Las clases habían terminado por el día de hoy.
—¿Liliana?— Allison y yo estábamos afuera esperando a nuestras mamás.
Esta vez no me iría con ella.— Esta noche hay luna llena, las manadas se juntan en los bosques de la ciudad, no muchos pueden controlar al lobo que llevan dentro, hoy no podré invitarte a casa.—No hay problema Alli, estaré bien.
Me aterraba un poco la idea de estar sola, mamá entraba muy temprano a trabajar y salía muy tarde.¿Y si pasaba de nuevo?
Esta vez nadie me salvaría.
—Veo que tomaste muy bien el tema de los lobos— dijo Alli sacándome de mis pensamientos.
—No lo se. Gracias al lobo que trae dentro tu hermano no salí lastimada.
Ella se acerco a mí y me abrazo.
—Todo estará bien, nada de eso volverá a pasar.
Allison era una buena amiga. Siempre en las buenas y en las malas. La quería.
El auto negro de Brenda llego y Alli se despidió.
—¿Segura que no te llevamos a tu casa?— se ofreció Alli.
—Segura— sonreí.
Después de que Alli se fuera, mi mamá tardo en llegar por mí y nos fuimos directo a casa.
Al llegar a casa, mire el lugar donde casi me atacaban y las lagrimas peleaban por salir pero no las deje.
—¿Mamá?
Mi madre estaba sentada en el sofá, escribiendo algo en el computador mientras tomaba una taza de café.
—¿Si hija?—pregunto sin despegar su vista del computador.
—Ya no hablamos como antes— no hubo respuesta— me refiero a que... Pasas mucho tiempo en el trabajo y no hablamos.
Alzo su vista y me miro por primera vez.
—¿De que quieres hablar?
—De nosotras, mamá. Pasas tanto tiempo en el trabajo que ni siquiera nos vemos.
—Mira hija, paso tanto tiempo en el trabajo porque tu padre nos abandono y ¿Cómo nos vamos a mantener si alguien no trabaja? Así que no me reclames y vete a tu habitación ya me hiciste enojar— su vista volvió al computador sin ninguna palabra más.
Las lagrimas salieron de mis ojos y con el corazón roto, subí las escaleras y me dirigí al cuarto.
Todo ese tiempo moje mi almohada de mis lagrimas, mis ojos estaban hinchados y mi corazón estaba roto por las palabras de mi madre. Yo no le importaba mas. Para ella yo solo era un estorbo.Me canse de llorar tanto y no tener a nadie con quien hablar que cerré mis ojos lentamente y caí dormida.
Desperté por el toque de una persona en mi rostro.
Abrí mis ojos lentamente y de un salto me aleje.
Había una persona en mi habitación.
Un hombre.
Y su mano había estado acariciando mi mejilla.
Me levante de la cama con cautela y el también se levantó.
—¿Quién eres?— era de noche y mi habitación estaba a oscuras, no veía nada.
—¿No me reconoces? Soy Ken
—¿Ken? ¿Qué haces aquí? ¿No se supone que es luna llena? Deberías de estar con la manada.
—Sé que es luna llena. Por eso vine a verte.
Ken comenzó a acercarse y yo me dirigí a la puerta de mi habitación.
—¿Cómo entraste Ken?
—Por la ventana. ¿Sabes? Cuando duermes te vez tan tranquila. Me gusta verte dormir.
Coloque mi mano en la perilla de la puerta lista para salir corriendo.
Él no era Ken.
Era su lobo dominante.
Cuando abrí la puerta, Ken llego detrás de mi con velocidad sobrenatural. Puso su mano sobre la puerta y la cerró con fuerza.
—¿A donde vas? ¿No quieres estar conmigo?— puso las manos a los lados de mi cabeza, acorralando mi cuerpo entre la pared y su pecho.
Esto se estaba saliendo de control.
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Los lobos aman #1 De LLA
Lupi mannariPRIMER LIBRO (No se necesita leer para comenzar con Cuando te Vi) Liliana es una chica normal como tú y como yo, pero pronto su mundo entero cambia cuando conoce a su mejor amiga Allison quien la invita a su casa se topa con el hermano mayor Ken H...