuk siempre estuvo ahí, en cada cumpleaños, en cada premiación, en cada noche de pesadillas, básicamente él fue su madre y padre en esa enorme casa de varias habitaciones. Aun le causa cierta gracia el recordar cuan tonto fue en su niñez

Ya siendo muy temprano por la mañana y siendo el primer día del nuevo semestre, su padre había pedido que fuera a visitarlo que tenían asuntos que tratar con él ese día. Él con pesadez y mala cara se negó, pero sabía que su padre no era de aquellos que aceptaban un no por respuesta, por lo que decidió hacerle caso ya que no tenia ganas de desatar la tercera guerra.

Una vez dentro de las instalaciones de industrias Kim, este se hizo paso por todas las señoritas en minifalda que lo saludaban con sonrisas falsas situadas en sus rostros

Él saludo de vuelta con la sonrisa más falsa que pudo para no ser descortés, no fue hasta que llegó al último pasillo que pudo sonreír de verdad.

— Joven Kim

— secretario Park

Respondió de vuelta para luego echarse a reír, igual que el contrario.

— lo siento es que aún no me acostumbro

— yo tampoco la verdad, pero apresúrate que tu padre está muy molesto, ya sabes cómo se pone – le indico esto último con preocupación

Él más joven solo hizo un movimiento de cabeza para luego dar media vuelta y entrar a la gran oficina.

— bueno aquí me tienes, que es eso tan importante que debes decirme

Sin esperar alguna invitación por parte de su progenitor, tomo asiento frente a este quien lo veía entre serio y molesto

Esto le preocupaba, que el supiera no había cometido ningún error o ¿sí?

— Bueno para no hacer muy larga esta conversación, te tienes que casar y antes de que digas algo terminaré por decir que esté matrimonio ya estaba arreglado desde que naciste, si quieres un culpable ahí está tú abuelo

Junmyeon por su parte procesaba lo antes dicho, él no lo veía malo, a decir verdad, ya tenía 24 años por lo que sentar cabeza no le parecía malo.

— Antes de que lo olvidé, tu prometido es un hombre