—Perdóname —soltó, haciendo que mis pensamientos se esfumasen—. Desconozco tu situación del porque no quieres hablar, pero está bien, lo respeto y prometo no volver a tratar de incomodarte o ha apresurarte con esto.
Yo solo asentí, creo que el trataba de comprender cómo me sentía, aunque los dos sabíamos que esto nunca iba funcionar si yo nunca estaría dispuesta a presionar play, a seguir adelante con mi vida y a decirle adiós al pasado.
—Quiero que confíes en mí —vi que quizo hacer algún movimiento con su mano de nuevo, pero se detuvo y prosiguió—. Te contaré algo sobre mí, algo con lo que nos haga avanzar al menos unos cuantos escalones, o me doy con uno en realidad.
Yo solo lo miré con toda la atención. Él trataba de que esto funcionara de alguna manera, y me sentía algo mal por no hacer un gran mayor esfuerzo para que esto funcionara de parte mía.
—Cuando yo nací mis padres se divorciaron poco después, ya que mi padre nunca creyó la idea de que yo fuese su hijo. Creía tal vez que mi madre lo hubiese engañado, porque él y mi madre son de piel morena, y... Como te darás cuenta, mi piel es blanca. Como mamá y papá se divorciaron, yo viví con mamá hasta mis seis años, antes de cumplir mis siete ella falleció. Nunca supe la razón o la situación del porqué o cómo paso, yo era muy pequeño y me lo ocultaron, lo siguen haciendo. No tenía más familiares puesto que mi padre y la tía Blady que vivía en Ámsterdam, así que aquel señor llamado mi padre, me abrió las puertas de su casa. Pero nunca me ha tratado como un hijo al que ama, me trata más como una responsabilidad que te dan sin que quieras tomarla, pero que desgraciadamente tienes que aceptarla y hacer algo de ella. No tengo familiares más que la tía Blady ahora y sus hijos, pero aún están lejos, aunque vienen cada Navidad a pasarla conmigo. Mis primos son de mí misma edad y no la llevamos bien.
Son los únicos que forman parte de mi corazón, nunca alguien más a querido formar parte de el. He tratado de conversar con alguien, chicos y chicas con los cuales pueda formar un lazo, pero siempre me ven como un bicho raro o simplemente me evitan con la palabra "matado".—Pero sabes algo, —me miró sonriente, como nunca antes lo había visto. No se miraba triste para nada, su sonrisa era real —. A pesar de haber perdido a la persona más importante de mi vida, mi mamá, y nunca obtener el amor de mi padre. Yo sigo siendo feliz, sigo intentando que alguien entre a mi corazón; no puedo quedarme con esa espina enterada en mi pecho, tengo que seguir adelante por mí, porque piénsalo, ¿qué sería de mí si me quedará ahí estancado lamentándome todo el tiempo? Desaprovecharía la única oportunidad de vivir y formar mi vida por cosas que sucedieron y que si, lamentó y extraño, pero no me quedaré atormentándome por eso, porque sería arruinar también mi vida, y la vida es para disfrutarla a pesar de las una y mil dificultades que pasaron y seguir pasando.
(...)
Cuando esperaba justo afuera del instituto, sentada en una banca, pude ver como también esperaba Sean a sus padres delante de la cerca del instituto, pero lo hacía con aquella chica del coro, Megan. Parecían estar divirtiéndose, los dos reían y hablaban de algo que yo claramente no podía escuchar.
Poco después llegó el automóvil de los Steinfeld, tocando el claxon para llamar nuestra atención.
Me levanté rápido y casi corrí hacía el auto, quería llegar ya a casa.
Subí al auto y me coloqué el cinturón, después mire hacia delante y hice un ademán a la señora Verónica que me sonreía. Volteo después hacia Sean con aquella chica y sonrío, parecía gustarle que Sean estuviera conviviendo con aquella chica.Ahora no venía el padre de Sean, probablemente se encontraría trabajando.
Sean se acercó al auto junto con la chica y los dos saludaron felizmente a Verónica.
Antes de que empezasen a hablar sobre alguna cosa los tres, yo me coloqué mis auriculares y comencé a escuchar Creep de Radiohead a todo volumen, realmente no me interesaba en absoluto su conversación, y yo quería pensar un poco de lo que me había dicho Scott en el almuerzo.
(...)
Subí a mi habitación, retire las prendas que traía y me coloqué mi pijama, era demasiado temprano pero mi cabeza había estado pensado desde que había llegado del instituto sobre lo que Scott me había platicado.
No sabía cómo exactamente había llegado a esta conclusión, pero sabía que esto había sigo gracias a Scott y estaba agradecida con él.
N/a:
Perdónenme otra vez por la demora, pero ya no tengo internet, así que me será más complicado actualizar.Y... Por otro lado, estaba pensado en cambiarle el nombre a "Scott" por otro, pero no sé exactamente cuál. Quería algo no muy usual, pero lindo. Pero no encontré nada, espero y me puedan ayudar con esa idea. Solo tengo uno, Derek ¿qué les parece? Si quieren pueden decirme ideas.
El capítulo es corto, pero creo que interesante, saben ahora más de Scott y andará Sean con esa chica?