Capitulo 22: "Yo tengo la cura"

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—Joseph despierta —me hablo Liam— tenemos un problema.

Yo no quería despertar, quería otras horas más, sentía como si hubiera dormido una hora, una maldita hora.

—Vamos bella durmiente es hora de levantarse —dijo Marcus mientras me pegaba en la cabeza, maldito desgraciado.

—No me toques —dije mientras me levantaba en el asiento— ¿Qué sucede?

Liam paro el coche y se bajó, Marcus lo siguió, mi pregunta se había quedado flotada en el aire, antes de bajarme me fije en la otra cámara que estaba en el coche de Cameron, todos estaban bien, Cameron también había bajado al igual que Lucas, ¿Qué estaba pasando?

Me baje del coche y para mí todo se veía bien, no había señales de vida, en realidad estaba muy silencioso, el silencio perfecto para que alguien duerma.

—Escuchan eso? —preguntó Marcus.

—No escuchamos nada Marcus, ¿por qué nos obligaste a parar?

—Exacto, está demasiado silencioso, nunca nada permanece tanto tiempo en silencio, algo está mal —dijo arrodillándose en el suelo, estaba tocando algo, ¿Qué mierda era eso?

—Qué haces? —se me adelanto Liam a preguntarle.

—Mierda, ahora sé lo que es esto —dijo mientras se levantaba y nos mostraba un líquido negro.

—Ilústranos —dije sarcástico.

—Problemas, tenemos que irnos ahora, o será demasiado tarde, encontraremos otro camino —dijo Marcus asustado, en verdad asustado, corrió hacia el Lambo.

—Deberíamos correr tam... —comenzó Cameron riendo pero luego paro cuando todos escuchamos un ladrido, uno fuerte, pero solo era un perro, ¿a eso le tenía miedo?

—Chicos... —comenzó Liah quien se había bajado del coche, supuse que Nick seguía dormido— Eso no es un perro.

Volteamos a ver a lo que se refería Liah y tenía razón, ese no era un perro, era una abominación, tenía unos...dientes, unos muy afilados, y cuando creí que no podría ser peor se abrieron a la mitad dejando ver más dientes filosos y de diferentes tamaños era una trituradora andante, ¿Cómo eso era posible?

Corrimos hacia los coches como lo había hecho Marcus, él sabía exactamente lo que estaba pasando, él sabía que eran esas cosas y porque eran así, eran 12 abominaciones, pensé en decirles perros pero estaba muy en claro que esos no eran perros.

Cuando Lucas, Cameron y Liah se metieron al coche entonces ya pude meterme yo, tengo que asegurarme de que todos estén bien aún incluso si se tratara del maldito humano Nick. Entre en el coche, esta vez yo iba a manejar Liam al principio se quejó pero luego acepto.

—Marcus, algo que quieras decirnos? —hablo Cameron por la cámara apuntando a Marcus, me dio un poco de risa.

—Cálmate rizos definidos —dijo Marcus mientras fingía tocar los chinos de Cameron por la cámara.

—Marcus —dije yo furioso y sin saber que hacer porque no había otro camino y eso él lo sabía porque antes de que comenzara todo nos había dicho que no habría otro camino, solo uno, ni atajos, ni nada, solo un camino— ¿Qué son esas cosas?

—Bueno —comenzó sacando su botella de sangre, mierda no— a donde estamos a punto de ir...digamos que tienen su propia seguridad y con propia me refiero a que ellos la inventaron —entonces Marcus sabía a qué nos enfrentaríamos en el lugar al que vamos— el señor de la casa, tiene muchos científicos a su disposición, y él es muy exigente con lo que quiere, hubo una falla en el laboratorio y bueno esas cosas fueron la falla —dijo mientras daba un sorbo a la botella— al parecer al señor no le importo, no se enojó, sino lo contrario los amo, se dio cuenta de que podía controlarlos, solo él podía.

La Hija de DraculaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora