Capitulo 21-"Problemas de hermanos"

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Aarón POV

-Bien Kelsey, te sacaré de aquí-Le susurre cerca de su dormida cara, ella necesita descansar.

-Cierra la estupida boca Aarón-Balbuceo, yo solo sonreí, aún dormida esta chica era dura.

Decidí que llevaría a Kelsey a mi casa, si, joder a mi casa, tambien tengo que llevar a mi jodido hermano mayor para hablar "tranquilamente".

No.

Claro que no hablaríamos tranquilamente, no se podría hablar de esa forma con el, será por las malas, y se pondrá bastante feo, que gran lío.

Había poca gente en el bar y el lugar en donde estábamos, estaba escondido, haci que ninguna persona vio lo que sucedía.

Tome a Caleb y lo puse en mis hombros, y vaya que pesaba como la mierda, después tome a Kelsey de la misma forma en que tome a Caleb pero con más delicadeza, y joder los dos pesaban como la mismísima mierda.

Me encaminé rápido al auto evitando las curiosas miradas de los borrachos que se encontraban ahí, abrí la puerta y metí a Kelsey en el asiento del copiloto

Encontré unas cuerdas haci que decidí amarrar a Caleb y después meterlo a la cajuela. Arranque el auto conduciendo hacia casa.

Marque el número de la única persona que me podría ayudar en una situación como esta.

-¿Ryder?-Dije.

-¿Qué mierda quieres Aarón?-Dijo de mala forma, de seguro aún está enojado por la forma en que le hable esta mañana.

-Ryder deja los malditos dramas, necesito que me ayudes, voy para casa, necesito que distraigas a todos-Dije apresurado aún manejando y dando vuelta del camino.

-Cuenta conmigo imbecil-Dijo yo sonreí de lado, lo sabía.

Visualize mi casa y estacione el auto sin hacer mucho ruido, decidi que después vendría por Caleb.

Supuse que Ryder estaría distrayendo a todos, haci que cargue a Kelsey en mis brazos y abrí la puerta de la casa sin hacer mucho ruido.

Se escuchaba en la sala de estar, la voz de Ryder, haci que decidí darme prisa y dejar Kelsey en mi cuarto, subí las escaleras rápidamente hasta dar con una puerta totalmente negra, mi cuarto, mi espacio personal y estrictamente prohibido para cualquier maldita persona que pisara el puto mundo.

Pero claro, es Kelsey de la que estamos hablando, por esa chica haría lo que fuera, incluso dejarla entrar a mi mundo.

Pero... ¿Cómo dejarle entrar a mi mundo, si mi mundo era ella?

Maldita sea, malditas cursilejadas que digo.

La recosté en mi propia cama y le eche una manta que me encontré por ahí.

No pude evitar detenerme un momento, no pude evitar no mirarla, no pude ni siquiera evitar tocar ligeramente su suave rostro, sus perfectas fracciones, sus largas pestañas, y quitar algunos mechones que interrumpían mi vista hacia su rostro.

Me estaba enamorando de ella, de su única personalidad, me estaba enamorando sin darme cuenta, lenta y pausadamente de Kelsey O'Connor.

Parecía un maldito Ángel, que claramente no era, esa chica era el diablo, era el jodido diablo, pero me encantaba.

-Volveré por ti, mi chica-Susurre depositando un beso en su frente.

Al momento de que mis fríos labios hicieron contacto con su tibia piel, una extraña corriente cruzo sobre mi cuerpo y una sensación de hormigueo se quedó en mis jodidos labios.

Unbreakable.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora