Capítulo 2

793 71 7
                                    

Al día siguiente, despertó feliz, por un momento pensó que todo había sido un sueño, pero al ver el brilloso polvo verde que llegaba hasta su ventana, supo que era verdad, la noche anterior había conocido a su "alma gemela". El día marchó normal, desayunó con Leopold y Snow, luego se encerró en su cuarto hasta que el rey entró en busca de ¿"amor"? ¿"cariño"? ¿"placer"?... Como siempre, después de hacerlo, él se marchó feliz, dejando a una Regina lastimada y asqueada.

La cena llegó finalmente, Regina comió lo más rápido posible y se fue a su habitación, el rey ya estaba acostumbrado a los berrinches de la reina, por lo tanto no dijo nada al verla irse. Por otro lado, ella, al llegar a su habitación comenzó a guardar algunas prendas en una pequeña mochila, no era mucho, solo lo esencial.

La hora al fin llegó y como pudo se las ingenió para salir del castillo sin ser vista. Llegó al bar y ahí estaba él, sentado frente a la barra, esperándola. Su mirada se cruzó con esos maravillosos ojos azules y sonrió -Estoy lista- Dijo al llegar hasta el.

Le dio un beso rápido -Bien, no hay tiempo que perder. Hay que irnos.

Robin cargó las cosas de Regina y salieron del lugar, comenzaron a caminar rápido, adentrándose en el bosque, pero sin ningún destino fijo, lo único que importaba en ese momento era alejarse del reino.

***

Pov Regina

Dos meses después...

Las herraduras de los caballos chocaban con fuerza contra el suelo, una docena de hombres acompañaban a Leopold en su persecución... Una persecución hacia dos "fugitivos" que traicionaron al Rey: Robin y yo.

Habíamos estado tranquilos estos últimos días, siempre lográbamos ocultarnos de los guardias con bastante tiempo de anticipación; pero esta vez fue diferente, nos encontraron mientras dormíamos, pero afortunadamente nos dimos cuenta antes de que pudieran atraparnos, tomé mi mochila y subimos a nuestro caballo, comenzamos a avanzar lo más rápido que pudimos.

El caballo se estaba cansando, me agarré de Robin y miré hacia atrás. Estaban muy cerca de nosotros, pude notar la penetrante mirada de Leopold fijada en mí -¡Nos van a alcanzar!

-¡Agárrate fuerte! Tomaremos un desvío- Hice lo que él me dijo y recargue mi cabeza en su espalda, cerrando los ojos. De pronto el animal comenzó a correr con más fuerza y sentí un tirón al cambiar de dirección.

Las pisadas detrás de nosotros se desvanecieron, voltee nuevamente hacia atrás, ya no se veían -Creo que los perdimos. Robin asintió, pero aún así seguimos avanzando.

Después de una hora, por fin nos detuvimos. Robin me ayudó a bajar del caballo y me quitó la mochila, sacó una manta y la extendió en el suelo -Listo, duérmete aquí y yo me quedaré cuidando- Dijo, mirándome con aspecto serio.

Me acerque a él y acaricié su mejilla -¿Qué tienes?

Bajó la cabeza -Regina... Yo... No creo que merezcas esta vida. Fui muy egoísta al proponerte huir. Antes tenías una vida tranquila, siempre estabas segura en el castillo. Pero yo no tengo nada que ofrecerte, desde que estamos juntos hemos estado escapando.

-Eso no importa. Yo quiero estar junto a ti. No necesito joyas, lujos, dinero... Sólo necesito estar contigo para poder ser feliz- Le tomé por el cuello y lo besé.

Tomó mi mano y me miró -¿Estás segura, Regina? Tal vez aún podemos hacer un acuerdo con el Rey.

-Estoy segura. No quiero volver con él.

-Está bien.

Lost MemoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora