Capitulo 23: "Es hora de tu interrogatorio"

4.8K 288 7
                                    

Me levante más temprano que todos, quería estar listo sin olvidar nada, salí de la habitación eran las 7:30, todos seguían dormidos baje las escaleras que estaban allí para poder ir a recepción, volví a sentir que alguien nos vigilaba o bueno a ellos, porque yo estaba en recepción.

Era la misma persona, podía sentirlo, observe un poco más, era una chica, rubia, mas rubia que Liah, traía puesta la túnica que usaban los druidas como el de Dracula, esas túnicas te mostraban que ellos tenían un amo, y era poderoso y temido.

Estaba observando nuestras habitaciones al parecer acababa de llegar porque no se percató de que yo la observaba, lo cual me daba una ventaja, podría capturarla y hacerle preguntas, pero necesitaba ayuda...y desgraciadamente nadie puede ayudarme.

Camine sigilosamente hasta donde estaba ella, corrí y me puse detrás de ella, sin que lo notara, no por nada había ganado el desafío de silencio en el instituto, estaba listo para inmovilizarla, le tape la boca con una mano y con la otra saque mi cuchillo y se lo puse en el cuello.

-Es hora de tu interrogatorio -dije agresivo mientras la llevaba hacia mi cuarto.

Comenzamos a subir las escaleras, luego, caminamos un poco hasta que llegamos a la habitación de Liah y Nick, toque la puerta.

-Arriba -les grite.

Caminamos otros pasos hasta llegar a la puerta de Liam y Lucas.

-Arriba -también les grite.

Caminamos otros pasos y llegamos a mi puerta, la abrí note que Marcus ya estaba despierto. Cuando entre se sorprendió mucho al ver a la chica rubia, la chica tenía unos 27 años, bueno parecía de 27. Le hice una seña a Marcus para que despertara a Cameron, el al principio no hizo nada, luego revoló los ojos y lo hizo.

-Que quieres?! -le gritó Cameron a Marcus, Cameron abrió bien los ojos y noto a la chica con mirada fría, se incorporó rápidamente y me ayudó a amarrarla en una silla.

-Hierro -gritó la druida.

-Tu favorito -le sonrió Marcus.

Se escucharon unos golpes en la puerta, supuse que eran los chicos, y así fue, eran ellos todos habían llegado, todos se quedaron asombrados al notar a la druida amarrada en la silla. Entraron callados sin hacer preguntas, lo cual me sorprendió no de Liam o de Lucas, sino de Liah y de Nick, son los que se la pasan preguntando de todo.

-Bien -comencé parándome con los brazos cruzados- ahora que todos estamos, empecemos -dije cuando tome una silla la voltee y me senté en ella.

-Quién eres? -le pregunté agresivo.

-Una servidora -dijo ella sonriendo falsamente.

-La perra de alguien, eso lo sabemos -dijo Marcus dándole una de sus típicas sonrisas de que nada le importa y que para el todo es aburrido, ella lo vio de mala manera.

-Qué hacías espiándonos? -le preguntó esta vez Liah, ella la volteo a ver confundida y sorprendida.

-Interesante -dijo mientras la veía de arriba abajo- les tengo un mensaje.

-Y cuál es? -le pregunto Liam, no volteo a ver a Liam me vio a mí.

-Dejen de buscar, el tiempo se acabó, perdieron -dijo mientras sonreía.

-Qué le hicieron? -preguntó Nick, yo estaba furioso.

Ella no respondió, solo se reía.

Tome un cuchillo de hierro, uno muy especial para perras como ella, espero que sea de su gusto. Se lo encaje en el estómago, dejo de reír y comenzó a gritar, mientras yo seguía dándole vueltas en su estómago.

La Hija de DraculaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora