CAPÍTULO 22.

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Supongo que aquí acaba la maravillosa vida de Lorena con Daniel Oviedo.
Ya no podía hacer nada; ni quería.
Sólo me quedaba llorar y olvidarme del chico más importante de mi vida.
Ojalá mi padre me de fuerzas desde ahí arriba.
Espero que no se enfade conmigo por todo esto.
A veces me gustaría estar con él ahí arriba, y que me diga lo que me quiere, aunque sea una vez.

Esta tarde cogería el tren para Murcia.
Me preparo las cosas y lo meto todo en la maleta.
Llamo a mi madre y le digo que en unas horas estaría ahí.
Me despido de la única "amiga" que había hecho en mi estancia en el Instituto estos casi 3 meses.
Poco tiempo, pero el suficiente para darme cuenta de que hice mal en irme.
Salgo del Instituto y me dirijo a la estación de tren.
Eran las 3 de la tarde, y el tren no llegaría hasta las 4.
Sentada en un banco de la estación, me pongo música en el móvil con los cascos.

-Lorena. -dice una voz masculina. Y como no, como siempre, el mismo. Dani.
-¿Ahora qué?¿has venido aquí porque has hecho otra apuesta con tus colegas y si me llevas de vuelta, te pagaran un tatuaje en la polla? -me hablo sin girar ni siquiera cara.
-No, estoy aquí por nosotros. ¿Enserio vas a dejarme aquí sólo por una broma de mal gusto?
-¿Broma de mal gusto? Niño, que le has enseñado mis sábanas con sangre mia a tus amigos. -le miro cabreada.
-¿Te vas entonces? -dice sin hacerle caso a lo que había dicho.
-Claro. -digo borde.
-Está bien, pero cuando te acuerdes de mí, mira esto, yo la estaré mirando siempre. -me enseña la pulsera que llevaba puesta y me pone una igual a la suya
-No me acordaré de ti, tranquilo. -me la quito y se la vuelvo a dar.
-¿Por qué?
-No puedo acordarme de alguien que me ha hecho tanto daño, lo siento.
-¿Ya no me quieres? -dice el con la esperanza de que le dijera que si le quería.
-No, ya no te quiero. -miento.
-Te enamoraste de mi lado oscuro, del que todos detestan, sólo con eso te enamoraste, porque ya sabía cómo era mi otro lado. Has llorado por mi, yo también, has reído conmigo, yo también, ¿No son suficientes razones para quedarte a mi lado?
-No. ¿y sabes por qué? Porque me he dado cuenta de todo. De que todo era mentira. De que tú si eras mi príncipe, pero yo nunca fui tu princesa, me di cuenta de que yo era como otra cualquiera. Otra a la que has engañado con tus "te quiero". Y ahí, después de tantas mentiras, me doy cuenta de que este cuento no podrá tener nunca un final, que no podremos estar juntos jamás. -digo mientras una lágrima recorre mi rostro.
-Sólo ha sido un fallo Lorena... Dame otra oportunidad, y te juro que no te fallo. -dice el cojiendome de la mano, pero yo le rechazo.
-Es que siempre te he perdonado, todas las veces que me has hecho daño, te he perdonado, sin que tú te des cuenta. Porque me importaba más que tú estuvieras feliz, que yo estuviera enfadada, y renunciaba a mi orgullo. Y así sigues, creyendo que yo te perdonaría todo, pero ya ves, ha llegado un punto en el que la palabra perdón ya no está en mi diccionario. Se ha borrado, porque al final, ¿para qué perdonar y luego me hacen más daño?
Lo siento, pero esta idiota se va, Dani.
Si me quisiste alguna vez, por muy poco que sea, sabrías lo que es amar, y es no fallar a tu pareja nunca. Y aquí es donde me doy cuenta de que todo era una mentira. Gracias por todo este tiempo, pero ojalá, que no vuelva a pasar nunca más. -me levanto para montarme en el tren que ya había llegado, pero Dani coge del brazo.
-¿Volveré a verte algún día?-dice con lágrimas en los ojos.
-Si tienes fotos mías, si. -me suelto y me subo en el tren.

Dejo a Dani llorando, sentado en aquel banco. No quería dejarle ahí destrozado, pero él lo ha hecho más de una vez y nunca hizo nada.
Me dirijo a otro sitio, para dejarle a él atrás. Quería irme, pero con él. ¿De que serviría si me fuese sola y no viniese el conmigo?

El Lado Oscuro. Daniel Oviedo. || #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora