Final 3 ■Mañana■

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:'D me tarde nuevamente pero lo prometido es deuda, el final escogido por:

:'D me tarde nuevamente pero lo prometido es deuda, el final escogido por:

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Aquí está!: Mañana,  espero que les guste!

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Veían impotentes el cambio monstruoso que sufría Choromatsu, nadie podía decir nada ante la estupefacción que estaban experimentando ante tal escena

Osomatsu fue el primero en moverse jalando a Karamatsu por el cuello de la sotana lanzandolo hacia atrás cayendo este de sentón apenas dándose cuenta de lo que pasaría

El demonio rojo tan sólo sacó su arma dispuesto a atacar sin piedad alguna, su decisión estaba tomada y nada le haría retractarse de sus actos, si debía tomar lo poco de vida que le quedaba a Choromatsu por salvar a su amado y sus hermanos, que así fuese

Choromatsu tan sólo miraba en cámara lenta como el demonio corría a su dirección ayudado por el impulso de sus alas y como con su arma apuntaba a su pecho con un semblante tan serio que hasta daba risa de ver

Sus iris ahora oscurecidos y manchados se dirigieron al techo de aquel edificio, cosa que ya no importaba y haciendo uso de su poder pronto este desapareció

Las paredes que contenían a los 6 se desplomaron, el techo cayó hecho polvo, el piso crujió y se agrietó saliendo por este grandes raíces que tomaron como objetivo al demonio que venía a su encuentro, mas este en un segundo desapareció poniéndolo en alerta

Sintió un frío viento detras suyo e invocando su arma apenas desvío el zarapaso que sin duda le habría partido en dos, retrocedió unos cuantos metros y está vez pudo ver a Osomatsu en cuclillas al piso con la punta de su tridente enterrada por completo en el suelo, no estaba jugando

—¡Vaya! ¡Hasta que decides ir una vez enserio conmigo, ne, Osomatsu ni san! —Se burlo mientras el aire que ahora entraba por las ruinas de el edificio se arremolinaba por su encuentro, las nubes encima suyo se volvían oscuras, negras, cargadas de truenos y agua

—... Supongo que Oni chan a veces es algo cruel, pero sabes Choromatsu, pudimos arreglar esto de otra forma, pero bueno, tú así lo pediste, después de todo supongo que debo hacerme responsable, aunque es una lata~ —

Respondio el mayor con una media sonrisa mientras desenterraba su arma y volvía a su posición de ataque, no deseaba hacerlo pero ya estaba decidido

—¡Hey! ¡Pajamatsu, no me detendré aún si súplicas! —

Ambos, tanto el demonio como el Dios caído se lanzaron al ataque, mientras Osomatsu se encargaba de hacer varios zarpazos tanto con su arma como cuando tenía oportunidad con sus garras

Choromatsu se defendía apenas, aún con el poder que había adquirido le era difícil contolarlo a voluntad y poder hacerle frente al mayor

El semi Dios corrompido apenas podía responder los ataques con sus raíces, el batir de sus alas era lento pero su convicción por no ser derrotado era tan grande como su rabia

El dolor de la perdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora