Capítulo: 10

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*CLAPP CLAAAP CLAPPPP*

Odio muchísimas cosas, pero el sonido de las alarmas me supera.

Es domingo y la verdad es que no tenía ganas de levantarme de la cama, no sé si por todo lo que me pasó ayer o porque básicamente no quería moverme. Pero aun así me levanté. Me puse una bata ya que llevaba un pijama de pantalón corto y de maga corta. Problemas de la mudanza, no encuentras lo que tú quieres.

Me hice unas tostadas y un zumo de naranja ya que era la una y no me apetecía para nada leche.

Me llevé el desayuno al salón y empecé a comer mientras veía en mi portátil la serie de Pretty Little Liars. Cuando terminé limpié todo. Pero de repente caí en que estaba sola en mi casa ¿Dónde está mi madre?

La verdad es que me asusté pero luego decidí no darle importancia. Podría haber ido a comprar comida, o a ver a mi padre, o...

Pero el sonido del teléfono interrumpió mis pensamientos.

-¿Quién?

-Hola buenos días. Soy Teresa, médica del hospital general.

Mierda, es donde está mi padre

-¿Qué? ¿Qué ha pasado con mi padre? ¿Ha empeorado?

-Tranquila señorita, hablo para informarte de tu madre no de tu padre.

¡¿QUÉ?! Esto no puede ser....NOOOOOO

-Voy enseguida- dije colgando a la médica.

Me vestí con lo primero que pillé. Unas mayas negras, una sudadera gris, unas convers negras, y una cazadora de vaquera con mangas y capucha de chándal.

Cogí mi móvil, las llaves y fui directa a la parada de bus. En el bus revisé mi móvil. Había un mensaje de Maggie:

-¿Te apetece quedar esta tarde?

-He tenido un problemilla, yo te aviso si puedo. Besoss.

Cuando me dejó en el hospital, corrí hacia la entrada. Cuando vi una médica le pregunté y me llevó directa a una habitación de hospital.

Y ahí estaba mi madre.

-¡MAMÁ!- dije, y corrí hacia ella a darle un enorme abrazo.

Tenía que decirle unas cuantas cosas, pero no aquí

-Bueno, tu madre ha sufrido unos ataques de nervios...y ha tomado unas cuantas pastillas que no le correspondían.

¿Qué? ¿Mi madre? Pero solamente asentí con la cabeza, aquí no iba a decirle nada.

-Le recomendamos que vaya a un psicólogo le irá bastante bien, tiene bastantes nervios y no queremos que se vuelva a repetir.

Cuando nos dieron toda la información nos fuimos a casa.

-¿Qué estabas pensando mamá?

Ella agachó la cabeza

-NO, ¿¡Qué estabas pensando joder?! . No ves que esto es lo último que podemos hacer. Ya sé que papá está mal pero no ves que no podemos darle más disgustos. Y menos así. También piensa en mí joder...no puedo teneros a los dos en el hospital mamá, no puedo.

Y ella se dirigió a mí y me dio un abrazo, un abrazo fuerte, muy fuerte.

-Aria, papá ha empeorado.- Me susurró en el oído a la vez que lloraba

Y entonces fue cuando se me bloquearon todos y cada uno de mis músculos.

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Holaaaaaa, espero que os este gustando. ¿Qué pasará con su papá?


ASÍ SOY YO, ARIA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora