"Mis Ocho Bebés"

Formalizando las cosas (2/2)

Rider estaba en la casa de los recientes padres, teniendo una tarde bastante divertida, se sentía como su tío y le encantaba cuidarlos, pero no pudo disfrutar el rato con todos mientras uno, uno solo de ellos no parecía disfrutar de su compañía, hasta quería que se fuera, el ciclista se la pasó pensando en que le había hecho, siempre los trató bien, pensar tanto hacia sentirlo mal, así que fue a preguntarle al niño arrinconado que le pasaba.
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Por otro lado, Saitama y Genos estaban entrando en el restaurante al cual habían reservado la mejor mesa según ellos, fueron a sentarse, hablaron de cosas normales, algunas estúpidas por parte de Saitama, pero en general se estaban divirtiendo en la platica, hasta que llegó la mesera a tomar su pedido, uno creería que seria una mesera normal, que realmente no le importaría de lo que hablaban los clientes pero esta mesera era especial; una chica llamada Monserrat que era, según ella, la fan #1 de Genos, y no era como todas las otras, ella hablaba todo el tiempo sobre el, si alguien intentaba hablar mal de el, salía y lo defendía, aunque nunca estuviera cerca de ella, decía que era su novio, en total una fan loca y lo peor, es que no soportaba ver a “su” Genos con otra persona, a primera ella se emociono por ver a su ídolo en el lugar donde trabajaba, tanto que desde la distancia fue corriendo directo a la mesa a abrazarlo, cosa que hizo sentir raro a Genos.

–¿Quién eres?– Dijo el cyborg extrañado, ante la mirada también confundida de Saitama.

–¡Oh Genos mi amor, soy tu más grande fan, yo...!– Paro sus palabras al voltear a ver a su acompañante, su cara de total felicidad cambio internamente a una enojada, volcanes en su interior explotaron. Tuvo que contener la rabia para no asustar a su amado y fingió total alegría, evitando abalanzarse a matar con sus garras a Saitama (si pudiera :v).

–Ah... ¿Tomaras nuestra orden?– La camarera regreso de su mundo al escuchar las palabras del calvo.

–Si... Claro.– Sus dientes chirriaban al contestarle “¿Y tu que haces con mi Genos? ¡Vete de aquí zorra!” (Me muero, estoy escribiendo cosas fuertes :'v)

Después de que ambos les dieran su orden, la chica volvió a salir corriendo, con lágrimas amargas en su rostro, inmediatamente un plan maligno se le vino a la cabeza.

–¿Qué le pasa a esa chica?– Preguntó el calvo.

–No lo sé, así son la mayoría de mis fanáticas, honestamente no se que les emociona de mi, soy alguien común y corriente, usted debería ser el más popular.–

–Claro Genos, no tiene nada de raro ser un cyborg que lucha contra el mal.– Dijo en tono irónico.

–Todo el mundo podría ser un cyborg si quisiera.– La tostadora pensó que sus palabras eran coherentes, aunque para Saitama eran muy extrañas.
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Rider después de recibir palizas, quemaduras inofensivas y travesuras, se canzó de tratar de ser el amigo de ese niño; trató de hablar con sus hermanos para averiguar por que tanto rencor le tenia, sólo obtuvo respuestas de que era un llorón y que quería a sus padres con el y que dejara de intentar razonar porque los otros mini-genos también intentaron, pero prefiria quedarse solo a que jugar con sus hermanos, triste pero se le pasaría algún día.

–No importa señor ciclista, así es el todo el tiempo, pero... ¿Me puedo subir a sus hombros otra vez?– Con una cara de cachorrito este bot logró su cometido, atrayendo las miradas de los otros que también querían subirse, pronto Rider quedó cubierto de mini-genos y cayó al suelo, riendo y bastante agotado de cuidar 8 niños, el ciclista cerró sus ojos. Mala idea.
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–Mira, no soy bueno siendo romántico pero, tu eres la única tostadora que necesito en mi vida.– Fue su mayor esfuerzo del sensei de decir algo cariñoso, pero de su mente no salían más que frases de amor de la web, las cuales trato de modificar haciéndolas pasar por suyas, era bastante tonto, pero a Genos le gustaban sus cumplidos raros que tenían que ver con comida.