Los Spector

Vuelta a la realidad

Lunes, 20 de octubre de 2014

Odio la escuela. Es en serio, la odio, a veces pienso que la odio muchísimo más que a Emma y eso ya es decir demasiado. Pero bueno creo que esto se está convirtiendo en algo con demasiado odio y no quiero hacer eso, de hecho he estado pensando en hacer unos cambios desde hoy y he decidido comenzar a sonreírle a todos, no importan las circunstancias. Lo cual me recuerda, que tengo que hacer que dos de mis profesores se enamoren.

El clima fresco de Newport combinado con mis pocas ganas de asistir a clases el día de hoy es algo así como si a Frank Abagnale le pusieran millones de dólares y un uniforme de piloto de PanAm enfrente. Lo cual no tiene sentido. No sé porque demonios he dicho eso.

—¡Sky, hora de levantarse! —la voz chillona de Melissa me da ganas de meterle un calcetín a la boca. Pero no lo haré, es mi madre, por supuesto que no lo haré.

Suelto un gruñido desde debajo de mis sabanas y me desperezo para levantarme y enfrentarme a la cruda realidad de ir a Salve a verle la cara burlona a todos los idiotas que se dieron cuenta de mi suspensión por la pequeña broma del día del baile de otoño.

Me levanto y me dirijo a la ducha en donde posiblemente pasare los siguientes quince minutos, haciéndome a la idea de que ya solamente me faltan siete meses de tortura universitaria y que todo acabara pronto para irme de Newport. Eso es lo que mi madre quiere que haga y eso hare, tal vez busque trabajo en Nueva York o algún lugar cercano. Jerry y yo hemos hablado de eso más aún no estamos de acuerdo hacia donde largarnos pero supongo que ahora que Ryder está aquí todo cambiara, ¿Cómo le hare? ¿Querrá Ryder irse conmigo? Tal vez él tiene planeado regresar a Belfast y conseguir un trabajo allá, a final de cuentas ese es su hogar y yo no podría hacer nada para cambiarlo aunque mi corazón se rompa en millones de pedazos. Todavía no llegamos a decirnos "te quiero" como para que yo ya esté pensando en algo a lo que aún le falta mucho tiempo, tal vez para entonces ya ni siquiera sigamos juntos y yo ya estoy mortificándome, pero, oh vaya, ahora me mortifica más la idea de no estar con él. ¿Por qué me da tanto miedo quedarme sin Ryder? ¿Por qué le tengo tanto miedo a que él regrese a Belfast y se olvide para siempre de mí? que tenga hijos, una esposa que sea una delicada dama que sabe que cubierto se ocupa para que y que use trajes sastre hechos a la medida, que tenga dos hijos, niño y niña casi tan perfectos como ella y que se olvide de la chica torpe y busca pleitos de la que se enamoró en la universidad. Pero la pregunta del millón es, ¿está Ry enamorado de mí de verdad?

¡Basta, Skyler! Suficiente con las alucinaciones. Si dios, todo poderoso quiere que eso suceda, aunque quieras impedirlo, sucederá. Ahora solamente debo disfrutar el momento y olvidarme de esa futura chica irlandesa con la que posiblemente se case mi irlandés. Exactamente, en estos momentos es MI irlandés.

Me miro en el espejo y observo la mala decisión de atuendo que he tomado el día de hoy. Los vaqueros negros, la camiseta holgada del mismo color, los Nike Air Force que tanto me gustan y la chaqueta de mezclilla que mi subconsciente me ha exigido que use. A final de cuentas no me veo tan mal y es que la verdad yo no soy una Emma a la que le gusta usar tacones para la maldita universidad, aparte, este atuendo queda perfecto con el Vaydor que Mark me ha regalado. El premio de consolación para su pobre Lucky Clover. Me muero de ganas de ver cómo le parten la cara, aunque a la vez quiero que gane porque no se me olvida que me prometió que si él ganaba yo iba a tener la oportunidad de mi vida de golpearlo y hace mucho que quiero hacer uso de mi buena derecha de nuevo.

Mi celular suena en la mesita de noche a un lado de mi cama cuando estoy teniendo una contienda acalorada con mi cabello para que se quede ordenado en un solo lugar, camino hasta dónde está y en la pantalla encendida se lee con letras brillantes: «Duendesillo ha enviado una imagen», sonrío. Ryder siempre me envía imágenes, si no son fotografías de Gato son de él mismo o de alguna cosa que hacen Rover y Rainbow. Abro el mensaje y esta vez es una fotografía de él mismo, la mitad de su cara se muestra en la pantalla, tiene la lengua de fuera y sus dientes delanteros parecen los de Bugs Bunny, mi hermoso conejo.