La Hija de Dracula

Capitulo 41: El Final

*~Narra Liah~*

—Estas lista? —le susurré a Luna mientras estábamos lo suficientemente alejadas de los chicos.

—Lista —me sonrió confiada, lo cual me hizo sentirme menos asustada.

Caminamos por todo el "patio" y fuimos acercándonos hacia el castillo de Nick, teníamos que ser bastante cuidadosas porque Nick no era un vampiro, era alguien poderoso y no un tonto como para no darse cuenta de nosotras.

Entramos al castillo por un pasadizo, Luna lo conocía, me había dicho que no era la primera vez que se encontraba aquí, eso me produjo un poco de curiosidad.

Caminamos y nos encontramos a muchos hellhounds y a muchos vampiros, ninguno que podría ayudarnos, cuando creí que estábamos pérdidas visualice a Emiliano estaba hablando con otros vampiros.

—Qué haces? —me preguntó Luna.

—Lo conozco, el podrá ayudarnos —le dije mientras nos acercabamos a él.

Después de que Emiliano se quedara sólo, avanzamos hacia el, hice un pequeño hechizo para que solo el pudiera escucharnos y vernos.

—Emiliano —dije detrás de él.

Emiliano por un segundo estaba espantado, pero en cuanto reconoció mi voz todo estuvo bien, le conté todo lo que teníamos planeado pero sólo a él con otro hechizo haciendo que nada ni nadie pudiera escucharnos.

El aceptó en ayudarnos y en cuanto estuvimos todos listos comenzamos la siguiente fase del plan.

Encontrar a Katherine.

Emiliano nos mostró en donde mantenían a Katherine, nos dijo que él no podría avanzar más, ya que podrían verlo pero que nosotras avanzáramos con cuidado porque no sabía dónde podría estar Nick.

Y así lo hicimos. Abrimos la gran puerta de roble que se encontraba justo en frente de nosotras con un hechizo, nadie nos vio, en cuanto entramos ví a Katherine.

Estaba amarrada, dos cadenas en sus brazos, otras dos en su cintura, y dos en sus piernas, creí que eso no era tan mal hasta que una máquina se movió haciendo que se estiraran las cadenas, de la piel de Katherine salia sangre, quise  gritar pero Luna me callo con su mano y señaló a un lado de Katherine, era él, Henry.

—Sabes qué no disfruto esto Kath —comenzó a decir el, maldito imbecil.

Kath se quedó callada, ella nunca se quedaba callada, quiero llorar, no puedo verla así, y no me imagino lo que haría Joseph de verla así, tan lastimada, no sólo fisicamente, sino emocionalmente.

Luna y yo nos miramos, era hora de comenzar el plan, recoste a Katherine que Joseph nos había dejado controlar a nosotras a nuestra propia manera.

Luna comenzó a conjurar un hechizo que mantendría en un sueño profundo a Henry mientras sacaba mis a Katherine de aquí.

En cuanto Henry se dió cuenta de que Luna estaba ahí, visible, intento matarla pero ya era demasiado tarde el caía al suelo durmiendo pero no teniendo un buen sueño, por supuesto que no, le dimos la peor pesadilla en la que pudiera pensar.

Después de eso yo también me volví visible, Katherine estaba tan agotada que ni si quiera nos había visto hasta que le toque la mejilla.

—No te preocupes Katherine, estamos aquí para ti —le dije mientras Luna le quitaba las cadenas.

—Oh no —dijo Luna en cuanto tocó la mano de Katherine.

—Qué sucede? —le pregunté.

—Nada...es sólo que está demasiado débil.