Strange - (Niall Horan FanFiction) TERMINADA

Cap 4 - ''De lo contrario puedo matarte''

Desperté con un increíble dolor de cabeza, sentía como si cien abejas me hubieran picado en la cabeza, lo sé soy ciertamente exagerada pero realmente me dolía. Me levante de la cama sin recordar cómo había llegado ahí, solo recordaba que Niall salió de la habitación dejándome sola. Entonces estaba asustada por su comentario.

*Flashback*

- ¿Ya no me tienes miedo? – volvió a fijar su mirada en mí. Oh dios yo no podía mirarle, con solo ver sus cristalinos ojos sentía que me desvanecía, ¿cómo era capaz de producir todo eso en mí a través de sus ojos? No sabía si eso era algo bueno o malo.

- ¿De - debería tenerlo? – soltó una risita y se alejo de mi hacía la puerta cerrándola detrás de él.

- Deberías – dijo a penas en un susurro pero yo lo escuche como un estruendo repitiéndose varias veces en mi cabeza, su comentario me dejo petrificada. Él me asustaba demasiado.

*Realidad*

Entonces sentí mi garganta seca desgarrándome cuando vi el vaso de agua encima de la mesilla de noche color marrón. Tome hasta no dejar ninguna gota en el vaso, después de eso no recuerdo nada, ¿qué es lo que había pasad…? Oh, pero que idiota soy a veces. ¿A eso se refería con que no debía confiar en él? Esperaba que solo fuera eso, crucé los dedos. Como pude ser tan tonta, el muy hijo de puta seguramente me había puesto calmantes en el vaso, la ira se reflejo en mi rostro. Me dirigí al pequeño baño que se encontraba en la habitación dando saltitos ya que no tenía chanclas, me miré en el espejo algo sucio. Mi cara era lo más parecido a un mapache, tenía los ojos negros por debajo debido a que no había podido limpiar mi maquillaje la noche anterior, también se asomaban ojeras. Tenía mal aspecto y como no tenerlo. Me lave la cara para despejarme sintiendo las gotas caer por mi rostro cuando unos fuertes ruidos salieron de mi barriga estremeciéndome, vaya realmente estaba hambrienta. 

Recuerdo que no comía desde ayer por la tarde cuando estaba con Hailey antes de que pasara todo esto. Oh dios mio, Hailey. La preocupación me inundo de lleno imaginándome lo peor, y si ¿la habían secuestrado también? O aun peor…matado. Mi corazón dio un vuelco. Intente dejar de lado los peores resultados. Si algo le llegara a pasar por mi culpa no me lo perdonaría jamás. Ella era más que una amiga, era mi hermana, no de sangre pero como si lo fuera. No me lo pensé ni dos veces cuando baje escaleras abajo casi rodando para pedirle explicaciones a Niall. 

Entre en el salón pero allí no había nadie, solo vi un papel blanco encima de la mesa, divise una firma familiar mientras me acercaba con pasos lentos hasta que noté un olor a sándwich con queso, embobada y guiada por mi estomago me dirigí hacía donde procedía ese riquísimo olor, la cocina.

Allí se encontraba de espaldas metiendo el pan en la tostadora mi atractivo secuestrador, no pude evitar detallarlo. Juró que si me lo hubiera encontrado por la calle nunca se me hubiera ni pasado por la cabeza que él fuera un secuestrador, era tan jodidamente normal y tan jodidamente sexy. ‘’Jade, pon los pies en el suelo’’ me repetía constantemente a mí misma. 

Se dio la vuelta quedando frente a frente. Note su mirada viendo mi cuerpo de arriba abajo con una sonrisa pícara, no pude evitar sonrojarme, tenía el pulso en la cara.

- Te queda bien – dijo refiriéndose a su camiseta blanca que llevaba encima, entonces me di cuenta que no era más larga que mis rodillas, mi cara supero el color rojo con mis manos intentado bajar la camiseta pero era imposible.

- Cállate – lo fusile con la mirada y él soltó una risita. Envolví mis manos alrededor de la cintura evitando que se subiera más la camiseta. Me detuve frente a él mirándolo seria. Tenía cara de que-coño-te-pasa.