Los gemelos Mendes s.m

Capítulo 10

Hoy iba a ir a patinar con Shawn, no se si esto contaría como una cita. Pero aún así iba a seguir siendo yo misma.

Llegó Shawn por mi, o más bien entró por mi ventana por suerte ya me había vestido.Me puse ropa cálida para que no me diera frío en la pista.

-Cambiate.

-Shawn ya estoy vestida.

-Cambio de planes, no vamos a ir a la pista.

-¿Qué? ¿Es en serio?

-Si, y ponte ropa normal pero cómoda.

-¿A donde vamos a ir Shawn?

-Es una sorpresa Hanna.-me dedico una sonrisa, su sonrisa era monumental en verdad era hermosa.

Entré a mi vestidor y volví a cambiarme. Me puse un pantalón negro, una camisa de cuadros y mis converse.
Salí de mi vestidor y aún estaba Shawn ahí.

-Oye Shawn.

-¿Qué pasa Hanna?

-¿Sabes algo de Peter?

-No desde que salió de la casa no ha regresado e incluso nuestros padres ya se preocuparon.

-Ya aparecerá.

-Eso espero el no es así.-me senté junto a él, tomé sus manos y me acerqué a él.

-Todo estará bien, lo prometo.

-Bueno vámonos.

Shawn tomó el auto de su padre ya que Peter se había llevado el de ellos. Por el camino que tomamos creó que ya se a donde vamos, pero no estoy segura.
Y si estaba equivocada creí que nos dirigiamos hacia el cine y fuimos a él parque de diversiones.

-Vamos a pasar una noche genial, este lugar es muy divertido ¿Éstas lista?

-Claro que si-lo tomé por la mano y caminamos juntos.

Había tantas atracciones que no sabíamos a cuál subir.

-¿A qué le apetece subir señorita?-siempre le gustaba hablar como un caballero.

-¿Qué te parece si vamos a ese juego?-señalé la torre.

-Estas loca, tengo vértigo a las alturas, puedo soportar la montaña rusa pero eso no.-y vaya que lucía asustado.

-¿Entonces vamos a la montaña rusa?

-Si mejor.-nos tomamos de la mano y nos dirigimos hacia haya.

A mi no me gustaban las montañas rusas, me causaban mareos horrorosos que incluso me hacían llegar al vómito. Pero aunque no me gustará subí con Shawn, espero no vomitar.

Amaba la cara de Shawn cada vez que el carrito de la montaña rusa bajaba, gritaba cerraba los ojos y todo el aire pegaba en el rostro, yo sólo iba riendo por las caras que hacía.

Después de la montaña rusa, subimos a un par de atracciones más, fuimos a comprar algodones de azúcar y dulces de todo tipo. Nos sentamos a comer y comenzó a oscurecer.

-Vamos a la casa del terror.-dijo Shawn con colorantes de los dulces por todo su rostro.

-Claro, aunque tú saldrás corriendo antes que yo.-dije riendo.

-Claro que no.

Nos dirigimos hacia la casa del terror y antes de entrar veíamos como las personas salían corriendo y gritando de ahí.
La verdad si me asustó muy fácil pero quería demostrar que soy fuerte.

Entramos y todo era un lugar negro, no se lograba ver nada.

-Shawn ¿Sigues aquí?

-Si por aquí estoy.-escuché su voz un poco más adelante de mi.

La casa no era tanto de monstruos, era de ruidos, sensaciones y cosas cotidianas pero te hacían sentir un terror horrible.
Demasiados gritos salieron de mi boca y Shawn sólo se burlaba de mi.
Hasta que de pronto se escuchó que nos seguían con una sierra eléctrica.

-Mierda Hanna, corre.-no le respondí sólo grité y me heche a correr. Quedaba poco para salir se podía ver la luz así que corrí más rápido.
Al salir de la casa del terror ya no podía respirar sentía que mis pulmones iban a colapsar.

-Voy a morir.-dije sin poder respirar bien.

-No mueras Hanna. La vida no sería igual sin ti.

-Pero después del paro que me dieron ya no tiene sentido vivir. Moriré así podré descansar.

-Entonces si tu mueres yo también.-dijo bromeando.

-¿Porqué?

-No me imagino la vida sin ti y no quiero ver una vida sin ti Hanna.-se acercó a mi iba a besarme, hasta que sonó su celular.

-Esta bien mamá, ya voy para haya.-y colgó la llamada.-Era mi mamá dijo que ya encontraron a Peter ¿Vamos?

-Si.-lo tomé de la mano y salimos para ir por Peter.Subimos al auto y Shawn comenzó a manejar.

-¿Dónde está Peter? ¿Está bien?-estaba preocupada por el, todo era mi culpa yo lo había hecho molestar y por eso se fue.

-Esta en el hospital.-dijo serio.

-¿Y el está bien?

-No lo sé, mi madre no me quiso decir nada.

Durante todo el camino al hospital estuvimos callados, me imaginaba que a Peter le pudo pasar lo peor y estaba súper nerviosa. Al llegar al hospital vi que ahí estaban los papás de los chicos así que fui a saludarlos.

-Hola, ¿Cómo está Peter?.

-Hola Hanna querida.-su mamá me vio y de inmediato me abrazó.-Peter ahora está estable pero aún no despierta.

-¿Pero que fue lo que pasó mamá?-dijo Shawn el cual estaba detrás de mi.

-Shawn tú hermano se puso ebrio y entonces estaba manejando para regresar a casa y chocó.-las lágrimas de su mamá comenzaron a caer por su rostro y yo fui a abrazarla.-Por suerte alguien reportó el accidente y pudieron salvarlo.Ahora sólo esperamos a que despierte.

-Todo va a estar bien, Peter es una persona muy fuerte y logrará pasar por esto.-tomé la mano de su madre para demostrarle mi apoyo.

-Gracias Hanna por apoyarnos en estos momentos.-dijo su padre.

-Para mi ustedes son mi familia y no me molesta estar aquí, al contrario es bueno poder apoyarles en estos momentos.

-Eres una buena chica Hanna, ya entiendo porque mis chicos te adoran.No me molestaría que salieras con uno de ellos.-su padre río y prácticamente me estaba diciendo que fuera novia de alguno de los dos.

-Y yo los adoro a ellos.

Shawn y yo fuimos a una sala de espera y nos recordamos en un sillón, ahora estaba más preocupada por Peter después de saber que le había pasado.Ya se estaba haciendo tarde pero no me importa si me tengo que quedar toda la noche aquí

-Peter despertó.-llegó su mamá corriendo a la sala de espera.

-¿Cómo está?-Se levantó Shawn del sillón y fue directo a su mamá.

-Él está bien, esta lastimado pero esta bien, ¿Quieren verlo?

-Si queremos verlo.