Novocaina.

No llores, Louis.

29 de agosto, 1991

Había escuchado que la maestra de lectura se había caído por las escaleras y no daría su clase por un mes, eso era genial.
No que la maestra se cayera, si no que no tendríamos esa tediosa clase un mes.
Cuando salí y llegue al patio ahí estaba Harvey sentado leyendo, a su lado había dos chicos más esperando a que llegaran los demás ¿había dicho que éramos 5? Bueno lo éramos, me acerque silenciosamente que fue algo imposible ya a que por primera vez note que mis botas eran ruidosas.

El volteó a verme y sonrió.
Me senté a un costado de el sin decir nada, no estaba escuchando música como lo hacía casi siempre porque mis audífonos murieron en el escusado la noche anterior, así que solo contemplé a los otros tres chicos que tenía al lado.
El chico de la correccional que era rubio y apenas me había dado cuenta que lo era, miraba sus manos extrañamente, por un momento quise saber que era lo que pasaba por su mente y él porque había estado en una correccional. También estaba esa chica, Allyson que leía un comic de spider man mientras comía uvas, lucia normal y no entendía que hacía ahí.

Pronto llegaron Dan y Billie, así que Harvey comenzó a hablarnos de la integración familiar y de aprender a ser cercanos con ellos, empecé a pensar en cómo seria la familia de Harvey, el lucia como el típico chico de familia perfecta, ya saben el que llega a su casa y su madre está en la cocina con una sonrisa, le pregunta ¿cómo estuvo tu día cariño?, con un padre que está orgulloso de las notas de su perfecto hijo.
Mi familia solía ser algo así, después me di cuenta que todo era falso y que las cosas nunca estuvieron bien, solo que yo no me daba cuenta.

Yo no era muy cercano a mi familia, solo era cercano con Mike mi primo que debido a que mi tía falleció y su padre era un idiota, él vivía con nosotros. Él era más como mi hermano, solíamos escondernos detrás de los sillones y jugábamos mucho, aunque no recordaba cuales eran pero si recordaba que eran divertidos o eso pensaba Mike y si él lo pensaba entonces estaba bien para mí, él era mi hermano mayor y siempre creí que tenía razón.
Y bueno ni siquiera con mi hermano más pequeño era cercano, lo quería pero a Andy le encantaba molestarme y quitarme todo, el cariño de mis padres por ejemplo, sabía que el solo es un niño pequeño y no tenía la culpa, él había sufrido mucho a su corta edad pero aveces no podía evitar sentir un poco de enojo con él.
Con mi abuela era con la que menos interactuaba, ella siempre quiso más a Mike y Andy que a mí, siempre lo supe porque hasta mis papás lo decían, dentro de mi si sabía porque no me quería pero no me gustaba aceptarlo, después de que ella falleciera fue mi padre quien tuvo el puesto de a quien más alejado era, se podía decir que yo era su favorito y yo también lo prefería sobre mi madre, pero luego nació Andy y algo se rompió, tal vez había sido por aquel accidente, pero no podía hacer nada sin que me tachara de idiota o inútil, sinceramente me dolió que me lo dijera tantas veces, escuchar a la persona que más quería insultándome es probablemente una de las cosas que más me dolieron.

Harvey se acercó a mi cuándo termino.
- ¿Te parece si nos vemos a las 3? - Sonrió
- Si, cómo sea ahora déjame en paz - deje a Harvey atrás, el tema me había dejado un poco mal y no tenía ganas de verlo y mucho menos de hablarle, pero al parecer a él no le importo que yo fuera grosero e insistió
- ¿Pasa algo, Enzo? - me dijo cuando comencé a caminar.
Rodé los ojos, Si, pasa que alguien no me deja en paz
- Se que no nos conocemos mucho, pero puedes contarme si tienes algún problema, sabes quiero que seamos más cercanos -
- Y yo quiero conocer a Michael Jackason, pero no todo se puede en esta vida - camine rápido con la esperanza de que Harvey me dejara de seguir, pero él me detuvo agarrándome el brazo
- Oye, ¿que estás haciendo? -
- ¿Por que eres tan grosero Enzo? Solo intento ser amable - respondió
- ¿Y por eso me sigues? Sabes Harvey, no necesito tu amabilidad, entiende no somos amigos y dudo que lo lleguemos a ser, limítate a hacer lo tuyo y déjame en paz - el no dijo nada, solo se quedó ahí parado sin decir nada mientras yo me alejaba, estaba tan enojado que comencé a llorar, no tenía motivos para llorar pero era tan patético que lo hice, no llores, ni siquiera te dijo nada malo para que te pongas así, me decía mientras caminaba con los brazos cruzados, ni yo sabía por que lloraba, tal vez era porque no me gustaba que intentaran ser amables conmigo, sentía que les daba lástima y que solo querían burlarse.
¿Quién era él y porque creía que tenía el derecho a sentir lastima por mí? A penas conocía al tipo y queria venir con su sonrisa del gato Cheshire a meterse en algo que no le importaba.
Trataba de dejar de llorar, ni siquiera es para tanto, idiota sensible. Me dije una vez más.

Unas casas antes de llegar a la mía trate de calmarme, no quería que mamá me preguntara que me pasaba, no le gustaba que yo llorara siempre decía que debía ser fuerte y no llorar por estupideces si no que sería de mí en la vida. Tenía razón, supongo.

....

¡HOLAAAAAA!

100 años después actualizando (desde diciembre creo) , lo siento si es que aun alguien esta por ahí leyendo esto, la primera vez que Louis cuenta algo es el 26 de Agosto de 1991 y pues hoy es ese día, así que es especial, aparte que como no recuerdo exactamente que día publique esta historia pues tome este día como el "aniversario" de Novocaina. 

Así que ¡Feliz primer aniversario de Novocaina!