Herencia

94 7 2

por F-Ross

por F-Ross

Cuando entramos de nuevo a la habitación mi padre nos esperaba tranquilo.
Me acerqué a él y me felicito por la noticia. Enlazó su mano arrugada con la mía, nos miramos y lo miramos a Valentin.
-hijo, podrías darme unos minutos con mi hija- ¿hijo?o mi papá había empezado a delirar o yo me perdí de algo
-si, claro- contestó Valentin y se fue del cuarto, cerrando la puerta.
-veni , séntate - ordenó mi papa, dando palmadas a un lado de su cama.
Obedecí.
-Eliana, quería hablarte de cuando eras chica- mis ojos se empañaron. Mi plan era jamás decirle nada sobre el pasado. En verdad mi plan era no volverlo a ver.
-si, bueno es complicado y es tarde ¿no te parece si lo hablamos mañana?
-no, la verdad no sé si mañana voy a estar consiente o vivo, así que contármelo hoy, ahora
-pero pa
-AHORA
-bueno está bien
-bueno ¿por donde empiezo?
Las cosas que voy ya sabes. La muerte de mamá y de mi abuela. Luego de la boda ellos dos se fueron a ee.uu y me dejaron con su hijo, Sebastián, que tenia 19 en ese entonces -tome aire. Venia la parte dura - bueno el tema es que en ese tiempo me tenia como a una esclava, en todo sentido - aunque normalmente contaba esto sin llorar, porque ya lo había aceptado, ahora las lágrimas no paraban de salir -por cada cosa mal que hacia, lo que sea, me dejaba sin comer y luego, un día -baje la voz y sonreí. No podía creer que estuviera por contar esto.
-un día...
-...- me quedé en silencio mientras mi catarata personal se hacía más fuerte
-UN DIA QUÉ, ELIANA- volvió a decir mi padre, está vez más preocupado.
- un dia él.... un dia él.... -cuandl estaba a punto de decir lo que me pasaba la sala de hundió en un silencio mas profundo que el de hacia cinco minutos, parecía que todo el hospital estaba atento y quería saber q me había hecho mi hermanastro -ÉL ABUSO DE MI- lo grite. Pero lo grite tan fuerte que estoy segura que todo el hospital me escucho. Obviamente, yo seguía llorando a mares - cuando ustedes volvieron yo era como una mascota, vos pasabas mucho tiempo en su empresa y yo me quedaba con la víbora de tu mujer. Cocinaba, lavaba, planchaba, limpiaba y estudiaba mientras la bruja gastaba toda tu plata. Un día no soporte más, el no tener a mi madre y a mi abuela conmigo y tener que llevar una vida así, sin que en el colegio se enteraran me resultaba imposible, así que...trate de suicidarme, y ahí apareció Valentin en mi vida. Desde que tengo 16 que Valentin está siempre para mi, me cuida, me apoya, me hace reí, me mantiene viva. Cuando me escape pensaba ir a España pero no pude, así que viaje a Córdoba y lo conocí. Unos hijos de puta me empezaron a pegar y él y sus amigos me defendieron. Jamás voy a poder agradecerle todo lo que me aguanto y me aguanta. - Entre lágrimas y sollozo, mi sonrisa tomó protagonismo cuando empecé a hablar de mi novio - en serio papá, lo amo, lo amo muchísimo más que mi vida actual, la cual es casi perfecta según mis estándares, por él haría lo que sea, no importa el riesgo. Todo lo haría por él.
Al terminar la oración mi padre, quien también lloraba empezó a hablar.
-hija, yo no tenía idea de esta situación, en esa época la empresa no iba bien y por eso me quedaba tanto allá-comentó mi padre con dificultad, tomándome de la mano- prometo que mañana, cada centavo que tengo van a ser suyos, y a Andrea le estoy iniciando los planes de divorcio.
-pero papá, yo...nosotros no necesitamos tu plata y con eso no vas a arreglar las cosas- dije firme, aunque lo notaba arrepentido no le sería tan fácil.
Mi padre rió.
-sos igual a tu madre-puso su mano en mi mejilla- ya se mi amor que con eso no me voy a ganar tu perdón pero ¿qué puede hacer un viejo moribundo como yo para por ser compensarte? Nada. Así por lo menos me aseguro de que tengan el mejor futuro posible.
Lloraba cada vez más y más. Mi padre se moría y yo no era capaz de perdonarlo! ¿Qué clase de persona soy? Mi padre no hizo nada, literalmente nada.
-te perdono-susurre
-¿qué hija?
-QUE TE PERDONO!!!! Estas perdonado por todo pero por favor no me dejes- las piernas me temblaban así que mi papa me hizo un lugar en su cama y yo me acosté con la cabeza en su pecho.
Mientras él me acariciaba la cabeza yo seguía llorando.
- sabes mi amor, cuando te escapaste una amiga tuya me vino a ver a mi oficina, me acuerdo que parecía endemoniada, lloraba y gritaba, se abría paso entre mis recepcionista sin ningún esfuerzo. Entro a mi despacho y me contó que vos te querías suicidar o eso era lo que ella había visto cuando te vio el brazo una vez. Me contó que ella era tu única amiga, que en el colegio no hablabas y que te "cortabas" las muñecas. En principio no le creí pero esa noche entre en tu habitación, y la revise. Encontré navajas, hojas de afeitar y vendas ensangrentadas entonces ahí empecé a pensar que te habías matado. Entre en pánico, empecé a imaginar cómo iba a sería una vida en la que jamás te volviera a ver. Entonces empecé a fumar y a tomar, que al final es lo que me está matando, pero no importa- me miró a los ojos- el punto es que este momento es uno de los más preciosos en toda mi vida.
- Te amo papá
-Y yo a vos mi muñeca de porcelana - ese apodo me hizo recordar a cuando era pequeña, pero no dure mucho porque en seguida me rendí al sueño.