El dolor de la perdida

La visita de un angel

Abrió sus ojos con pesar no sabía que estaba haciendo, escuchaba voces a su alrededor que se le hacían muy familiares pero no podía identificarlas

-Ay, ay... Mi costilla... Tan doloroso -Decía la primera

-Ahhh... Das pena -Decía la segunda con lastima y algo de molestia

-Muérete Kusomatsu -Decía la tercera que extrañamente recordaba más

-Ne, ne, Ni-san, ¿Por qué dueles tanto? -Decía la cuarta con un extraño tono alegre y a la vez asombrado

-Enserio que dueles... Ahh, ¿Cómo es que eres mi hermano? -Dijo una quinta y última voz más decepcionada que la de los demás

Su pecho le dolía y cerró los ojos rogando que se callaran las voces no quería escuchar más

Abrió de nuevo los ojos y miro a sus brazos, tenían unos cortes profundos haciendo que brotara sangre como ríos de sus muñecas, se empezó a marear y el olor a óxido lleno sus fosas nasales

Quería gritar pero tenía un gran nudo en la garganta, desesperado comenzó a llorar y tratar de moverse

Todo fue inútil

Quería que fuese una pesadilla, no podía estar pasandole esto, una voz le hizo mirar al frente cinco sombras eran las que estaban frente a él, todas parecidas entre sí pero con un distintivo color

-Oh, vaya, así que al final decidiste irte por cuenta propia, al menos entendiste que duele solo verte, ya me había cansado de soportarte -Dijo la de color rojizo con un tono despreocupado como si del clima hablase

-Una molestia menos por la cual preocuparme -Dijo la segunda en color verde

-Hum... Jaja, espere tanto por este momento, Kusomatsu, al fin al que más odio se largara para siempre -Dijo haciendo un extraño baile como de felicidad la sombra violeta pero con una voz tan desinteresada

-¡¡HUSTLE HUSTLE MUSCLE MUSCLE!! ¡¡Al fin Ni-san a sido expulsado!! ¡¡Jajaja eras tan doloroso que hasta yo me di cuenta!! ¡Inútil! ¡¡Jajaja!! -La cuarta voz derrochaba una felicidad y energía que le daban un toque aún más cruel a sus palabras, contrario al color amarillo que portaba que normalmente representaba energía este le daba aún más ganas de terminar su sufrimiento

-Ahhh... Al menos ya no me molestarás, ni me avergonzaras más, eso es algo bueno para mí, ya temía que tuviese que hacer algo yo -La última voz con un color rosado aún que lo dijese con un tono dulce, falso por supuesto, no aminoraba el gran daño que sentía y ese pequeño toque de malicia

Tomó su pecho con ambas manos, lágrimas caían de sus ojos mientras sentía un gran vacío desolador, apretó con más fuerza sintió una sustancia viscosa, bajo la mirada y era aún más sangre desde su cuello hasta el pecho

No supo porque pero comenzó a reírse con fuerza como un loco, retumbaran sus carcajadas acompañadas por sus lágrimas que se negaba a cesar el dolor en su pecho no ayudaba

Siguió ríendo sin control, las sombras se iban poco a poco, una vez se fueron otra voz diferente a esas comenzó a hablar haciéndole callar al instante

-Nunca fuiste querido... Nunca debiste existir para empezar, tú estás mejor siendo nada... -

Tapo sus oídos no quería escuchar más sentía que se rompería aún más pero aún seguía oyendo esa voz

-¿Ves? No importa cuánto amor sientas los demás te seguirán viendo como una molestia, una que no debió existir nunca, ¿Por qué no acabas ya como antes? -

Se quedo en shock

-"¿Antes? "-

-¡¡Anda!! ¡¡Que eres un inútil doloroso!! ¡¡Nadie te quiso nunca!! Todos te dejaron!! ¡¡¡Ignoraron el dolor que sentías y al contrario deseaban que te fueras para siempre!!! ¡Que dejaras de joder! O !¿Aún no lo entiendes?! ¡Eres una desgracia!-